Aunque estaba previsto que a principos del año que viene se celebrara el jucio por la disputa que enfrenta a 20th Century Fox y Warner Bros. por los derechos cinematográficos de Watchmen, la situación ha dado un giro inesperado al conocerse que el juez Gary A. Feess ha dictado una resolución preliminar en la que da la razón a la Fox y le otorga, por lo menos, los derechos de distribución de la cinta.

El origen de la disputa viene de lejos, y es en gran parte debido al largo proceso de desarrollo que ha tenido que atravesar el film durante los últimos 20 años. A finales de los 80 el productor Lawrence Gordon adquirió los derechos para llevar la obra de Alan Moore y Dave Gibbons al cine de la mano de la 20th Century Fox. El proyecto, como ya sabemos, no llegó a materializarse y en 1991 fue vendido a una nueva compañía, Largo International, conservando Fox los derechos de distribución del film. Comenzó así un periplo que, tras el cierre de Largo Internacional, hizo que los planes para llevar Watchmen al cine fueran pasando de compañía en compañía… entre ellas Warner Bros., Universal Studios, Revolution Studios, Paramount Pictures y, finalmente, Warner Bros. (otra vez), compañía que por fin convirtió en realidad tan esperado proyecto.

Sin embargo, la rocambolesca gestación de Watchmen no iba a terminar ahí… En febrero de 2008 la 20th Century Fox demandó a Warner Bros. alegando que todavía poseía los derechos para hacer la película o, como mínimo, los derechos de distribución del film. A pesar de ello y de estar pendientes de un juicio que había de celebrarse en enero, Warner siguió adelante con sus planes para estrenar el film en marzo de 2009. Sin embargo la decisión del juez Feess podría dar al traste con los planes de Warner, y el estreno del film podría suspenderse de forma cautelar hasta que haya una sentencia definitiva o un acuerdo entre ambas partes. Los más pesimistas hablan de que el estreno de la película podría retrasarse nada más y nada menos que hasta 2011.

¿Cómo terminará la historia? Pues a día de hoy es imposible saberlo con certeza. Es de suponer que, si Warner quiere que no peligre el estreno de la cinta en marzo (algo más que probable teniendo en cuenta todo el merchandising que está previsto que rodee el estreno del film) intentará llegar a un acuerdo con 20th Century Fox para que ésta renuncie a sus pretensiones de distribución del film a cambio de una fuerte suma de dinero.

Habrá pues que estar muy atentos a las noticias se producen en los próximos días en torno a este asunto.