Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Universo Sandman: Lucifer integral

Universo Sandman: Lucifer integral
Guion
Dan Watters, Neil Gaiman, Simon Spurrier, Kat Howard y Nalo Hopkinson
Dibujo
Max Fiumara, Sebastián Fiumara, Fernando Blanco, Aaron Campbell, Kelley Jones, Leomacs, Brian Level, Bilquis Evely, Tom Fowler y Dominike “Domo” Stanton
Color
Dave McCaig, Dee Cunniffe, Chris O’Halloran y Mat Lopes
Formato
Cartoné. 640 páginas. Color
Precio
55€
Editorial
ECC Ediciones . 2022
Edición original
The Sandman Universe # 1, Lucifer #1-24 (DC)

Sandman terminó hace ya cerca de 30 años. La línea Vertigo cerró definitivamente sus puertas hace dos años, pero su sello, su legado y sus personajes no fueron hechos para ser olvidados y, de uno u otro modo, se abren paso, como en el caso de Universo Sandman: Lucifer.

Universo Sandman: Lucifer integral

Cuando en marzo de 1989 apareció por primera vez en Sandman 4 aquel Lucifer con reminiscencias del Bowie de la época de Space Oddity, ni sus creadores — quiero decir más allá de su Creador, osea, Neil Gaiman, Sam Kieth y Mike Dringenberg — ni su editora, la santa patrona de las tortas, Karen Berger, podrían imaginar a dónde iba a llegar este personaje a priori secundario. Al terminar Sandman obtendría una serie propia con Mike Carey y Peter Gross que se convertiría rápidamente en título de culto y desarrollaría su propio ecosistema. Durante 75 números tuvimos la suerte de disfrutar de esta serie que nunca se contó entre los grandes títulos de Vertigo, pese a que tenía todos los mimbres para ello.

Una década después del fin de esta serie, durante los últimos coletazos de Vertigo y sin que nadie lo esperara, llegó un nuevo volúmen auspiciado por una serie de televisión, que poco tenía que ver con el material de partida. Holly Black (Las crónicas de Spiderwick ), Lee Garbett y otros retomaron como pudieron lo que les habían dejado Carey y Gross y mantuvieron el pabellón digno durante 19 números, aunque sin la brillantez del primer volumen. Y entonces llegó Universo Sandman a finales de 2018 con Vertigo moribunda y algunos intentos por mantener el espíritu vivo dentro de Black Label, como el sello Hill House o esta iniciativa que llegaba con motivo del trigésimo aniversario de Sandman. Con el especial grupal con el que se da inicio a Universo Sandman: Lucifer integral se ponía en marcha toda una nueva franquicia que abarcaría El sueño, de Spurrier y Evely; Los libros de la magia, de Howard y Fowler; La Casa de los Susurros, de Hopkinson y Stanton; Hellblazer —un poco más tarde—, con Spurrier y Campbell y la presente Lucifer. El resultado fue desigual, aunque por lo general honroso, pero tal vez junto con El Sueño y Hellblazer, Universo Sandman: Lucifer comparte podio.

Universo Sandman: Lucifer integral

Para esta nueva etapa del primero de los caídos se deciden por un guionista británico que apenas tenía un escaso puñado de títulos publicados, pero que venía apadrinado por Simon Spurrier, con el que había colaborado en The Shadow. Con el tiempo, Watters se ha convertido si bien no en una estrella, sí en una figura a seguir la pista en series como Coffin Bound o Home sick Pilots, que se cuentan entre las más personales y refrescantes propuestas de los últimos años.

Para el apartado gráfico, salidos de esa granja de talentos sin parangón que es el hellboyverso, los argentinos hermanos Fiumara eran los elegidos para embarcarnos en Universo Sandman: Lucifer, que parte con el Lucero del alba en una situación tan peculiar como precaria. Lo encontramos prisionero, demente, medioamnésico y ciego en un lugar del que no sabemos nada. Lo único que sabemos es que le acompaña todo tipo de figuras históricas y de leyenda que alguna vez hayan tenido algo que ver con el diablo: el poeta y pintor William Blake, Robert Johnson, el mítico músico del cruce de caminos; Jack O’lantern y muchos otros. Todo el primer arco consistirá en averiguar dónde está y cómo salir, mientras en el mundo terrenal vamos poniendo en la parrilla de salida toda una serie de jugadores, tanto para el final de esta saga como para el resto de la serie.

Universo Sandman: Lucifer integral

Tal vez el segundo arco de Universo Sandman: Lucifer integral es el más complejo, largo y mejor ejecutado de los cuatro que contiene. Tras los sucesos del arco anterior, la bruja Sycorax dispone de 72 horas de vida, antes de que el Creador la reclame. Durante esas horas, Lucifer emprenderá un viaje a lo largo de los inframundos conocidos en busca de un lugar para que repose el alma de Sycorax. Durante este viaje Lucifer hará alianzas, enemistades y maquiavélicos pactos, que sin duda convierten este arco en el que más recuerda al ambiente de intrigas y traiciones de la serie original de Carey y Gross.

Quedarán aún dos arcos más que, si bien ya no son igual de trascendentes e intrincados, nos dan algunos de los mejores momentos de la serie, como la aparición de Constantine, el rey de los gatos o Goya, a la vez que van cerrando los últimos cabos sueltos.

Watters va cambiando con pericia progresivamente el tono de la serie y lo que empieza con el terror y el misterio va girando a ese entramado oscuro de conspiraciones en que derivaba la serie original, aunque de un modo más hosco y áspero. No existe esa especie de juego lúdico que nos haga disfrutar del movimiento de las piezas por el tablero, porque en el caso de Universo Sandman: Lucifer, todas las tramas se presentan siempre adversas y sin un lado donde posicionarse, en una constante sensación de desesperanza.

Universo Sandman: Lucifer integral

La responsabilidad de este ambiente sucio, oscuro y aciago que flota predominantemente en Universo Sandman: Lucifer es solo en parte cosa de Watters, ya que son los Fiumara con su gusto por el el uso muy contrastado de las masas de blanco y negro, su pincel seco y su tramados sucios e irregulares los que tiñen la atmósfera de esta serie en algo mucho más oscuro e infausto. Sin embargo, este par de hermanos argentinos consiguen por momentos una sensación de gran escala en los instantes más … llamémosle divinos, que cuesta creer que engarce tan bien con su estética lóbrega y mugrienta. Del mismo modo se acoplan entre sí los estilos de los dos hermanos, que pese a tener sus diferencias evidentes, consiguen alternarse casi como si fueran un solo dibujante. Parte de la culpa de esto es también de Dave McCaig, que con una paleta característica y muy poco naturalista y, sobre todo con un render sucio y profuso en textura, no solo logra unificar el trabajo de los Fiumara, sino que conserva la coherencia cuando entran en juego otros dibujantes como Leomacs o Fernando Blanco.

Universo Sandman: Lucifer integral no desbanca a la serie de Carey y Gross de su privilegiado puesto en el podio, pero, con una mezcla de respeto al original e identidad propia, va más allá de idea de digna continuación en la que se quedaba el volumen de Holly Black y Lee Garbett y, sin duda, va a suponer una alegría a todos aquellos que echan de menos la línea Vertigo.