Wonder Woman/Conan nos ofrece el encuentro entre los dos personajes de DC y hasta hace poco Dark Horse (ahora en manos de Marvel nuevamente). La historia enfrenta a los dos guerreros por antonomasia de la cultura popular: el bárbaro cimmerio y la amazona de Themyscira. Una serie que además recae en manos de dos autores bastante solventes: Gail Simone y Aaron Lopresti. A priori, tiene todos los ingredientes para ser un producto muy atractivo para el gran público. Veamos si cumple las expectativas.

La historia tiene lugar en Shamar, en cuyo foso de lucha encontrará Conan a una amnésica Diana. Él piensa que esa mujer, sin rival en combate no es otra que Yanna, una niña que marcó su infancia y a la que creía muerta tras un accidente. Tras ellos, las temibles brujas córvidas Lila y Anive, traman un combate que enfrente a dos de los luchadores más temibles del Universo. ¿Lucharán entre sí o preferirán hacer un frente común contra sus adversarios?

Es innegable reconocer que Gail Simone ha elaborado para estos seis números una historia con bastante chicha. Plantea un motor de la trama interesante, y administra bien ese misterio de saber si realmente Diana es la Yanna que recuerda Conan o no a lo largo de la miniserie. Además, introduce algunos secundarios que dan juego, como Dellos, el esclavista que organiza los combates; Kian, un ladronzuelo aficionado a las apuestas y que servirá de punto de arranque de la historia; las amazonas; las córvidas… y algunos más. Va dosificando muy bien la aparición de dichos personajes pero todos acabarán teniendo su importancia y confluyendo en un final muy coral y espectacular. Wonder Woman tampoco es un personaje ajeno a la autora, que ya escribiera alguna de sus aventuras.

Si tengo una pega es el tratamiento que hace de Conan. Se nota que lo conoce, y hace un esfuerzo por mostrarnos a ese guerrero bárbaro que tanto nos gusta. Pero el hecho de incluir ese factor sentimental de la amiga de la infancia y cómo afecta Diana a la evolución de Conan en cuanto a manera de ser… es algo que puede resultar chocante para un seguidor de largo recorrido del personaje. Incluso para un lector menos acostumbrado al cimmerio, alterna bastante entre ese carácter rudo y una sensibilidad lo cual en alguna ocasión resulta un lastre para la historia.

Y digo que a Simone se le nota que conoce el personaje porque tiene detalles en los que los seguidores más fieles esbozarán una sonrisa. Desde los títulos de los episodios, escuetos y con la resonancia de los títulos clásicos, algún chiste sobre la inevitable comparación con Red Sonja, hasta algunos comportamientos en los que Conan mira por su propio interés, sin importarle lo más mínimo que un personaje secundario pueda ser degollado delante suya. Pero creo que tenía claro que iba buscando un público muy concreto, más mainstream, y ha realizado una historia que intenta mantener el espíritu de ambos personajes, pero que resulte suficientemente agradable y entretenida para los que no conozcan a ninguno de ellos. Esto supone que pierda un poco su esencia y que no hubiera sufrido ningún cambio si en lugar de Wonder Woman/Conan se hubiera llamado Wonder Woman/Warlord o Wonder Woman/Kull.

El dibujo de Lopresti es preciosista, y muy atractivo. Dibuja un Conan con la corpulencia del de John Buscema, aunque con la elegancia y gracilidad del de Barry Windsor Smith. No tiene esa rotundidad de Buscema, que lo hacía tan primitivo, pero sí su corpulencia. Me gusta mucho cómo dibuja las numerosas luchas que tienen lugar en la serie, aunque resulta mucho más imponente y agresiva Diana que el propio Conan. El tomo incluye unas páginas a lápiz del primer número y es una auténtica delicia. No creo que Matt Ryan haga un mal trabajo al entintado, pero son mucho más espectaculares los lápices que las páginas finales (quién sabe, lo mismo es un déjà vu en plan nostálgico por la serie clásica, que era en blanco y negro… XD).

Sí me ha resultado muy molesta una cosa del tomo y es la tipografía escogida para los cuadros de texto narrativos. Intentan emular una caligrafía nórdica, pero en los primeros números me resultó difícil leerla hasta que conseguí hacerme un poco a ella. Comparando con el tipo de letra original, no veo la necesidad de haber escogido ese tipo de letra concreto.

En definitiva, Wonder Woman/Conan.

Una historia entretenida, que intenta contentar a los seguidores de ambos personajes. Pienso que gustará poco a los seguidores más acérrimos del cimmerio, aunque si lo ven como la curiosidad que es y son algo indulgentes, creo que pueden disfrutar de una historia bien construida y con un guión con varias capas y personajes suficientes para que la lectura no aburra en ningún momento. Podría haber sido realizada con otros personajes, sin que la historia se hubiera resentido demasiado, aunque eso no es algo que sorprenda a los que ya hemos leído más de un crossover. Si vas sin las expectativas que a priori puede generar la simple lectura de los personajes implicados en el cruce, lo vas a disfrutar. Si vas buscando al mejor Conan… puedes salir decepcionado.

Lo mejor: En el fondo, es una historia entretenida y bien escrita. El dibujo de Lopresti. Las páginas de lápices son espectaculares.

Lo peor: La tipografía de los cuadros de texto. Igual que es entretenida, es una historia olvidable con facilidad. Escribe mejor a Diana que a Conan.