Gracias a la buena acogida que ha tenido El duelo, e imagino que impulsado en parte por el arrollador éxito que tuvo Astiberri apostando por la reconstrucción del fanzine Us de Sara Soler, Fandogamia ha optado por recuperar Me das ansiedad, una colección de tiras de humor gráfico que su autora, Paula Cheshire, fue publicando en redes sociales durante la pandemia, y que tuvieron tan buena aceptación que decidió autopublicarse en forma de fanzine. Ahora Fandogamia recupera esas 64 páginas que vieron la luz hace dos años y las revisa y amplía con nuevo material inédito.

Pese a su título, y puede que condicionados porque El duelo era Medicina Gráfica al 100%, Me das ansiedad no es un conjunto de chistes o situaciones cómicas en torno a la ansiedad como enfermedad. Lo que vamos a leer en esta obra gira más en torno a la ansiedad existencial y la inseguridad que al mero hecho de experimentar un miedo irracional y un aumento del ritmo cardíaco ante una situación que no puedes controlar. Lo que Paula nos cuenta en estas viñetas es algo muy valiente, una apertura de su propia persona sin mirar atrás, sin reparar en la opinión que provoque en otras personas, y eso precisamente, es lo que la convierte en una obra que merece la pena leer. Es sincera y directa, sin más.

Para ello, e imagino que condicionada por la fórmula original de edición en redes sociales, cada página está conformada principalmente por una rejilla de cuatro viñetas, aunque va variando y veremos páginas con desde una hasta seis viñetas. Se nota que originalmente no estaban pensadas para editarse en formato físico, porque no existe hilo conductor ninguno, ni siquiera una temática conductora, sino que cada página es un pensamiento y una representación de lo que sentía su autora en determinado momento, teniendo en cuenta que estábamos viviendo una pandemia que a la mayoría le supuso estar encerrados en casa durante tres meses. De este modo, pasamos de una página que habla de su dificultad social a otra en la que la vemos quemada por el trabajo, juega con sus gatos, se retuerce de dolor por la regla, o a otra en la que reflexione sobre su propia madurez. El conjunto construye una visión de la protagonista y autora que resulta a la vez tierno y empático, porque en muchas ocasiones, o al menos en alguna de ellas, nos sentiremos absolutamente representados.

El dibujo, está en la línea de la otra obra publicada por Fandogamia, con un estilo orientado hacia el humor y claramente influenciado por el manga, con esas expresiones cercanas al slapstick a la hora de representar emociones. No obstante, y al tratar un tema bien diferente, no tiene la arrolladora fuerza metafórica que vimos en El duelo que, probablemente, la convirtió en una de las autoras a seguir por muchos de nosotros. Aquí se nota que eran viñetas con menos pretensiones, simplemente la de entretener y divertir (que no es poco), y tienen mucho más peso las situaciones que la manera de representarlas.

En definitiva, Me das ansiedad es una oportunidad para recuperar material antiguo de una autora con un potencial bien grande. Con un gran sentido del humor, una buena dosis de autocrítica y sinceridad por plasmar en papel cómo se siente en determinadas situaciones, estamos ante una lectura ágil, divertida y que nos hará reflexionar y en ocasiones sentirnos representados. Como siempre, una edición fantástica por parte de Fandogamia, con precios que ya raramente se ven en el mercado nacional de cómic.

Lo mejor: La sinceridad. Muestra muchas situaciones banales pero que a todos nos han pasado alguna vez y probablemente no hayamos reparado en ello.

Lo peor: Si vienes de leer El duelo, pensar que vas a encontrar esas alegorías que a muchos nos dejaron con un nudo en el estómago.