Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Masacre: Asesino, de Bunn y Bagley

Masacre: Asesino, de Bunn y Bagley
Guion
Cullen Bunn
Dibujo
Mark Bagley
Tinta
John Dell, Scott Hanna, Cam Smith, Roberto Poggi
Color
Edgar Delgado, Rex Locus, Dono Sánchez-Almara
Formato
Tomo con solapas, 144 páginas a color. 17 x 26 cm
Precio
14,50 EUR
Editorial
Panini Comics. 2019
Edición original
Deadpool: Assassin 1-6 USA

El Mercenario Bocazas y su viejo colega Comadreja han vuelto, y están imponiendo su marca especial de justicia sobre cualquier asesino a sueldo que no esté a la altura. Deja a los niños en casa, Verdadero Creyente, porque esta aventura de Masacre lo tiene todo.

Vamos a poner los puntos sobre las íes: Masacre es un asesino a sueldo, un mercenario. Sí, es verdad que también ha ejercido como Vengador, más un antihéroe que lo que se esperaría de un miembro de los Héroes Más Poderosos de la Tierra, pero es que el bueno de Wade Wilson tiene su corazoncito y, como comprobaremos varias veces durante la lectura de este tomo, un código ético. Me gusta el concepto del asesino con honor, algo que proviene de los clásicos ronin japoneses y que el cine de Hong Kong ha exportado con éxito más allá de sus fronteras. La complejidad del personaje de Masacre, fruto de su desquiciada psique, ha provocado que sea un mercenario amoral y sin escrúpulos, pero que al mismo tiempo se rija por un estricto código moral. Dicho en vulgo popular, mata sin pensárselo dos veces, pero sólo a los que se lo merecen. Eso incluye a traficantes, pederastas, proxenetas, televendedores (esta aportación es mía) y, por supuesto, otros mercenarios y asesinos. Tal vez sea ésta la miniserie con mayor ratio de cadáveres por página. No los he contado, pero si no se lleva el récord, al menos sí que se queda en el top tres.

Masacre: Asesino

En esta miniserie exploramos la faceta de Wade Wilson como asesino a sueldo, y para ello el guionista Cullen Bunn (Capitán América y los Vengadores, Death Follows) recupera el personaje de Comadreja, el amigo, agente y proveedor de armas de Masacre. Comadreja ahora es un hombre casado, se vuelve a hacer llamar Jack y oculta a su mujer su profesión como agente de operaciones encubiertas (Mentiras Arriesgadas, ese gran clásico). Un encargo que se tuerce por culpa del código ético de Masacre le provocará la enemistad del Gremio de Asesinos de Nueva Orleans, liderado por Belladonna Boudreaux (¿la recordáis? La ex-mujer de Gambito), lo que resultará en un letal juego del gato y el ratón entre el Gremio, Masacre, la asesina renegada Responso y Comadreja y su mujer Clarice, con fatales consecuencias. Lo que empieza como una aventura simpática y desenfadada (con mucha sangre y desmembramientos, eso sí) acabará tomando un cariz más macabro cuando salgan a la luz las oscuras motivaciones de uno de los personajes, un giro de guion que me ha hecho valorar aún más el trabajo de Bunn como guionista.

La aventuras de Masacre siempre se han caracterizado por tres cosas: la violencia desmedida, el sentido de humor gamberro y la autocompasión del personaje. Tras su descontrolada verborrea, Masacre oculta un gran dolor interior. Quiere ser un héroe (como ya sabemos, Spiderman es su modelo a seguir), pero acaba volviendo a las andadas en cuanto se le pone una pistola o una espada en la mano. Trata de compensar este comportamiento violento con el código ético que le acerca más al heroísmo, pero acaba haciendo daño a la gente que le rodea. Esta frustración de no poder ser un héroe perfecto y no poder proteger a sus amigos es lo que hace que en algunos momentos Masacre caiga en la introspección más deprimente. Estos tres aspectos abundan en este Masacre: Asesino. Tenemos sangre, chistes y autocompasión, una receta que Cullen Bunn ya ha adoptado como propia y que se ha convertido en la marca de la casa del personaje, con cada uno de los elementos dosificado en su justa medida (aunque en este Asesino tenemos más sangre que chistes y pesar, así que anda un poco descompensado). Este cómic es como esa sesión de cervezas con un amigo en los que empiezas riéndote de todo y acabáis llorando porque a uno le ha dejado la novia. A veces la catarsis es necesaria.

En el aspecto gráfico tenemos a todo un veterano de Marvel. Se trata nada más y nada menos que de Mark Bagley (Veneno: Protector letal, Ben Reilly: Araña Escarlata), el autor que co-creó a Ultimate Spiderman junto a Brian Michael Bendis. Bagley es un artista tradicionalmente muy ligado a la franquicia arácnida, sorprendentemente cumplidor de plazos de entrega a pesar del elevado nivel de detalle con el que impregna sus páginas. Sus años de experiencia con las entregas mensuales de Ultimate Spiderman le han dado la experiencia necesaria para ocuparse de cualquier encargo y salir airoso, y si bien no ha alcanzado el nivel de estrellato de otros compañeros con los mismos años (o menos) de experiencia, Bagley es el artista al que hay que llamar si quieres un trabajo bueno y en plazo.

Masacre: Asesino

Este Masacre: Asesino iba a ser publicado en España dentro de la colección Panini Las Minis de Masacre, pero al final se ha lanzado como tomo independiente, al igual que el reciente Masacre: Agente Secreto. Los motivos se nos escapan, porque el formato es el mismo que el de las Minis, y también recoge miniseries publicadas en EEUU en forma de grapas mensuales. Sea como sea, e independientemente del formato en que se elija publicar aquí, nos alegramos por que este material no deje de ver la luz en nuestro país.