Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Siete Secretos 3, de Tom Taylor, Daniele Di Nicuolo y Walter Baiamonte

Siete Secretos 3, de Tom Taylor, Daniele Di Nicuolo y Walter Baiamonte
Guion
Tom Taylor
Dibujo
Daniele Di Nicuolo
Color
Walter Baiamonte
Formato
Cartoné, a color, 168 páginas
Precio
17,95 €
Editorial
Planeta Cómic. Junio 2023
Edición original
Seven Secrets 13-18

¿Lo bueno, si breve, dos veces bueno? Eso al menos es lo que reza el refrán. Aunque la verdad es que no sé si podría aplicarse a los Siete Secretos de Tom Taylor, cuyos dieciocho números fueron publicados por Boom! Comics entre agosto de 2020 y junio de 2022. En España ha sido Planeta quien nos ha ofrecido esta colección en tres tomos a imagen y semejanza de otras del mismo estudio como Once & Future o Hay algo matando niños.

Siete Secretos acaba a la misma velocidad que empieza

Una vez leído este último volumen de Siete Secretos me abordan serias dudas sobre si su desenlace es precipitado o no. Por lo general, todas las cuestiones que había ido planteando Tom Taylor desde el arranque han tenido su respuesta. Ahora bien, ¿es esta respuesta satisfactoria?, ¿era este el plan auténtico del guionista? Me temo que estas cuestiones sí van a seguir siendo interrogantes.

Siete Secretos

Desconozco si fue por imposición editorial o porque el guionista ha ido asumiendo un rol mucho más importante en DC, pasando de escribir tebeos tan satisfactorios como DCesos o Injustice a series de primer orden como su laureado Nightwing, Superman o los futuros Titanes. Los motivos poco importan porque el resultado final es el que es y, salvo que algún día seamos invadidos por una dimensión paralela a lo Fringe (donde la serie hubiera tenido otro desarrollo) nos tenemos que quedar con lo que tenemos y punto.

Siete Secretos tiene un final tan explosivo como su prometedor comienzo. Tom Taylor y Daniele Di Nicuolo son los maestros de ceremonias de un tour de force que va tan a todo rabo que no deja tiempo para asimilar buena parte de la información que ofrecen sus páginas. En estos últimos compases seremos testigos de la revelación de la relación de Caspar con el último y más importante de los secretos.

Siete Secretos

El tipo de historia, la relación entre los personajes y, sobre todo, el magnífico dibujo de Di Nicuolo conducen a que leer Siete Secretos sea lo más parecido a leer un shonen hecho en América y a todo color. Me explico: para disfrutar plenamente de la obra se requiere una suspensión de la credibilidad similar a la que uno debe tener al leer la maravillosa e inmortal Dragon Ball, donde el drama, la comedia, lo absurdo y los personajes de todo tipo y condición se suceden en una maquinaria perfectamente engrasada, en la que cada pieza tiene un lugar plenamente definido.

La comparación con Dragon Ball no es gratuita. Siete Secretos tiene un protagonista que acaba siendo mucho más de lo que parece, y cuya verdadera naturaleza es diametralmente distinta a lo que se nos muestra inicialmente. Tiene malos muy malos y malos muy ambiguos. Muertes, resurrecciones y motivaciones francamente gilipollescas. En este caso, hago referencia a que el gran villano al que vimos arrasar un país en el tomo anterior monta la que monta porque lo que más quiere en el mundo es tener amigos y recibir abrazos. En realidad es algo más complejo que esto, pero la esencia es esa.

Siete Secretos

En lo positivo destacar algo que hemos ido resaltando casi en cada obra de Tom Taylor que hemos reseñado en esta casa: su capacidad para escribir diálogos rápidos, ágiles, llenos de sentimiento que otorgan realismo a sus personajes. No nos olvidamos de que Taylor es todo un amo de pista que controla los elementos para dar a su público diversión y espectáculo. Elementos de los que Siete Secretos va bien servida.

Para el final dejo el escandalosamente maravilloso dibujo de Daniele Di Nicuolo (apoyado con la paleta de colores de Walter Baimonte). Este artista que. al igual que otros como Dan Mora o Abel, proviene de la cantera de ilustradores forjados en la franquicia de los Power Rangers, se come cada puñetera plancha con unas composiciones más propias del manga con viñetas de todo tipo y condición, cuya narrativa hace que leer Siete Secretos sea una experiencia similar a ver una película de acción del tipo de John Wick, Tyler Rake o The Raid. Menudas coreografías se marca el amigo. Y qué expresividad tienen sus personajes con esos primeros planos a los ceños fruncidos o caras de estupefacción según se iban revelando todos los misterios. Un placer para la vista, desde luego.

La edición de Planeta Cómic es correcta, sin más extras que una completa galería de portadas alternativas.