Los que me conocen saben que más que lector de cómics soy devorador de cómics, me encanta toda la expresión en viñeta y no le pongo pegas a ningún tipo de géneros (bueno, las historias cósmicas se me atragantan, pero las leo…) ni mucho menos a que sea un proyecto novel o del autor más experimentado. Por eso, este primer volumen de Cuentos impopulares, Caperucita Roja, me llamó la atención desde un primer momento. Se trata de un proyecto autofinanciado, con un intento fallido de crowfunding en indiegogo y que cuenta con ediciones en español e inglés.

La historia.

Cuentos impopulares le da una vuelta de tuerca a los cuentos clásicos. En este caso, ya la primera página es toda una declaración de intenciones: un escritor empieza con el clásico “Érase una vez…” y al rato se cansa y nos dice “qué demonios, vamos a contar la historia de verdad”. Así conoceremos a Roja, una prostituta de lujo que vive con su novio Jack (el leñador), la madame del prostíbulo “Abuelita” y sus compañeras de faenas. Jack no es ningún salvador, sino todo lo contrario, tiene mal carácter y maltrata a Roja. Un día, esta ayudará a un lobo herido que acabará devolviéndole el favor. La historia está planteada para adultos, con escenas de sexo explícito. Se trata de un alegato contra los malos tratos, y una vuelta de tuerca a la historia conocida por todos.

Los autores.

Christian Douglas al guión y dirección del proyecto y Abel Pajares como dibujante y colorista, debutan en esta obra como autores de cómic. Douglas tiene experiencia en el mundo artístico, como actor, director y productor en teatro o cine (en el corto Jairo Martín & Largo Cabaret: Ella por ahí va). Pajares se formó en la Escuela Superior de Dibujo Profesional y ha participado en varios fanzines.

La labor de Douglas como guionista es la de intentar rizar el rizo, lo cual no es nada fácil teniendo en cuenta que se trata de un cuento muy popular. Este hecho plantea un reto, pero a veces, en mi opinión se le va de las manos, por intentar buscar siempre un golpe de efecto que impacte al lector. De hecho, la última página resulta toda una bofetada al lector y que a mí personalmente me resultó un poco fallida, pues creo que afecta mucho al personaje de Roja, y le quita al personaje la fuerza que necesita una mujer maltratada como esta. Hay veces que da la impresión de que se frivoliza en exceso con la figura de la mujer que se vende y no tiene escrúpulos por nada. La única pega que le pongo, el resto de la historia me parece que consigue el efecto de llamar la atención que busca.

En cuanto al dibujo de Pajares, es muy irregular. A pesar de ser un primer trabajo como dibujante de una obra completa de esta extensión, el comienzo de la historia es muy prometedor, con páginas de reconocible mérito narrativo y de finalización del dibujo (me encanta cómo plantea la primera escena de maltrato con una serie de viñetas pequeñas y una página rota, con la protagonista debajo), pero poco a poco se va diluyendo y hay páginas al final con dibujos con un acabado mucho más descuidado y con fallos de proporciones evidentes. Un pequeño detalle, sin importancia, pero que afecta, es que la portada es francamente espectacular, obra de Pedro Delgado, lo cual hace que involuntariamente se tienda a comparar o a buscar ese estilo en las páginas interiores. No obstante, me parece un debut bastante prometedor y que con esfuerzo y dedicación puede llegar adonde se proponga.

En resumen.

Una obra iniciática, con fallos esperables de novato, pero con bastante base para poder confiar en una evolución no muy lejana. La obra se ha editado en rústica, con papel satinado, 44 páginas a un precio de unos 10 €. La encuadernación a veces pisa los textos y los dibujos, lo cual resulta molesto, la impresión sí es muy buena. En definitiva, si os gustan las historias alternativas, con lobos juguetones, leñadores malotes, abuelitas madames y Caperus de la calle… al ataque, os gustará.