¡Hola amiguitos! Bienvenidos a una nueva entrega de ¡Viñetas y … acción! Una entrega muy triste, tanto que me ha hecho plantearme el sentido de la vida e incluso si debo tirarme o no por una ventana… Pero al final he pasado, que seguro que me hago daño y sirve de inspiración a alguien que decida cometer el mismo acto de masoquismo que un servidor: ver Steel.
La verdad, no sé que se fumarían en la Warner Bros para hacer una película de Steel en 1997. Os pongo en perspectiva: Acero fue un personaje que debutó en 1993 dentro de la macrohistoria de La muerte de Superman (noticia que incluso dieron en los informativos de la 1). Su primera aparición fue en el número 500 de Adventures of Superman de Louise Simonson y Jon Bogdanove. El personaje molaba con su mezcla de El hombre de acero y Robocop. Tuvo cierta popularidad e incluso llegó a contar con una serie regular propia que llegó al medio centenar de entregas.
Pero… Joder ¿Una peli? Bueno, teniendo en cuenta que Marvel decidió comenzar con su aventura en el cine con una adaptación de Howard el Pato… No voy a juzgar… No lo voy a hacer… Pero es que Steel es taaaaan mala que hace buenas a Man Thing o a La Cosa del Pantano. Sus 97 minutos son una tortura de lo aburrida y absurda que es. Pero es que viendo los mimbres el resultado era imposible que fuera otro.
La película de Steel fue una idea de los productores Quincy Jones (responsable del abrumador éxito del álbum “Thriller” de Michael Jackson) y David Salzman, que había hecho una fortuna con programas de televisión de variedades (vamos, que es un José Luis Moreno de la vida) y la teleserie de Justicia Ciega. Ninguno de los dos tenía una experiencia muy grande en el mundo de la gran pantalla, pero el primero era un gran fan del personaje (o eso decía), por lo que estaba muy interesado en hacer la película.
El director no fue otro que Kenneth Johnson, mítico responsable de las series de TV de Hulk, La mujer biónica, El hombre de los seis millones de dólares o especialmente V. Cuando filmó la película (se dice que aceptó el encargo a regañadientes) tenía 55 años. Me da la sensación de que ya se la pelaba todo, siendo el único motivo de rodarla hacerle quedar como un yayo guay y enrollado con sus nietos, en plan “Eh pequeños, he dirigido a un famoso, un tal Shaquille O`Neal, si os coméis todas las coles de bruselas os conseguiré un autografo suyo”.
El disparate empezó desde la base. ¿Shaquille O’Neal como protagonista? La estrella de Lakers demostró una vez más (esta fue su tercera película), que era un pésimo actor, peor aún que Michael Jordan en Space Jam o que Dennis Rodman en Double Team. Lo único bueno que tuvo la incorporación de la estrella de la NBA al reparto fue algún que otro metachiste donde hacía coñas con su incapacidad para mejorar su ratio de tiros libres acertados. Del resto del reparto solo rescato a Judd Nelson, que hace las veces del villano de la cuestión, siendo memorable su papel en la mítica The Breakfast Club y su vozarrón como el doblador original de Rodimus Prime en Transformers.
El propio Johnson se encargó de escribir el libreto y en un alarde de “aquí manda mi polla”, eliminó cualquier referencia que pudiera haber a la mitología de Superman. Vale, el uniforme de Steel recuerda mucho al del cómic con todo ese corcho lata, el martillo y los gadgets. Pero sin la S y sin la capa el resultado recordaba más al del Doctor Doom de Los 4 Fantásticos de Roger Corman. Por supuesto, Steel no volaba como en el cómic, pero a cambio podía imantar las cosas para provocar las situaciones más ridículas posibles.
Steel costó 16 millones de dólares. Con esto se demuestra que mucho, mucho, no apostaban por ella. Algo normal dada la esperable ostia en taquilla que se pegó. Recaudó 1,7 millones de dólares. En Europa la cinta llegó directamente al mercado de vídeo doméstico y, al contrario que otras producciones por el estilo, con el paso de los años ha quedado más olvidada si cabe. Merecidamente, desde luego.
El mayor éxito fue para la banda sonora “Man of Steel” con los raperos Ice Cube y B Real. Aquí tenéis el clip por si os interesa, pero solo si os interesa, si os interesa mucho ¿eh? Avisados quedáis.
PD: Para mi ha sido duro, pero para el maravilloso ilustrador de la sección Víctor Gómez, no ha debido ser fácil. Me consta que sigue vivo, aunque no sé por cuánto tiempo, porque en quince días toca hablar de Catwoman…
