Hola niños y niñas. Hoy nos acompaña Ferrán Delgado, el culpable máximo de Plot 2.0 la revista de divulgación sobre Marvel, una de las lecturas más recomendables para todo aquel que disfruta de los superhéroes de La Casa de las Ideas y del cómic en general.
Cuándo y por qué decidiste embarcarte en la realización de una revista especializada en Marvel.
Empecé a darle vueltas al tema cuando mi volumen de trabajo para (la editorial) EDT empezó a menguar y me encontré por primera vez en una década con tiempo libre para desarrollar mis proyectos.
Después de trece años trabajando con Manga y cómic europeo, me apetecía volver a trabajar con cómics Marvel, pero como Alejandro M. Viturtia no estaba interesado en contar conmigo, decidí buscar una fórmula para hacerlo por mi cuenta y de ahí salió la revista.
Tengo que reconocer que disponer de libertad total para hacerlo a mi manera es una gozada, un lujo que raramente se da. Si la revista tiene este formato y estos contenidos es precisamente porque no he tenido que pasar por ningún filtro, ni consensuar nada.
Por qué solamente Marvel y no la Distinguida Competencia.
Desde el principio sabía que la única posibilidad de que una revista de información cuajara era darle un enfoque diferente a lo que se había publicado hasta ahora, teniendo muy presente que competir con los contenidos gratuitos de la red era muy complicado.
Por eso aposté por la hiperespecialización, prescindiendo de novedad. De esta forma no entraba en competencia con Dolmen y compañía, y daba un contenido que no se puede encontrar en la red, o al menos, no con la calidad que ofrezco. Además, al carecer de novedad le daba un tiempo extra de exposición en la tienda porque es una revista de consulta atemporal.
La elección natural era Marvel porque es el material que más conozco, y el que más me apetecía tratar. Creo que tenía un poco de síndrome de abstinencia de mi etapa en Forum. Me refiero a que entonces podía trabajar con cómics Marvel, y no por trabajar en aquellas condiciones y con según quien.
La muerte de Jean Grey es un historia vital para la Patrulla-X. Por qué esta saga para iniciar la andadura de Plot 2.0. y no otra.
Por cuestiones nostálgicas y comerciales, la elección era clara desde el principio. Contar con la ayuda de Peter Sanderson y Eliot R Brown fue un auténtico lujazo que le dio a la primera revista un plus de calidad.
La rivalidad entre Chris Claremont y John Byrne abarca gran parte de los dos primeros números, siendo más interesante que la propia muerte en si. ¿Aún te guardas alguna entrevista o declaración más en la manga? ¿Está todo ya contado o dicho?
Qué va, tengo material de primera calidad para un tercer número sobre el tema, pero lo he pospuesto para no cansar. Espero tener la oportunidad de poder publicarlo algún día a medio plazo, aunque habrá que ver si la revista aguanta tanto.
La ventaja es que, cuanto más tiempo pase, más probabilidades tengo de que los contactos que voy haciendo en cada revista me abran puertas que estaban cerradas en los primeros dos números. Vamos a ver.
La comparativa entre el tebeo original y el que finalmente se publicó ha resultado bastante esclarecedora de la forma de trabajar de Jim Shooter junto con sus colaboradores. A pesar de todo, crees que Shooter fue un buen editor en general para la época y Marvel en particular.
Es difícil etiquetar a Shooter. Es un personaje de contrastes, que habría que valorar dependiendo del momento de su mandato y la decisión que tomara. Sus primeros años fueron esenciales para poner orden en el caos, expandir la editorial y cuidar a los creadores, a costa de tomar decisiones difíciles que le granjeó enemigos acérrimos.
Como dice Byrne, el principal problema llegó cuando quiso seguir arreglando cosas que ya no necesitaban arreglos. Luego, empezó a tomar decisiones polémicas para defender los intereses de la empresa que le perjudicaron de cara a la opinión pública, como el tema de la devolución de los originales de la Silver Age y el trato «especial» que le dieron a Kirby. A partir de ahí, todo se precipitó, sobre todo por sus pulsos con los nuevos propietarios.
Tengo que decir que las entrevistas a Jim Shooter y a John Byrne son un ejemplo claro del ego desmesurado que tenían ambos, algo que al final les ha pasado factura en sus respectivas carreras profesionales (sobre todo a Shooter). ¿Te has planteado entrevistarles a ambos alguna vez?
Ni por asomo. Durante una temporada estuve visitando con asiduidad el foro de Byrne, Byrnerobotics, y al final tuve que dejar de hacerlo porque me di cuenta de que me estaba empezando a afectar la forma de ver su trabajo. Digamos que su calidad humana no está al mismo nivel que su talento.
En cambio, con Shooter ha sido totalmente diferente. Le estuve siguiendo en su blog mientras lo estuvo actualizando, y me pareció bastante sensato y razonable, y trataba bastante bien a la gente. Además, en ciertos temas delicados tuvo apoyos bastante inesperados, como en las acusaciones de que tuvo algo que ver en la muerte de Gene Day, un ataque que su hermano negó rotundamente.
Creo que estar alejado del poder le ha sentado bastante bien, al contrario que a Byrne, que se ha creado una burbuja de acólitos que le ha alejado de la realidad, y a quienes trata con una condescendencia que da vergüenza ajena. A mí me sorprendía esa actitud, porque básicamente, el grueso de sus ingresos dependen de las commissions que le encargan estos mismo acólitos. Ahí entendí más que nunca por qué a sus fans se les llama «víctimas de Byrne».
Sobre lo de entrevistarles, a Byrne es impensable y con Shooter intenté que me diera permiso para publicar entradas de su blog de forma literal a través de terceras personas, pero no ha dado señales de vida, así que ya me he resignado, una lástima. No me atrae mucho la idea de entrevistar a los protagonistas después de tres décadas, porque no me fío ni de su memoria (lógico ¿Quien se acuerda de lo que hizo hace tres décadas?) ni que resistan la tentación de rescribir/adornar la historia. Prefiero buscar documentos de la época porque me parecen más rigurosos.
Quién es Eliot R Brown.
Estuvo en la plantilla de Marvel durante muchísimos años. Al principio sobre todo componía textos y era el fotógrafo regular de la editorial, pero como domina tantos campos, era como un bombero que ayudaba a solucionar problemas de todo tipo, especialmente en números con problemas de entrega o cuando surgían imprevistos.
Más adelante pasó a colaborar en Marvel Universe con gráficos y diagramas. Precisamente, al estar en plantilla y tener siempre una cámara disponible es la explicación de cómo es posible que tenga fotografías únicas, realizadas por alguien de dentro.
En los tres números que has realizado, dedicas mucha información y datos a las ventas que tenían estos tebeos, demostrando que eran un éxito, pero no siempre tan apabullante cómo dicta la leyenda.
Exacto. Suele haber bastante confusión con el tema, y los propios protagonistas no ayudan demasiado a esclarecerlo. Por eso he intentado recurrir a los pocos datos existentes para sacar conclusiones objetivas, dejando claro cual es el grado de fiabilidad de la fuente.
En el nuevo número inicias tu estudio sobre la etapa de Walter Simonson en Thor, una decisión que aplaudo. Continuando con el tema de las ventas, en este tercer número hay un interesante dossier de artículos que tratan sobre el inesperado éxito del primer número del Thor de Simonson y su repercusión al incrementar su precio de venta, dando un interesante debate sobre la especulación y la acusación velada de que Marvel ha sido la causante de tanto revuelo para alzar a Simonson como un autor Hot. Cuál es tu opinión sobre todo esta polémica.
Siguiendo con la pregunta anterior, para entender el impacto real de las ventas no basta con jugar con las pocas cifras existentes, sino que es necesario explicar cual era el contexto de la época. Así que antes de dar las cifras, he querido mostrar cual era la situación, y me he valido de toda la polémica que hubo en torno a la aparición de Thor 337 para hacerlo. Me pareció que plantearlo a través de recortes de artículos, noticias y opiniones de lectores ordenados cronológicamente era una forma mucho más amena y didáctica.
Tengo claro que el público potencial de la revista ya tiene sus años, muchas obligaciones y más cómics pendientes de leer de lo que su tiempo libre le permite, así que me parece clave mostrar la información de una forma fácil y atractiva.
Sobre la polémica en sí, a mí me parece fascinante aquella época porque se estaba desarrollando el mercado de venta directa, un elemento clave que le permitió a las grandes editoriales desembarazarse en parte de las mafias de las distribuidoras a quioscos y proporcionó las condiciones para explorar nuevos formatos. El desarrollo de la red de librerías especializadas también fomentó la venta de cómics atrasados, lo que permitió ver que si se aplicaban ciertas técnicas del libre mercado se podían obtener grandes beneficios económicos, y de ahí surgieron los especuladores. Esta actitud no solo se limitó a los profesionales, sino que los propios coleccionistas también contribuyeron al desarrollo de este fenómeno, aunque de forma más modesta.
La publicación del número 337 evidenció todos estos factores, y la polémica que se creó en la sección de correo del Comic Buyer’s Guide fue un excelente testimonio de este fenómeno y permitía entender los puntos de vista de los afectados. Raramente se ha podido testimoniar de forma tan clara un momento clave para la industria del cómic como el que sucedió en torno al número 337.
La duda que tenía era si el público de la revista estaría tan interesado en estos temas como yo. Al final decidí correr el riesgo y dedicarle una buena cantidad de páginas al tema, con la confianza que me daba que, al no haber publicidad, a quien no le gustar lo considerara como el espacio que una publicación como el Dolmen le suele dedicar a la publicidad, y que no era dinero malgastado. Ha habido reacciones de todo tipo, pero creo que las de apoyo son más numerosas, así que creo que seguiré tocando el tema.
Esta polémica no terminó en la tercera revista, pero por razones de extensión del contenido, he tenido que posponerla hasta la quinta, que no tendrá nada que ver con Simonson. Sin embargo, creo que en el punto en que quedó la polémica apenas tiene que ver con Thor si no en los puntos de vista de los implicados sobre los cambios radicales que está sufriendo el mercado y cómo está afectando a las políticas editoriales. Además, Jesús Marugán de Akira Cómics escribirá un artículo sobre la evolución del mercado USA en aquella época y lo compare con el mercado actual y el español. Creo que puede ser interesante.
Volviendo a tu pregunta, yo no creo que la especulación surgiera de Marvel sino de los especuladores a todos los niveles. Por supuesto, a Marvel le fue de perlas lo que pasó e intentó que no hubiera desabastecimiento en los quioscos a causa de que los especuladores se tiraron en tromba a por ejemplares del nºúmero337, pero por otro lado, a Marvel le interesaba mucho más que compraran los ejemplares las tiendas porque estas no tenían derecho a devolución y los quioscos, sí. La lástima es que perjudicó a muchos compradores casuales que solo acudían a los quioscos. Otra de las consecuencias de este boom es que reactivó ––o casi se podría decir que lo activó a secas–– el mercado de números atrasados de Thor, lo que fue un salvavidas para muchas librerías.
Lo triste del caso es que el desarrollo del mercado de venta directa fue lo que probablemente salvó a la industria del cómic en aquella época y fomentó la aparición de editoriales independientes, pero a largo plazo puede que haya sido su condena, porque los cómics han desaparecido prácticamente de los quioscos y ya no llegan al gran público con lo que el relevo generación es casi inexistente.
En la revista incluyes innumerables dibujos inéditos de los tebeos que estas tratando. ¿Crees en su valor informativo o los incluyes solamente como curiosidad para acompañar al texto informativo?
Cuando uno ha leído tantas veces los cómics que trato en la revista, lo que quiere el lector es saber más del tema, ya sea en información como en imágenes, y no que le cuenten lo de siempre. Por eso le doy tanta importancia a ambos campos, ya que es un incentivo para atraer compradores potenciales. No solo procuro ofrecer imágenes raras, sino que tengan calidad, siendo selectivo.
Soy consciente de que en algunos casos se pueden encontrar en la red, pero apenas tienen resolución y calidad. Por eso me tomo muchas molestias en contactar con coleccionistas privados para que me envíen escáners de calidad, de esta forma el lector puede disfrutar de todo el detalle de esas imágenes que ya ha visto, pero sin poder disfrutar apenas de los detalles.
La clave de la supervivencia de la revista es ofrecer material que no se puede encontrar en la red, por eso trabajo duro en esa dirección. En el momento en que la gente perciba que es más de lo mismo, la revista está condenada.
Hablemos de Marvel Fumetti, una sorpresa que ha aparecido en el tercer número. ¿Cómo accediste a las fotos originales y podremos ver más entregas en futuros números?
Gracias a la generosidad de Eliot R Brown, he tenido acceso al material original de ese especial único que, como puse en el titular de la primera entrega, es el testimonio de una época dorada irrepetible.
Por eso la idea es hacer entregas a medida que el contenido principal lo permita. En el caso de la próxima cuarta revista, ––que estoy intentando que salga por Navidad–– me he visto obligado a posponer la sección porque el contenido es tan extenso que no me ha quedado más remedio.
Espero que a partir de la quinta revista pueda dar de forma regular todas las secciones que he ido inaugurando, como la de El Museo, Marvel Universe, Marvel Fumetti o artículos más técnicos como una profundización sobre el tema de la fecha de portada de los cómics, etc.
Para aquellos que no te conozcan, tienes un blog (ferrandelgado.blogspot.com) donde se pueden disfrutar de imágenes en buena calidad de originales, algo que has incluido dentro de la revista como sección. ¿Puedes explicar brevemente cómo se llega a valorar económicamente un original?
Bueno, el tema es muy extenso, y desde un principio quise incluir una sección regular para introducir a a gente sobre el tema. Lo que pasa es que luego cambié de opinión y opté por seducir primero a la gente mostrando originales históricos e introducir el tema de forma gradual.
Para quien está metido de lleno en este hobby, es un mundo apasionante, como es mi caso, pero tengo presente que la mayoría de la gente lo desconoce y por eso quiero tratarlo de forma gradual.
Sobre el tema de la cotización, varía como en los cómics, que te puedes encontrar algunos por muy poco dinero, puede que $25 y pueden llegar a millones, como se ha visto en subastas en el mercado europeo. Los criterios de valoración son muy particulares, y para entrar en este mundillo hay que estar muy informado o te pueden estafar, empezando por los propios marchantes de arte o casas de subastas. Intentaré ahondar en el tema de forma gradual, cuando el espacio y el tiempo lo permita. También espero que más adelante, cuando haya pasado la primera fase pedagógica, tire de contactos y cuente con firmas invitadas, pero eso será más adelante.
De momento, prefiero ir partido a partido ––tirando de símil futbolístico–– porque la existencia y continuidad de esta revista es muy frágil, y en cualquier momento se puede terminar la aventura. Por eso es tan importante contar con el apoyo de todo el mundo ya sea promocionándola en las redes virtuales y de amigos, como pidiéndola al librero.
El tercer número se ha retrasado por que has cumplido uno de tus sueños, trabajar para el mercado EEUU. ¿Qué tal está siendo la experiencia¿ ¿Es posible que tenga continuidad?
En efecto, tuve que parar la revista durante unas cuantas semanas para cumplir un sueño, que fue trabajar para el mercado USA con un autor al que admiro desde hace años, como es Erik Larsen. Hablo bastante del tema en el editorial de la revista.
La puntilla a esta experiencia fue que, gracias a Bruce Timm, el co-editor del especial que rotulé, conseguí hacer algo impensable, que es trabajar directamente para Marvel Comics, en concreto en una historia producida por Bruce Timm para el especial 75 aniversario del Capitán América. Esta historia estaba basada en el primer trabajo de Stan Lee para Marvel ––un relato de dos páginas publicado originalmente en Captain America Comics 3––, y contó con nuevos diálogos del mismísimo Lee.
No sé qué pasará con el tema, si habrá continuidad, pero de momento Larsen me ha prometido que colaboraría en Savage Dragon número 200, y me consta que tanto Larsen como Timm han quedado muy contentos con el trabajo que hice con aquel especial, por lo que procurarán que les rotule lo que se preste a una rotulación de estética sesentera. Bruce me hizo uno de esos comentarios que no tiene precio. Se lamentó de no haber podido contar conmigo cuando ambos hicieron The World’s Greatest Comics Magazine. Teniendo en cuenta que lo rotuló Comicraft, fue uno de los mayores halagos que he podido recibir.
Para el trabajo de Marvel traté directamente con Tom Brevoort, y creo que también quedó muy contento conmigo. A pesar de que quien me consiguió el trabajo fue Timm ––algo que Tom me dejó bien claro justo empezar–– es posible que Brevoort se acuerde de mí un día de estos.
Pero lo que tengo bastante asumido es que este tipo de trabajos serán extras y dudo que puede vivir exclusivamente de ellos. Pero quien sabe, la vida da muchas vueltas, y al igual que tenía muy asumido que mi sueño de trabajar para Marvel nunca se cumpliría, también me puedo equivocar con esto otro.
Vamos a sacar al aficionado que hay en ti. En qué década se hicieron mejores tebeos, en los setenta con sus Patrulla-X, Daredevil, Puño de Hierro, Shan-Chi o Howard el Pato, o la década de los ochenta con sus Cuatro Fantásticos, Thor, Excalibur o Caballero Luna, por poner unos ejemplos.
Es difícil escoger entre papá y mamá, pero creo que la primera mitad de los 80 es imbatible, fue una época única, de ahí que me esté centrando en ella. Pero en los 70 también se hicieron grandes cómics. Lo que pasa es que la nostalgia hace que sea complicado verlo de forma objetiva.
En mi adolescencia idolatraba el Volumen 3 de Vértice de la Patrulla-X, con las etapas de Claremont, Cockrum y Byrne/Austin un glorioso blanco y negro, y por otro lado, a principios de los 80 ya me compraba directamente cómic USA, y viví en directo las etapas de Byrne en FF, Simonson en Thor, Sienkiewicz en los New Mutants, Miller en Daredevil, etc… y eso también marca.
Aunque ya lo has dejado claro cuando hablabas de John Byrne, de todas las grandes estrellas de hace dos o tres décadas, quién ha mantenido la calidad en estos días, por que ver algunos paneles de Frank Miller o Howard Chaykin es bastante revelador.
Creo que a Miller se le ha machado excesivamente por sus ideas políticas, porque creo que sus últimos trabajos aún siguen siendo interesantes, sobre todo en lo que a composición y narrativa se refiere. El problema es que su deriva fascista le ha hecho ganarse una gran cantidad de detractores, y en parte es comprensible, pero algunas de las páginas de Holy Terror me parecen más interesantes que la gran mayoría de la producción del panorama actual, en la que muchísimos autores compensan su falta de base narrativa con un exceso de detalle.
Me temo que a Chaykin dejé de seguirle hace siglos, así que no puedo opinar.
Para cuándo un Cuatro Fantásticos de Carlos Pacheco, Rafael Marín y Jesús Merino, o un Invencible Iron-Man de Salvador Larroca y Matt Fraction, o, un Héroes de Alquiler de Pasqual Ferry y John Ostrander, o un Ojo de Halcón de David Aja y Matt Fraction.
No creo que toque estas etapas. De momento me estoy centrando en la primera mitad de los 80 y luego lo más probable es que vaya hacia atrás, si es que la revista aguanta tanto. Salvo algunas excepciones como las que citas (la etapa en los 4F del Dream Team español me parece brillante), los 90 me parece una época nefasta de Marvel, por algo fue cuando dejé de leerlos. Tan solo lo hacía cuando no me quedaba más remedio por cuestiones de trabajo cuando colaboraba para Forum portadillas y logos, pero es para olvidar.
Para terminar, déjame recomendar a cualquier interesado en la revista a que se una al grupo de Facebook, porque allí suelo postear e interactuar a menudo.
Para todo aquel que aún no conozca la revista Plot 2.0, podéis leer las reseñas de los tres números publicados a día de hoy: primer número aquí, segundo número aquí y tercer número aquí.