Posiblemente, la persona más odiada de la historia del cómic sea Fredric Wertham, incluso más que Bob Kane o Stan Lee. La perturbada mente del conocido psiquiatra produjo el infame libro Seduction of the innocent, en el que exponía la idea de que los cómics violentos convertían en delincuentes a los jóvenes que los leían. La editorial más perjudicada por este libro y sus consecuencias -el Comics Code Authority- fue EC Comics, que tuvo que cerrar todos sus clásicos títulos más truculentos, como Tales from the Crypt, Weird Science o Shock Suspenstories. Para adaptarse a los nuevos tiempos, la editorial lanzó toda una nueva de títulos que mantenía la esencia de la editorial y la mayor parte de sus autores, pero rebajaba el tono de sus historias para adaptarse al Code que regiría el medio durante las siguientes décadas. Diábolo acaba de lanzar la serie Impact completa en un tomo dentro de su línea de clásicos de EC, uno de los siete títulos de la New Direction de 1955.

Con las tiránicas restricciones del Code, a los títulos de terror de la EC no les quedó más remedio que cerrar, pero hubo alguno de ellos que podían seguir adelante bajando un poco el nivel de violencia de las historias. Éste fue el caso de Shock Suspenstories, una publicación de géneros variados que sólo tenían en común el final inesperado marca de la casa. Pero en lugar de limitarse a restringir las nuevas historias de la publicación a la nueva norma y haber seguido adelante con un número 19, Suspenstories cerró, como todas las publicaciones de la editorial salvo MAD, para empezar con un nuevo título y un nuevo número 1, renombrada como Impact. El problema que tuvo esta New Direction es que no llegó a conseguir aceptación entre los lectores. Ninguno de los siete títulos de esta época (Impact, Valor, Extra!, Aces High, Psychoanalysis, M.D. e Incredible Science Fiction) superó los cinco números, y meses después de las cancelaciones de estas series, la editorial cerró.

Aún así, Impact es una serie muy defendible en la que se encuentran historias que se han convertido por mérito propio en clásicos de la historia del cómic. Los autores son los clásicos de la editorial (Graham “Ghastly” Ingels, Jack Davis, Joe Orlando, Jack Kamen, Al Feldstein, Otto Binder o el propio Bill Gaines) y nos traen historias con la misma estructura y calidad que vimos en otros títulos de la era dorada de la EC, pero menos truculentas por la imposición del mercado.

Posiblemente la historia más destacable que tenemos en este tomo sea La raza superior (The master race en el original), un hito en la historia del cómic firmado por Bernard Krigstein y Al Feldstein en el que se trata por primera vez en el medio el tema del genocidio judío en los campos de concentración nazis. Esta historia, cuya portada ilustra el tomo de Diábolo, ha sido descrita como “el Ciudadano Kane del cómic” y sólo por ella ya merece la pena la lectura de este libro. Pero Krigstein intentó asociar a los profesionales del cómic para luchar por sus derechos y acabaría abandonando el medio tras su iniciativa fallida paralela a los hechos que relató Paco Roca en El invierno del dibujante.

Aún así, el resto del libro tiene una calidad muy alta como corresponde a los muy capaces autores implicados. Así, tenemos aquí El medallón del diamante, una adaptación de un relato de Guy de Maupaussant, Bien pagado, una historia sobre un médico que pone a sus pacientes por encima de la ganancia económica, la romántica A ciegas, una historia militar en las trincheras llamda El solitario o una sobre elecciones difíciles llamada Médico rural.

La edición es idéntica al volumen de Dark Horse del que parte, sin más extras que un artículo introductorio, y sin fallos de edición salvo por una viñeta en la que el texto en castellano se ha puesto sin borrar previamente el original en inglés. Incluye los cinco números de la colección completa original.

Aunque fuera una colección que fracasó comercialmente en su día, Impact es un volumen muy recomendable para todos los fans de los títulos de la EC, por mucho que ya no esté presente el tono escabroso que les dio la popularidad que alcanzaron años antes. Además, sólo la presencia de La raza superior, en su primera edición a tamaño original y a color en castellano, ya justifica la lectura de este tomo por su importancia histórica además de su innegable calidad.