En los primeros diez números de este volumen, hemos podido ver cómo Aric de Dacia ascendía hasta llegar al poder y ser el regente del planeta Gorin. Las aspiraciones de poder de algunos de los que rodeaban a nuestro protagonista dejaron la situación en la contratación de un grupo de mercenarios que se dirigían a enfrentarse y borrar del esquema de poder al portador de Shanhara. En el arco argumental recogido en este X-O Manowar 4: Visigodo, vamos a ser testigos de dicho enfrentamiento y de sus consecuencias inmediatas. Matt Kindt sigue escribiendo una historia trepidante, muy bien planificada y mantiendo al héroe de Valiant en ese planeta alienígena sin temblarle el pulso, sin verse tentado a una rápida vuelta a la Tierra por miedo a perder el interés de los lectores. No solo habla en favor de la valentía de guionista y editor, sino que además nos ha permitido disfrutar de un auténtico ascenso, caída y resurgir del héroe más representativo de la editorial. Recordamos que este tomo forma parte de las reediciones por arcos argumentales del material editado previamente por Medusa en grapas.
X-O Manowar tendrá que enfrentarse al grupo de mercenarios cazarrecompensas contratados para borrarlo del esquema de poder planteado en el planeta Gorin, un planeta que siempre se había visto en una continua lucha entre las tres razas locales (celestes, burnt y cadmios). Una vez conseguida la paz entre ellos como emperador, ahora tocaba lo más difícil, resistir en el cargo y mantener dicha paz. Siempre hay intereses de por medio, y hay que saber escoger muy bien los aliados.
Kindt nos ha mostrado hasta el momento tres arcos argumentales relacionados, pero bien diferentes, con un tono distinto en cada uno de ellos. Ahora llega el momento de presentarnos un western espacial, en el que Aric ya ha llegado al poder pero es atacado y apartado de él. Como sabréis los que habéis llegado hasta aquí, había tomado la decisión de apartarse voluntariamente de Shanhara y dirigir el planeta como un hombre sin más, y eso tendrá consecuencias en este tomo. Kindt nos regala un arco de tres números más epílogo emocionante y cargado de épica, que sirve de redención del personaje y nos muestra una rápida bajada a los infiernos y resurgir digno del héroe que es.
En este western tenemos a nuestro héroe caído, y en su resurgir contará con la asistencia del típico secundario bonachón, muy poderoso pero que se encuentra en el bando incorrecto. No solo vamos a ver el ascenso y evolución del protagonista, sino también la de este otro personaje, de la misma clase que Gin-GR a la que conociéramos en Armor Hunters. Otro elemento clásico del género, por mucho que la ambientación de este planeta diste bastante del Oeste americano…
X-O Manowar 4: Visigodo contiene este arco argumental de tres números, y también el epílogo en el que la serie se prepara y coloca al personaje listo para su participación en las Harbinger Wars II. El dibujo corre a cargo de Ryan Bodenheim (portadista en Ninjak o Bloodshot Salvation) en el arco principal, mientras que el epílogo corre a cargo de Ariel Olivetti. El trabajo de Bodenheim es muy interesante, con un acabado muy limpio, y una composición de página muy trabajada. Las escenas más cargadas de épica están realmente conseguidas, con unas luchas espectaculares y que consiguen reflejar bien la emoción del momento. En cuanto al número de Olivetti, combina su estilo más pictórico con un coloreado digital que refleja muy bien esos paisajes cósmicos, con unas escenas de flashback monocromáticas en las que la ausencia de color cambia por completo el aspecto del dibujo. Es interesante ver cómo la presencia del color cambia tanto el estilo y consigue ese efecto diferenciador que busca el dibujante.
En definitiva, X-O Manowar 4: Visigodo.
Si decíamos al hablar de la etapa de Christos Gage en Ninja-K que había sabido darle su propia voz a una serie que Matt Kindt había dejado muy alta y con un tono muy marcado, tenemos un caso parecido con cambio de roles. Aquí es Matt Kindt el que está dando una visión diferente a la que nos había mostrado Venditti en el volumen anterior de la serie, pero manteniendo los rasgos característicos del personaje y haciéndolo reconocible para todos los que hemos estado siguiendo al personaje hasta el momento. A partir de ahora tendremos una vuelta a la Tierra, y de hecho el siguiente arco nos cambiará la época además del escenario…
Lo mejor: La épica conseguida en el arco. Lo bien aprovechado que está el personaje de Baz-L. El dibujo de Olivetti en el último número del tomo. El aroma a western espacial que tiene la historia.
Lo peor: Que a pesar de recoger el equivalente a cuatro grapas, estos tomos siguen sabiendo a poco y dejando con ganas de más.
