Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Candy Candy. Más bonita cuando sonríe

Candy Candy. Más bonita cuando sonríe
Guion
José Antonio Godoy
Formato
Cartoné, 290 páginas
Precio
25,95 EUR
Editorial
Diábolo Ediciones. 2021

40 años no son nada, parece decir nuestra protagonista en su aniversario. Y con toda la razón. Candy Candy ha demostrado, como el amor hacia una serie puede perdurar en el tiempo. En estos momentos, donde cada vez se reivindica más a la mujer, haremos bien en otorgarle un sitio privilegiado a aquellas que, hace ya algún tiempo, revolucionaron el mundo del papel y de la animación gracias a su rebeldía y formas de entender la vida. Candy vuelve en forma de libro para, con su sonrisa eterna, iluminar nuestros corazones y hacernos recordar toda su trayectoria y lo que supuso como fenómeno a nivel nacional al ser el primer manga editado en nuestro país.

Parece que tanto Candy Candy como sus autoras vuelven a estar de actualidad. Hace aproximadamente un año se publicó Candy Candy, la historia definitiva, la novela en la que la guionista del manga original Keiko Nagita reescribió y extendió la biografía de su protagonista. Y la editorial Arechi Manga está recuperando varias obras recientes de la dibujante Yumiko Igarashi, como Josefina, la emperatriz de las rosas o Los mejores cuentos de hadas. No obstante, ante la imposibilidad de reeditar en ningún país del mundo la que fue la obra cumbre de este tándem de autoras, tenemos que conformarnos con disfrutar de sus trabajos por separado o, en este caso, de libros informativos sobre dicha obra.

Candy Candy, más bonita cuando sonríe es un libro que recopila abundante información sobre el manga y el anime Candy Candy, que dejó una profunda huella en los niños españoles de principios de los años ochenta. En una época en la que ni el manga ni el anime tenían en España clasificación por géneros, edades ni temáticas (eran dibujitos japoneses para niños, y punto), el anime de Candy Candy, pese a su consideración de shōjo en Japón, fue capaz de llegar a niñas y niños por igual, y su versión en cómic fue el primer manga publicado en nuestro país. En este libro, el autor plasma su devoción por la serie animada y su pecosa y rubia protagonista, analizando en primer lugar el origen del cómic para chicas en el Japón de principios del siglo XX y su irrupción en España. Da paso a continuación a un análisis de los ocho tomos del manga Candy Candy publicados en Japón, con sus preciosas portadas a color y viñetas interiores (algunas sacadas de tradumaquetaciones pirata). Desglosa posteriormente la novela de Nagita y los artbooks de Igarashi, con profusión de ilustraciones a color de ésta, e incluso las portadas de las publicaciones españolas de Bruguera.

El capítulo cuarto de este libro es tal vez el más arduo de leer, puesto que lo dedica a analizar el argumento de cada uno de los 115 episodios de la serie de animación (de la cual sólo llegamos a ver en España los primeros 52), a razón de un episodio por página, además de los OVAs y los episodios especiales, mencionando también la banda sonora musical y el doblaje español y catalán. Por último, hace un repaso por las biografías de los protagonistas de la serie, para cerrar con una mención a las adaptaciones en imagen real, el merchandising, y un epílogo de un tal Andrés Aragón (un amigo del autor que cierra el libro hablando de las series de su infancia, en un apartado sin ninguna trascendencia).

Lo que podía haber sido un sentido y cuidado homenaje a una de las series de animación emblemáticas de nuestra infancia se convierte, merced a la desastrosa redacción del autor, en una lectura plagada de tropezones que hacen daño a la vista: faltas de ortografía, estructuras gramaticales que entorpecen la lectura, nombres de series y personajes mal escritos… No dudo de la devoción del señor Godoy (o Tsukino, como le gusta hacerse llamar) por la serie Candy Candy, pero su calidad como escritor deja mucho que desear. En su biografía dice que también es dibujante y cantante, y de todo corazón espero que reciba mejores críticas en esas disciplinas artísticas.

El mercado editorial está sufriendo una plaga de libros escritos por aficionados sin un conocimiento mínimo de las normas ortográficas y gramaticales más elementales, y la falta de un profesional que revise los textos antes de su publicación hace bajar muchos enteros al libro finalmente editado. Es una lástima que este Candy Candy, más bonita cuando sonríe, una obra cuya publicación esperaba ansioso por tratar una serie que tanto me emocionó en mi infancia, sufra el lastre de una penosa redacción, que consiguió sacarme tanto de quicio como de su lectura. Esperemos que futuras obras de Diábolo Ediciones pasen por las manos de un editor / corrector que sepa dar una capa de lustre al resultado final.