Ya comentábamos hace poco que La guerra de los reinos está siendo el mejor crossover que ha publicado Marvel en lo que va de siglo. Es cierto que debería haber sido mucho más conciso y delimitarse a la cabecera de Thor escrita por Jason Aaron. Sin embargo las dimensiones de esta historia río han ido creciendo de tal manera que desde el bullpen de Marvel decidieron que sería mejor si abarcase al cosmos conectado de toda la editorial.
Si bien es cierto que el asalto de Midgard por parte de Malekith está siendo masivo con repercusiones en todas las partes del planeta Tierra, el número de cómics implicados en el evento está siendo mucho menor de lo esperado, sobre todo si tenemos en cuenta precedentes como Imperio Secreto o Secret Wars. En Panini Italia decidieron que sería lo mejor unificar formatos en todo el territorio europeo donde publican los cómics de Marvel, y por ese motivo llegamos a esta serie denominada Extra.
Este primer volumen tiene una calidad y contenidos desiguales, a saber: una miniserie de tres números completos, el primer número de otra, y por último un one-shot con varias historias cortas. Por lo general se deja leer muy bien, consiguiendo que como lectores pasemos un rato entretenido viendo diferentes partes del conflicto protagonizadas por los más variopintos personajes de Marvel. Además, el tomo entra desde el primer momento por los ojos gracias a la sensacional portada de Alan Davis.
Del material incluido me gustaría destacar la miniserie de tres números protagonizada por Punisher. Escribiendo nos encontramos con ese guionista todoterreno que ha resultado ser Gerry Duggan, capaz de dar con la voz de cualquier personaje del que se haga cargo. Su versión del Castigador es la mejor que me he encontrado desde los tiempos en los que Garth Ennis guiaba los pasos de Frank Castle.
Duggan da con el clavo desde el primer momento, mostrando a un Punisher cuya guerra por defender al inocente y castigar a los criminales no tiene fin… Ni fronteras. Lo mismo da que sea un cártel de la droga que una horda de gigantes de hielo. Son una amenaza para la gente que no ha hecho nada y deben morir, punto. Esta limited (que tendrá continuación), se lee en un suspiro y cuenta cómo nuestro vengativo héroe tiene que ayudar a evacuar un hospital atravesando un túnel hasta llegar a Nueva Jersey. La brillantez de la historia radica en la simpleza de su planteamiento, con una gran caracterización de los personajes. El final es de esos que te dejan helado en un primer momento, para pasar a aplaudirlo un segundo después.
Como decíamos antes, también se incluye el primer número de la miniserie Giant Man. En ella podremos ver a Scott Lang, a Erik Josten (Atlas de los Thunderbolts), a Tom Foster (hijo de Bill Foster, el Goliath asesinado en Civil War) y a Raz Malhotra, que se presenta como una mezcla de Los cañones de Navarone y ¿Colega, dónde está mi coche? (así de surrealista, en serio). Freyja (haciendo las veces de Charlie) convoca a estos cuatro “héroes” para que viajen y se infiltren en el estado de Florida, que está tomado por los gigantes de hielo.
A partir de este punto tenemos una buddie movie en toda regla, totalmente surrealista, divertida como pocas historias he leído últimamente y dejando un grato recuerdo una vez terminado de leer, pero ojo, que ¡solo es el primer número! A saber qué situaciones absurdas les pasan en los siguientes. No obstante, no me ha terminado de convencer lo de publicarla a trozos.
Para el final dejamos el one shot titulado The War of the Realms: War scrolls:Un puñado de historias cortas de diferente calado. Muchas veces este tipo de especiales suelen estar realizados por autores de segunda fila. Aunque hay excepciones, como la titulada Dios del miedo, protagonizada por Daredevil,que empuña la espada de Heimdall viendo todo lo que sucede en cada uno de los reinos. La historia la firma Jason Aaron y la dibuja Andrea Sorrentino. Toda la carne en el asador para ofrecernos una versión del Hombre sin miedo como nunca antes habíamos visto.
El resto son meros divertimentos: Tres o cuatro guerreros es bastante macarra; Cuac de los reinos, protagonizada por Howard Duckson (ya no se le llama “el pato”), con el bueno de Howard tratando de resolver uno de los casos de su agencia de detectives… Esta última viene firmada por los habituales de sus plumíferas aventuras Chip Zdarsky y Joe Quinones. Una simpática aventura, totalmente intrascendente, pero necesariamente escatológica y tronchante.
Resumiendo, La guerra de los reinos: Extra 1 es un buen tomo, pero prescindible para aquellos que no estén interesados nada más que en la historia y principales acontecimientos del evento.