Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Una fracción de segundo

Una fracción de segundo
Guion
Guy Delisle.
Dibujo
Guy Delisle.
Traducción
María Serna.
Formato
Cartoné, 208 págs, color. 19X26 cm.
Precio
22€.
Editorial
Astiberri. 2024.
Edición original
Pour une fraction de seconde: La Vie mouvementée d'Eadweard Muybridge (Delcourt).

A Guy Delisle se le conoce en el mundo del cómic por sus libros autobiográficos que relatan sus viajes por el mundo (Shenzhen, Pyongyang, Crónicas birmanas). Su última obra resulta sorprendente en cuanto al cambio de registro, puesto que realiza una biografía del británico Edward Muggeridge, más conocido como Eadweard Muybridge, nombre que adoptó cuando se fue a vivir a EE.UU. personaje clave en la evolución de la fotografía y el cinematógrafo. Una fracción de segundo: La azarosa vida de Eadweard Muybridge sigue su vida desde que emigró al continente americano con veinte años hasta su muerte en 1904. Edita, como viene siendo habitual en la obra de Delisle, Astiberri.


Aunque se centra fundamentalmente en la vida de Muybridge, la obra no duda en saltar cuando procede a otros personajes que han tenido relevancia en la evolución de la grabación de imágenes en movimiento, bien sea Leland Straford, magnate que financió la investigación, obsesionado por demostrar que el caballo al trotar llegaba a mantenerse sin pisar el suelo; Edison o los hermanos Lumière. Además, aparecen con mayor o menor peso multitud de figuras históricas como Degas, Rodin o Tesla. La obra se centra fundamentalmente en todo lo que se relaciona con la faceta investigadora de Muybridge, aunque también hay lugar para episodios más personales como su fallido matrimonio y su altercado con el amante de su esposa.

A pesar de que me interesaba mucho el tema que trata, tengo que reconocer que iba con algo de miedo, porque las obras de cómic de corte divulgativo que abordan largos períodos y explican la historia de un área concreta, suelen ser obras áridas, con apenas narrativa y que, a partir de cierta extensión, se puede llegar a hacer aburrido, por muchas anécdotas que cuente. Es lo que ya comentaba con obras como La increíble Historia de la Medicina o Sex Story, en la que apenas hay narrativa y son más un libro ilustrado con formato de cómic, con un interés innegable pero que no podemos abordar como lecturas de otro tipo, esperando una historia con su estructura convencional.


Pero no sucede eso con Una fracción de segundo. Delisle se ha documentado profusamente y ha sido capaz de construir una historia que intercala relaciones personales, un intento de ir consiguiendo apoyos tanto en respeto como económico, y cómo su obstinación le lleva a conseguir cotas impensables. Es lo que sucede por ejemplo con sus primeras fotografías de desnudos, que en pleno final del siglo XIX resultaban escandalosas, pero él siempre tuvo claro que tienen un sentido anatómico. Gracias a ese tipo de escenas va construyendo también el arco evolutivo del personaje y aportándole un volumen propio de obras de narrativa convencional.

En cuanto al dibujo, Delisle opta por su estilo habitual, con un bitono de marrón cambiante, y en el que se introducen escasos elementos a color con un efecto narrativo premeditado. Se incluyen también fotografías reales de Muybridge, que sirven para ilustrar los pasajes históricos, lo cual resulta muy enriquecedor a nivel histórico. Por si fuera poco, también añade en los capítulos finales algunas viñetas circulares pequeñas que, al pasar deprisa las páginas, construyen una animación, fundamento del fenaquitoscopio de Plateau que también aparece citado en la obra. Por último, las guardas de la obra vienen con una colección de retratos realizados por el autor de todos los personajes que aparecen en la obra, y una cronología de sus fechas de nacimiento y muerte.


En definitiva, Una fracción de segundo: La azarosa vida de Eadweard Muybridge es una obra que, sin perder el rigor histórico, narra de manera divertida la historia de los inicios de la fotografía y su evolución a la cinematografía, siguiendo de cerca a un personaje que para muchos resultará desconocido, pero que sin embargo ha tenido una importancia vital para la evolución de ambos medios. Un tipo que emigró a EE.UU. y comenzó a trabajar como librero, cuya inquietud le empujó a investigar la manera de captar imágenes, primero estáticas, y posteriormente imágenes animadas. Obra entretenida y divulgativa a partes iguales realizada por un autor con experiencia, que consigue sorprender con recursos visuales e información real.

Lo mejor: Ver las fotografías reales aporta mucho interés a cada escena. Que consiga hacer una obra de este corte sin que tengamos la sensación de estar leyendo un libro ilustrado.

Lo peor: A pesar del oficio de Delisle, si no te interesa la historia de la fotografía, no te va a aportar mucho más.