Saludos, queridos lectores. Os escribo sentado a la puerta de mi TARDIS, con los pies fuera, sobre un gigante de gas que está empezando su transformación en una estrella. Tranquilos, que llevo puesto el arnés de seguridad. Caray, que lento es esto de convertirse en un sol. Pasaré el rato leyendo lo nuevo de Doctor Who: Vida tras la muerte.
Tenemos aquí al undécimo Doctor (buuuh, queremos al décimo. Las pajaritas no molan…:-)). Bueno, su undécima encarnación que ya sabéis como son estas cosas de los Señores del Tiempo.
¿Y qué nos trae Fandogamia con este Vida tras la muerte? Pues la misma mezcla de historias rápidas con otras más profundas que podíamos ver en la serie.
Al Ewing y Rob Williams nos ofrecen unos guiones que podemos leer de forma rápida y entretenida. Pero que también tienen un lado más oscuro. Y la primera de las historias empieza así, con una mujer hundida yvencida por la vida y la muerte.
Sin esperanza.
Y entonces aparece el Doctor y para bien o para mal, todo cambia.
Me ha encantado el inicio… tan doctoresco :-). Algo lento, tranquilo, mundano… y entonces una voz dice: Disculpe…
¿Cuántas compañeras no oyeron esa voz y simplemente la siguieron?
Tendremos aventuras de correr de aquí para allá. Tendremos misterios que investigar (y cosas que romper). Tendremos historias del pasado en las que meternos. Tendremos historias del futuro que escribir sobre la marcha…
Y en medio de todo eso, debajo de todo eso; tendremos una historia de tristeza, pérdida y necesidad de esperanza.
El Doctor lo sabe todo sobre eso. Después de todo, aunque se oculte tras la máscara de un bufón con fez y pajarita, Él es el Doctor de guerra.
El Doctor que, en una noche terrible, hizo lo que hacía falta hacer y lo perdió todo.
(Al menos hasta la próxima reescritura de continuidad, claro :-)).
Alguien sabio dijo una vez: «¿Oyes ese sonido, doctor? Es el sonido de la Tardis, trayendo esperanza a cualquiera que lo oiga…A cualquiera…»
Alice Obiefune está a punto de escupar ese sonido. Y nosotros con ella.
El dibujo es cosa de Simon Fraser y Boo Cook. Mientras que el color se lo han dejado a las manos y pinceles de Gary Caldwell. Y entre todos nos ofrecen un trabajo falsamente sencillo.
¿Y eso que significa, Lamastelle-san? Pues que mientras los personajes parecen simplificados, poco detallados, cartooneados; tenemos una narrativa trabajada y pensada.
¿Os he hablado ya de las brutalmente bien hechas primeras páginas?
Tendremos páginas con fondos muy trabajados, pero las alternaremos con escenas donde esos fondos son casi lisos. Quizás es lo que menos me ha gustado del tomo. Esos cielos sin estrellas en la noche…
Como los chicos de Fandogamia son muy majos, nos dejan este enlace para que le echemos un vistazo a las primeras 22 páginas del tomo.
Que no se me olvide mencionar que la traducción la ha hecho Liza Pluijter.
¿Por qué leer Doctor Who: Vida tras la muerte?
La preciosa, tierna, maravillosa primera historia. A veces, en tu casa, te pones una pajarita y gritas: Gerónimooooo.
¿Por qué no leer Doctor Who: Vida tras la muerte?
Tu deseo como fan es que a Matt Smith lo pille un dalek…
(Por cierto, aunque el enlace a Amazon aparece en inglés, apunta al tomo de Fandogamia. Cosas de Amazon. Por si acaso, compruébalo por tí mismo si lo sigues.)