Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Los cuentos de la niebla, de Laura Suárez.

Los cuentos de la niebla, de Laura Suárez.
Guion
Laura Suárez.
Dibujo
Laura Suárez.
Formato
Tapa dura. 120 páginas. B/n. 19,5 x 27,5 centímetros.
Precio
18 euros.
Editorial
Dibbuks. 2019.

Saludos, queridos lectores. Escribo esta reseña a eso de las 2 de la madrugada de un día cualquiera. Si levanto la persiana y miro fuera, veré luz. Farolas, pisos, coches… Pero yo he salido de casa al jardín, a la calle, y he estado envuelto por la oscuridad. He andado por los caminos de Galicia, bordeados por silveiras y bosques. Sin más luz que la de las estrellas ocultas por las nubes o por la niebla. Yo frente a lo desconocido. Yo y las leyendas. De eso va la reseña de hoy, Los cuentos de la niebla.

Una mujer que nos cuenta las historias de miedo que su abuela le contaba. Laura Suárez nos habla de historias contadas. Nos las cuenta como se las contaron. Mitos, leyendas, cuentos, historias. La pregunta es, querido lector, ¿saldrás a la oscuridad fuera de la casa tras haberlas oido?

A nivel de guión, tenemos pequeñas historias que solamente importan para sus protagonistas.  ¿Fué esa persona obligada a unirse a la Santa Compaña? ¿Se le ha realizado un meigallo a esa otra persona? Historias pequeñas, locales; pero que para la gente que las oye son de lo más importante.

Oigo aullar a un perro, queridos lectores. Eso es que la Muerte ronda cerca. Salgo a investigar. Pero dejo pedazos de corcho e hierro en mi casa. Solamente por si acaso. Y por si acaso, mi pulgar está entre los dedos índice y medio.

Habelas, hailas.

Veo luces entre los árboles. Alguien que regresa a casa, seguro. Pero por si acaso, si se me acercan mucho, trazaré en el suelo un círculo con una rama. Y me quedaré dentro, con las dos manos ocupadas cogiendo cosas. Una piña y una rama de xesta, por ejemplo. Solamente por si intentan darme una cruz.

Habelas, hailas.

Como gallego, puede que diga que las historias que me contaron a mi y las que le contaron a la autora no son las mismas. Pero como gallegos, ambos sabemos que; si está para tí morir ahogado, morirás ahogado en la pileta del cuarto de baño.

A nivel de dibujo, la autora ha escogido el blanco y negro para contarnos estas historias de hace casi un siglo, cuando eso de la luz eléctrica eran… si, era cosa de meigas :).

Me han impresionado especialmente sus primeros planos. Me recordaban algo… Al principio, pensé en el neorrealiosmo italiano. Pero no era solamente eso. Me ha venido a la cabeza el cine mexicano clásico.

Ignoro si es una coincidencia o algo buscado. Pero entre el Día de los Muertos, La Llorona, la Santa Compaña y las fotografías de Difuntos no hay demasiadas diferencias. Tradiciones hermanas. Pueblos hermanos.

Quizás podría quejarme; aunque a nivel personal; de que solamente haya negro y blanco, blanco y negro. Sin el verde y azul que dominan los colores de esta tierra…

– Estimado Lamastelle-san, ¿necesito estar versado en las leyendas gallegas para apreciar totalmente este libro?

No. Puede que no sepas de qué hablan exactamente las historias. Pero van a llamar a tu alma, a los miedos de tu interior.

La edición se completa con un prólogo de El Torres y unos extras sobre las viviendas tradicionales gallegas.

Y no quiero terminar esta reseña sin hablar de la contraportada del libro. En la portada hemos visto a tres personas sentadas alrededor de una hoguera. Hemos leído las historias que en torno a esa hoguera se han contado…

Y en la contraportada tenemos una puerta entreabierta por la que se cuela la lluvia… Es hora de volver a casa, a través de caminos oscuros.

Un resumen y epílogo perfectos para esta obra.

¿Por qué leer Los cuentos de la niebla?

Cuentos de miedo “real”. Costumbrismo o realismo mágico. No importa el nombre, sólo el escalofrío que sentirás.

¿Por qué no leer Los cuentos de la niebla?

Eres más de gore y salvajadas que de terror psicológico.