Como siempre digo, la salida de un nuevo número de la revista divulgativa Plot 2.0 es una estupenda noticia. Ferrán Delgado aparca un poco la etapa de Walter Simonson en Thor (aunque no del todo, impagable ese artículo dedicado a la publicación en España de esa magnífica etapa por parte de Forum) para centrarse en su inicios profesionales, repasando sus diez primeros años de profesión, desde 1973 hasta 1983, año en que publica La Balada de Bill Rayos Beta, su primera saga en la colección del Dios del Trueno.
A lo largo de varias entrevistas realizadas durante este periodo de tiempo, descubriremos los primeros pasos de Simonson que llevaron a este artista a dedicarse al mundo del cómic. Su afición a los relatos de ciencia ficción (trabajó un año en una librería), sus aventuras juveniles para leer tebeos en las tiendas, o su paso por la universidad para ser Geólogo, entre otras situaciones, empujaron a Simonson a dedicarse a crear mundos de fantasía en viñetas.
Entre todas las entrevistas y artículos de la época, el lector irá descubriendo que no solo la influencia de Jack Kirby está patente en el estilo de Simonson. Con sorpresa descubrimos (y descubrí) su admiración por Alex Toth y Jim Holdaway, creador gráfico de Modesty Blaise, dibujantes de los cuales se deja influenciar por partes iguales para crear su personal estilo gráfico, además de saborear todas esas historias cortas publicadas en las décadas de los 50’s y 60’s relacionadas con las historias de guerra, aventuras, y por supuesto, ciencia ficción.
Ferrán Delgado ahonda en dos series fundamentales para comprender, más si cabe, la leyenda que tenía Simonson entre los profesionales del gremio y por los aficionados a la ciencia ficción: Manhunter y Star Slammers.
Manhunter es la primera serie realizada para DC que obtuvo algo de relevancia; supuso el inicio de una grata amistad con Archie Goodwin, guionista de Detective Comics cuando Simonson realizaba los dibujos de este complemento de 8 páginas que acompañaba las aventuras de Batman. Fue la primera colaboración entre ambos. La adaptación para Heavy Metal de la película Alien, los tebeos de Star Wars y las series donde era editor para Marvel también eran fuente de cultivo artístico, de las cuales la revista también se hace eco.
Pero si Manhunter es el título que lo puso en boca de los aficionados, Star Slammers es el causante de todo. Historieta realizada como tesis final de su paso por la Escuela de Arte, además de reclamo para jornadas de aficionados, Simonson realizó un cómic de ciencia ficción donde volcaba todas sus influencias literarias y artísticas. Cuando decidió dedicarse al mundo del cómic, esta historia era su carta de presentación. Y hasta ahí puedo contar.
Completa la revista, una extensa entrevista realizada por Jon B Cooke, editor de una famosa revista dedicada a los autores del mundo de la viñeta, donde ambos hablan largo y tendido de la figura de Jack Kirby, y su influencia en la vida y arte de Simonson.
Muchas sorpresas esconde este cuarto número de Plot 2.0, muy gratas para cualquier seguidor de Walter Simonson y necesarias para conocerlo cómo individuo. Entre estas sorpresas, está el blog personalizado para cada revista que Ferrán a iniciado con este número. Blog donde encontraremos infinidad de imágenes, textos de apoyo y fotografías que complementan la lectura de los artículos.
Si la espera entre número y número se hace larga, no os digo cómo será tras leer este número dedicado a los inicios de Walter Simonson, además de desvelaros el tema del quinto número: Alpha Flight de John Byrne.