Un día más en Gotham City. Superman, el criminal más peligroso del mundo, ha escapado de su celda en el Asilo Arkham. El único que puede localizarlo es el mayor héroe del mundo, Bizarro. Su batalla épica destruye propiedades de la calva pero brillante multimillonaria Lois Lane… Espera… ¿qué?
Si Superman no está loco, eso significa que todo el mundo se ha vuelto chiflado, y solo un hombre puede ser el responsable. De algún modo, el mayor enemigo de Batman, el Joker, ha obtenido el poder para dar forma a la realidad según sus locos caprichos. Ahora, el mundo está definido por el caos y la muerte, y nadie puede hacer nada al respecto. Es imposible derrotar a un dios. Por desgracia, alguien ha olvidado contárselo a Superman. Armado únicamente con su voluntad, el Hombre de Acero pondrá fin al reino del emperador Joker… o morirá en el intento.
Continúa la publicación en nuestro país de los cómics de las series de Superman enmarcadas en lo que se ha denominado El Nuevo Milenio, publicadas en los USA desde el año 2000. En el anterior volumen de la colección (reseñado aquí) habíamos dejado a nuestro héroe a las puertas de la muerte, víctima de un extraño envenenamiento por kryptonita, y exhausto tras la búsqueda de la desaparecida Lois Lane, secuestrada por el Parásito. Nada más abrir el tomo, vemos a Superman dentro de un tanque de curación, siendo sometido a toda clase de pruebas para encontrar una cura, a manos de los mejores científicos del mundo, entre los que están Ray Palmer / El Átomo y John Henry Irons / Steel. Igual que en la película Viaje Alucinante, la solución pasará por introducir a un puñado de héroes miniaturizados en el cuerpo de Superman para poder encontrar el tumor que le está matando y exterminarlo. Pero claro, no será un camino de rosas, pues tendrán que enfrentarse a los poderosos superanticuerpos kryptonianos y a la revelación de un traidor. Tenemos de estrellas invitadas a Supergirl, Superboy, la Encantadora y Deathstroke.
Se trata de un arco argumental de cuatro números en el que el nivel de tensión emocional baja progresivamente con respecto a la alta carga dramática del arco anterior. Un cambio necesario, sin duda, después de la montaña rusa de peligros y malos tragos que sufrió el hombre de acero con la desaparición de su esposa. Aquí, los guiones de Kelly y DeMatteis destacan de entre los de Loeb y Schultz por sus chanzas y su sentido del humor, que sirven para desengrasar y aliviar tensiones, dando paso posteriormente a un número de relleno, el Superman #159 USA, en el que Superman da una vuelta por la galaxia acompañado del Green Lantern Kyle Rayner. Este viaje acaba cumpliendo dos propósitos: en primer lugar, reforzar la confianza del novato portador del anillo, que no tuvo a un mentor que le enseñara la profesión; y, además, nos recuerda la amenaza de Imperiex, a quien vimos por primera vez en Superman #153 USA, recogido en el tomo Final del Juego.
A continuación nos metemos de lleno en la pesadilla del mundo del Emperador Joker: Superman es un fugitivo de la justicia, acusado de asesinar a Lex Luthor, y encerrado en el Asilo Arkham bajo la supervisión del alcaide Solomon Grundy. Bizarro es el mayor superhéroe del planeta, Lois Lane es una multimillonaria megalómana, el pensamiento científico y racional ha sido proscrito, llueven tartas de nata del cielo, las vacas vuelan… Ciertamente, el mundo se ha vuelto loco. Sólo Superman empieza a recordar breves retazos de su vida anterior, y está dispuesto a averiguar qué le ha pasado a su planeta. Poco a poco, y con la ayuda de una defectuosa Liga de la Justicia, Superman conseguirá desentrañar el misterio de por qué el Joker es ahora una semideidad omnipotente que quiere acabar con toda la vida del universo. A todo esto, ¿nadie ha visto a Batman?
El evento Emperador Joker ocupó las cabeceras del superhéroe rojo y azul durante 3 meses con sus autores habituales, más un número especial homónimo. A los guiones, los mismos autores que en el volumen anterior: Jeph Loeb (Cable: Origen), Joe Kelly (Masacre), Mark Schultz (The Spirit: Angel Smerti) y J.M. DeMatteis (Authority: El año perdido). Aunque siguiendo todos las pautas del evento, y coordinados por el mismo editor (un sinberganza), se nota la firma de cada uno en sus respectivas series. A los lápices volvemos a tener a Ed McGuinness, Doug Mahnke y Kano, a los que se unen ahora Duncan Rouleau (El Multiverso Integral), Carlo Barberi (Guardianes de la Galaxia: Guardianes del infinito) y Mike S. Miller (Injustice: Gods Among Us). Todo un plantel de buenos artistas que, aunque con estilos dispares, no generan confusión ni rompen la armonía narrativa, si bien es verdad que ver los voluminosos músculos y la complexión chaparra de Superman dibujada por McGuinness siempre es un delicioso placer culpable.
Si bien Emperador Joker no es la mejor historia de entre todas las publicadas por ECC en esta colección, sigue teniendo un muy buen nivel, avalada por una excelente amalgama de escritores y dibujantes, haciendo de las colecciones de Superman algunas de las mejores de la DC de inicios de este siglo. El siguiente volumen, Presidente Lex, sale a la venta la semana que viene. Estaremos atentos.