Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Tiburón blanco

Tiburón blanco
Guion
Genie Espinosa.
Dibujo
Genie Espinosa.
Formato
Rústica con solapas, 144 págs, color. 18,5x25 cm.
Precio
19,90€.
Editorial
Sapristi. 2023.

Tras su debut en Hoops, Genie Espinosa pasa de las adolescentes de barrio en un mundo sin hombres que, gracias a los porros saltan a otra realidad, a una obra completamente en las antípodas tanto en tono como en temática. En esta opta por contarnos una historia de soledad, nostalgia y duelo. Sapristi publica Tiburón blanco, un título en el que la autora da un salto cuantitativo en su estilo y apuesta por un cómic de diseño muy cuidado, aunque mantiene varios puntos en común con su anterior obra.


Maude recibe la noticia del fallecimiento de su padre. Hasta su muerte, vivía en una pequeña isla, y la joven tendrá que desplazarse allí para terminar de solventar los papeleos habituales de estas situaciones, y dejar libre la casa donde vivía. Su relación con él había sido escasa, aunque parecía que últimamente se estaban empezando a acercar más, pero recoger las pertenencias de su padre le abre un mundo de recuerdos enterrados y le va mostrando cómo era realmente, descubriendo desconocidos puntos en común con él. La tristeza de Maude contrasta con la alegría de la isla, que se prepara para celebrar el 10º aniversario del avistamiento de un tiburón blanco en sus costas.

Me parece muy acertado el cambio de rumbo de la autora para esta obra. Hoops había contado con muy buenas críticas, y la había posicionado como otra de esas jóvenes autoras nuevas que están pintando nuestra industria del cómic con una variedad y diversidad inéditas hasta el momento. Lo fácil habría sido continuar en esa línea transgresora, muy aferrada a lo urbano que la dio a conocer al gran público, pero sin embargo escoger dar el salto a una historia de corte mucho más intimista, en la que el diseño juega a favor de transmitir esa soledad y nostalgia, me parece algo digno de alabanza.


El dibujo sigue en esa línea de cuerpos con grandes troncos inferiores y rostros poco detallados, pero el trazo me parece mucho más firme y proporcionado que en la anterior obra. Donde sí me parece que hay un gran acierto es en el diseño de las páginas, con esas estructuras de viñetas bien planificadas y del uso de elementos como las propias cajas de texto, para contribuir a la sensación visual en conjunto. El uso de pictogramas como elementos simbólicos recurrentes y los cambios de ritmo narrativo con páginas en las que el tiempo pasa muy lento es otro de los aspectos más llamativos de esta obra.

El color se mueve entre paletas planas mono o bicromáticas, y unos degradados que muestran tanto efectos de iluminación como esa analogía con los cambios que va experimentando Maude. Curiosamente, analizando las dos obras de Espinosa, me doy cuenta de que son paletas muy similares, pero el efecto es radicalmente diferente. Aquí no hay estridencias ni nos movemos en escenas psicotrópicas, y el aumento en número de colores utilizados se utiliza para expresar las sensaciones y el interior de su protagonista.


En definitiva, Tiburón blanco está más cerca de Por culpa de una flor que de Hoops. Una obra que es pura poesía gráfica, y que utiliza la simetría de la página, el color y los pictogramas para mostrar de una manera intimista el proceso de duelo de una hija que apenas conocía a su padre. Lectura amable, que invita a detenerse en la planificación de cada página y a dejarse imbuir de la paz y melancolía que transmite. Una experiencia de lectura diferente, apta a diversas interpretaciones pero que suponen una experiencia dispar.

Lo mejor: Desde el punto de vista de diseño es muy potente. Las sensaciones que transmite. El uso del color. El valiente cambio de rumbo de su autora.

Lo peor: Al igual que otras obras enmarcables en el género de poesía gráfica se mueve más por las sensaciones que produce que por la historia en sí, y si no estás abierto a ese tipo de lectura, puede producir indiferencia.