Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Herbert West. Carne fresca

Herbert West. Carne fresca
Guion
Luciano Saracino
Dibujo
Rodrigo López
Formato
Tapa dura. 19x27 centímetros. Blanco y negro. 96 páginas
Precio
14,90 euros
Editorial
Dolmen Editorial. 2021

Saludos, queridos lectores. No es hoy el primer dia que el Doctor Herbert West visita esta web. Ya nos ha visitado en otras ocasiones y probablemente vuelva a hacerlo. La historia de este reanimador es una de las más conocidas de Lovecraft.  Posiblemente su fama actual surge de cierta película de la que podréis aprender más aquí.

La historia de estas historias (seis breves relatos) es muy curiosa. A pesar de ser de las más conocidas, no forma parte de ninguno de los ciclos lovecraftianos. No sale Cthulhu. No sucede en las Tierras del Sueño… Surgió como una parodia de obras como Frankenstein y por la necesidad de dinero del autor. Lo que se llama un trabajo alimenticio.

¿Por qué es entonces tan famosa? Diferentes motivos, como por ejemplo la película. Pero incluso entre los conocedores de toda la obra de HPL tiene muchos fans. Pienso que entre las muchas razones están su relativa escasa longitud (no dejan de ser varios capitulillos de una historia más larga), su sencilla lectura, sus tramas sencillas y, sobre todo, un cierto humor negro exagerado que se burla del género más o menos abiertamente.

Y humor negro es algo que tendremos en este Herbert West. Carne fresca. Luciano Saracino nos trae un montón de chistes retorcidos más o menos evidentes. Desde ese personaje con un cierto parecifo físico con el gran Peter Lorre hasta homenajes-versiones de escenas de cuentos de Poe. Y los policias… Ay, esos policias que ya han visto demasiado y están curados de espanto. Su presencia a lo largo de los diferentes capítulos le dan una sensación de coherencia y unidad .

A la vez que nos sacan desde sonrisas a carcajadas.

El tono de la obra tiene ese puntito macabro y cómico que impide que caiga en el más malsano de los gores. Adaptando muy bien la obra original y a la vez dándole un tono fresco que impide que pensemos que “ya hemos leído esto”.

Después de todo, estamos hablando de experimentar con muertos recientes para traerlos de vuelta a la vida. Y  las referencias a esa frescura serán constantes a lo largo del libro.

Pero no nos dejemos engañar, queridos lectores. El autor ha aderezado este plato literario con pequeñas escenas de ambiente que le dan tanta fuerza y vitalidad como si le hubiéramos inyectado fluido reanimador al libro de Lovecraft.

¿Y el dibujo? ¿Tiene la fuerza suficiente como para volver de entre los muertos y pasearse ante nuestros ojos?

Si.

Rodrigo López ha escogido uno de esos estilos que parecen sencillos, rápidos de dibujar, poco detallados… pero que recuerda a esos grabados de periódicos de la época en la que está ambientado el relato. Con una narrativa clásica, nos sorprende a veces con unas viñetas a página completa que da gusto verlas.

No es un estilo muy detallado al estilo europeo clásico. No confundiremos estas viñetas con fotografías. Pero están llenas de detalles. Detalles del género y detalles de ambientación. ¿Y eso qué quiere decir? Pues que escenas como las vistas aéreas de esa casa justo justo justo al lado del viejo cementerio tienen todo lo que esperamos ver en ese tipo de edificaciones. Que esos policias podrían haber venido directamente de una película de monstruos de los años 30. Que llega a tal nivel de detalle que nos muestra como se llenaba una fosa común con los muertos por tifus…

Al mismo tiempo, esta forma de dibujar le permite al autor ofrecernos escenas dantescas, grotescas, crueles y sangrientas sin escandalizarnos ni provocarnos repulsión. Que  escenas como una cabeza volando en pedacitos al ser atravesada por una bala no es precisamente lo mas bucólico y pastoril del mundo.

La edición de Dolmen incluye un artículo de Jesús Palacios que tiene el mismo tono serio mezclado con humor negro exagerado de la obra. Una delicia leerlo.

No quiero olvidarme de mencionar que si abrimos el libro, la portada, el lomo y la contraportada forman una desasosegante pero descriptiva ilustración.

Y si visitamos la página de la obra en la web de Dolmen, como si fuéramos simplemente un par de doctores haciendo su ronda de pacientes, podremos bajarnos un pdf para echarle un vistazo previo a este Herbert West. Carne fresca.

¿Por qué leer Herbet West. Carne fresca?

Una excelente adaptación. Respeta la obra original al tiempo que le aporta nuevos detalles y un fresco soplo de humor negro. El dibujo, más trabajado y lleno de referencias a otras obras de lo que parece a primera vista.

¿Por qué no leer Herbert West. Carne fresca?

Buscas un dibujo duro oscuro, desagradable que asuste y te retuerza las tripas. Buscas un guión opresivo.