¡Último tomo! Bienvenidos a la Crisis de la Dinastía Infinita: el mayor evento en la historia de la amistad entre Spiderman y Masacre, capaz de hacer temblar los cimientos del Universo Marvel. Nuestros protagonistas regresan de la Zona Negativa para descubrir que los héroes han perdido la mayor de las batallas.
Pues se acabó. 50 números ha durado la broma de juntar a los dos mayores bocazas del Universo Marvel (aunque Motormouth es de Marvel UK, ¿esa cuenta?), y aunque la colección ha tenido altibajos, y ha propiciado que ambos personajes hayan sido papás por duplicado (primero de la villana Itsy-Bitsy y luego del SDV Maestro Matriz), podemos decir que el viaje ha sido divertido. Pero todo llega a su fin (excepto las películas ambientadas en la Guerra Civil española, que se me hacen eternas), así que el guionista Robbie Thompson ha decidido marcharse a lo grande con el mayor evento que se ha podido sacar de la manga, fusionando títulos de otros eventos Marvel de éxito: La Crisis de la Dinastía Infinita de la Todavía Secreta Invasión. Y creo que se ha dejado alguno.
El experimento de la colección Spiderman / Masacre surgió para ver cómo había envejecido el trabajo en equipo del guionista Joe Kelly y el dibujante Ed McGuinness, que tan buenos momentos nos habían dado en la primera serie regular de Masacre de hace unos cuantos años (y reseñada aquí). Y aunque seguía habiendo química entre los autores, lo cierto es que la chispa de la serie original no volvería a repetirse. No obstante, el resultado fue lo bastante bueno como para pasar el testigo a otros autores y mantener la cabecera durante 50 números. Que, sinceramente, son un montón para lo que nos tiene acostumbrados Marvel hoy día. La idea feliz de incluir esta colección en la edición española de Asombroso Spiderman es algo que muchos fans españoles aún no han perdonado a Panini, sobre todo aquellos que odian al personaje de Masacre tanto como tener huecos en sus colecciones. Pero bueno, al final la editorial ha entrado (aunque tarde) en razón y ha cerrado la colección con su propia cabecera. Los coleccionistas que adoramos la uniformidad en nuestras estanterías estamos que no cabemos en nosotros mismos de gozo.
¿Y qué trae esta Crisis de la Dinastía Infinita de la Todavía Secreta Invasión? Pues el fin del mundo, literalmente. Resulta que durante el viajecito de de un año de nuestros héroes Spiderman y Masacre a la Zona Negativa, el Universo Marvel ha sufrido la visita de un alienígena llamado el Manipulador, que ha acabado con todos los héroes del mundo, salvo con un puñado que se hace llamar La Resistencia. Esta Resistencia está compuesta por una Seda fusionada con Warlock, un Lobezno mutado con más pelo de lo habitual, el (otro) mutante canadiense Puck (¿seguía vivo?) y el nuevo Espíritu de la Venganza Crystar. Todo muy variadito, como la buena ensalada. Por si fuera poco encontrarse con el mundo arrasado, Masacre ha perdido la capacidad de romper la cuarta pared: no puede hablar con los lectores (es decir, puede, pero no sabe que le estamos escuchando) ni con los editores, merced a los clásicos textos de apoyo y notas aclaratorias que suelen adjuntar a las viñetas. Este improbable equipo de héroes contará con la ayuda de Masacre-Gwen para traer de vuelta a los héroes y acabar con el Manipulador de una vez por todas, lo que incluirá una aparición estelar del mismísimo Robbie Thompson (haciéndose autobombo metiendo a su personaje talismán Seda e imágenes de otras series que ha escrito, como Venom: Caballero del Espacio y Doctor Extraño y los Hechiceros Supremos). Un final que me recuerda al de Sergio Aragonés Masacra Marvel (¿alguien se han planteado alguna vez reeditar ese tebeo? Sería un bombazo).
Robbie Thompson ha llevado las riendas de la cabecera Spiderman / Masacre desde su número 23 USA, con lo cual han sido 28 números ininterrumpidos en los que ha explorado la relación entre ambos personajes poniendo su amistad al límite, si es que alguien puede llegar a ser realmente amigo de Masacre. Todo lo vivido hasta ahora desemboca en este épico momento, pero no porque el guionista lo tuviera todo planeado, sino porque si hay que despedirse, mejor hacerlo a lo grande. Tal vez las ventas no acompañaran, tal vez en la editorial estuvieran cansados del chiste o tal vez tuvieran otros planes para los personajes. El caso es que en el número 50 de la colección se acaba todo, de una manera que homenajea al del Animal Man de Grant Morrison. Todo muy autoconsciente, con chistes referenciales a portadas míticas, homenajes a los 80 años de vida del Universo Marvel y una cuarta pared que ya es más bien un panel de metacrilato, de lo bien que ven los personajes a través de ella. A Thompson le siguen acompañando los dibujantes Matt Horak y Jim Towe, eficientes cumplidores sin más.
No debemos llorar por el cierre de esta colección. Afortunadamente, tanto Spiderman como Masacre cuentan con series propias, y en el caso de este último abundantes miniseries como para poder seguir teniendo nuestra razón mensual de bocazas. Han sido 50 números de Spiderman / Masacre con una trayectoria un tanto irregular y ecléctica por parte de Panini, pero bien está lo que bien acaba. Y esta colección, por suerte, ha acabado bien.
