Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

¡Viñetas y… acción! 13: Elektra de Rob Bowman

logo viñetas y accion

De verdad que temía el día que tuviera que hablar de Elektra, ese día ha llegado.

¿Guion? ¿Actores? ¿Presupuesto? Alguien debió pensar a principios de siglo que estos eran elementos innecesarios para hacer una película. Un coreógrafo para las escenas de lucha tampoco habría estado mal… quizás nos habría ahorrado escenas como la de abajo.

Si son seguidores de esta sección seguro que el párrafo anterior les suena de algo. Sí, exacto, es el párrafo con el que comenzamos la entrada de la película de Daredevil. Pues bien, parece ser que el hombre es el único animal que tropieza con la misma piedra y a Hollywood le mola reflejar el comportamiento humano. Menudo mojón, más que Punisher incluso.

La película de Elektra es un error, el personaje fue ramplon a más no poder en la película del cuernecitos y tan solo sirvió para un par de momentos musicales muy chulos para lucimiento del grupo Evanescence. Malos mimbres que se volvieron peores cuando el guión ni siquiera reflejaba a una Elektra como nos imaginábamos: dura, letal, decidida. En su lugar tenemos esta especie de remake de “Aventuras en la Gran Ciudad” con una Elektra que en seguida se arrepiente de ser mala  y se pasa toda la cinta huyendo de un puñado de malos patéticos y haciendo de niñera de un tío estúpido y de una niña repelente.

El producto original siempre es el mejor

 

Elektra es una película de serie B con ínfulas, que llegó al cine y se la pegó (al igual que la Catwoman de Halle Berry). Costó 24 millones de dólares y recaudó 56 a nivel mundial. Una cifra que si bien no ocasiona pérdidas como tal, no dejó contentó a nadie en la Fox. Pero decíamos que tenía de producción televisiva absolutamente todo: partimos de su protagonista, que siempre será recordada por Alias (ahí lo hizo muy bien); su director es Rob Bowman, que solo ha dirigido tres películas para su estreno en cines: una adaptación de “Expediente X”, “Elektra” y “El imperio del fuego”, nada que añadir; la banda sonora es de Christopher Beck, conocido por ser el compositor de “Buffy The Vampire Slayer” y “Angel”. Vamos, que me da la sensación que en el estudio no tenían muy claro que hacer: si tirar para adelante o enterrar la película en una fosa.

Elektra y Catwoman. Que gran añada la de esa época

El principal problema es que Jennifer Garner no es creíble en ningún momento. La Elektra de los cómics no se dignaría a eliminar su ADN de un escenario frotando los suelos, al contrario, quemaría el sitio hasta los cimientos. Tampoco se dejaría hacer bromitas sobre lo mucho que folla o no, y desde luego no se dejaría amedrentar por sentimientos facilones. No impone en absoluto y el diseño de vestuario de Lisa Tomczeszyn es un puto desastre. Ese corpiño no resulta útil, sexy (a saber que tenían en mente) o tan siquiera cómodo porque es tan ceñido que Jennifer Garner parece un lomo embuchado la pobre.

Jennifer Garner como Elektra

Elektra tampoco funciona como un spin off. La transición con la cinta de Daredevil es muy forzada y sabemos que al final de ésta sobrevivió, porque su colgante estaba colgado en la azotea de la casa de Matt. Ben Affleck grabó un cameo, pero fue eliminado en la sala de montaje. No vamos a ponernos a criticar que sea muy distinta al cómic porque aquí todos tenemos pelo ya donde cubre y no es motivo de rasgarse las vestiduras por ello. El  guion va salvando cualquier inconsistencia a golpe de flashback, abusando de este recurso y sobrando muchas veces, salvo cuando aparece Stick interpretado por Terence Stamp, que siempre llena la pantalla.

Ben Affelck en Elektra

Casi echamos de menos a Ben Affleck, casi.

Lo que jode es que empieza muy bien, calcando una escena de un cómic de la etapa de Robert Rodi y Sean Chen en la cabecera más longeva que ha tenido la asesina. En dicha escena, Elektra elimina de forma eficaz y sin miramientos a un montón de sicarios hasta que acaba con su encargo principal, que es interpretado en la película por Jason Isaacs.

Vamos con el casting. Goran Vinsjic da vida a Matt Miller (guiño, guiño), el objetivo/rollete de Elektra. El tipo venía directo de Urgencias (más televisión), y si hubiera salido en pantalla leyendo el guión, nos habríamos quedado igual de impactados. Su personaje parte de la historia “The Redeemer” de Greg Rucka y Yoshitaka Amano, pero ya, luego se pasan la historia por el forro. Lo mejor viene con los malos: hay una escena curiosa donde tres actores asiáticos famosos coinciden en plano: Cary Tagawa es Roshi (y Tsang Tsung en Mortal Kombat), Will Yun Lee es Kirigi y visto lo visto en su batalla con Elektra, su súper poder es hacer volar la colada por toda la habitación. Por último tenemos al mítico Hiro Kanagawa, actor de mil series televisivas.

Se supone que parte de guion se basa en esto.

 

Uff. Los malos… la Mano me ha puesto muy nervioso. Para empezar se echan de menos muchos más ninjas y que estos exploten (salen un par, pero saben a poco), y luego tenemos muchas más chorradas. Piedra se adelanta a la moda de cambiar de raza a los personajes y además de ser negro, también cambia la Casta por la Mano. Tifoidea (pasamos del María) tiene poderes que marchitan plantas y es venenosa (imagino que el nombre de Hiedra venenosa estaba pillado), y luego tenemos a Tatuaje, que no sale en los cómics pero cuya inclusión estaría justificada para emplear lo que quedase de pillar coca en FX.

La Mano

Sinceramente, podría seguir durante horas, podríamos hablar de esa secuencia de títulos de crédito que luego nada tiene que ver con la película, con esos planos descarados que copian algunas peleas de Matrix pero sin ningún talento o de las ganas que se le quedan a uno de suicidarse tras verla, pero no me apetece.

PD: Esta semana tocaba Blade Trinity pero se nos ha ido la pinza, volveremos con el cazavampiros más molón en quince días.