¿Qué sucede cuando compartes tu nombre con el mismísimo Hombre de Acero? La edición Deluxe de Superman: Identidad secreta recopila al completo la aclamada miniserie escrita por Kurt Busiek y dibujada por Stuart Immonen, junto a numeroso material extra. Ambientada en el mundo real, esta historia está protagonizada por un joven de Kansas llamado Clark Kent al que comparan con el otro Clark Kent, el que tiene superpoderes. Todo cambia cuando Clark descubre que tiene una fuerza sobrehumana… ¡y que incluso puede volar! ¿De dónde han salido estos poderes?
Decía mi compañero Enrique en una reseña de otra edición de esta obra, y muy acertadamente, que Superman, por su caracter icónico, por ser ya un símbolo más que un personaje, por representar a todo un medio, se presta a experimentos conceptuales fuera de continuidad como pocos otros. Es muy cierto. Si os fijáis, la gran mayoría de Elseworlds se han centrado en la gran Trinidad de DC Comics: Superman, Wonder Woman y Batman (o la Liga de la Justicia que, al fin y al cabo, gira alrededor de dichos tres héroes). Raro será que nos encontremos un Elseworlds dedicado a Plastic Man, o a Canario Negro, por poner un ejemplo. Pero los tres héroes anteriormente mencionados representan arquetipos únicos y fácilmente reconocibles, y por ello son los más indicados para dichos experimentos. Superman: Identidad Secreta, no es una historia DE Superman, sino una historia CON Superman. Es la historia de un muchacho que un día descubre que tiene los poderes de Superman, y empieza a hacer las cosas que hace Superman, usando un traje de Supeman… pero sin ser Superman. Y. sin embargo… es Superman.
Existe en la industria del cómic superheroico un puñado de escritores y dibujantes que dominan como nadie no sólo el oficio, sino también la historia, los tropos y las herramientas necesarias para hacer que funcionen. En España, el exponente más claro lo tenemos en nuestro querido Carlos Pacheco, y en EEUU, cabría destacar entre otros a Mark Waid, Dan Slott, Geoff Johns… y Kurt Busiek. Busiek (The Marvels, Astro City) es uno de esos autores cuyo nivel de calidad en cada entrega oscila entre lo muy bueno y lo magistral. Y, desde luego, para hacer lo que ha hecho en esta historia, no sólo hay que conocer muy bien al personaje, sino también saber cómo deconstruirlo, desmontarlo en pedazos muy pequeñitos y volverlo a montar para que funcione. Como un relojero de precisión.
En Superman: Identidad Secreta conocemos al adolescente Clark Kent, el joven hijo de los Kent de un pueblo de Kansas quienes, en un derroche de humor y falta de consideración, deciden llamar a su hijo como ese personaje de los tebeos. Vamos, como aquí apellidarte Fuertes y llamar a tu hija Dolores. Ése es el nivel. El pobre Clark crece, cómo no, odiando todo lo que tiene que ver con Superman, soportando continuas burlas, tanto las inocentes de su familia como las más crueles de los compañeros del instituto, hasta que un día se da cuenta de que tiene superpoderes. ¡Clark Kent, de un pueblo de Kansas, EEUU, puede volar! Además, tiene superfuerza, visión de rayos-X, es invulnerable… Evidentemente, este Clark Kent usa sus poderes para volar por todo el mundo y pasar más tiempo en el aire que en la tierra, hasta que descubre que con dichos poderes puede hacer mucho bien en el mundo. Así, decide ponerse un traje de Superman (¡oh, la ironía!), y comienza la aventura.
Clark Kent se hará mayor, se convertirá en escritor (no en periodista), conocerá a su Lois y formará una familia mientras trata de permanecer oculto de un Gobierno de EEUU que quiere atraparlo y desguazarlo para ¿dominarlo? ¿hacer más como él? El resto de su vida Clark andará en la cuerda floja escondiéndose de los dispositivos de rastreo gubernamentales mientras salva a la población de catástrofes naturales, atentados terroristas, etc. Recordad que estamos en el mundo real: aquí no existe Lex Luthor, ni hay invasores extraterrestres ni otros seres superpoderosos. Sólo hay un hombre que tiene los poderes de Superman, viste como Superman y actúa como Superman. Si nada como un pato, vuela como un pato, y grazna como un pato… Ya sabéis. Yo no tengo ninguna duda.
Una obra con un carácter y enfoque tan realista necesitaba de un dibujante que supiera plasmar la existencia de un superhombre en el mundo real. Y pocos lo hubieran podido hacer de manera tan convincente como Stuart Immonen (tal vez Alex Ross, pero es una filia personal mía). Immonen (Inmersión, Moving Pictures) se convierte aquí en artista completo entintando y coloreando sus propios dibujos, con un trazo que nos transporta con inusitada facilidad a ese mundo donde un Superboy de Kansas vuela alegremente sobre las cosechas, y un superhombre siente miedo por lo que su Gobierno puede hacer a su familia. Sólo la piel de este Clark Kent es invulnerable. Al igual que cualquiera de nosotros, siente la felicidad, la tristeza, el miedo, el orgullo y la vergüenza. A modo de diario, Busiek recoge los pensamientos de Clark en su vieja máquina de escribir mientras el arte de Immonen consigue que nos creamos cada una de las viñetas que vemos.
Superman: Identidad Secreta tiene una premisa similar a la posterior Batman: Criatura de la noche, también de Busiek, pero situando el foco en el aspecto luminoso y de fe en la humanidad del héroe. Sin ser una historia canónica de Superman (muchos afirman que ni siquiera es Superman), consigue ser más fiel al personaje y a su lore que mucho de lo que nos cuentan en sus series mensuales. Identidad Secreta contiene la quintaesencia del personaje, define qué ha hecho del hombre de acero el superhéroe más icónico de la historia y es una historia tan atemporal como comprensiva. La edición de ECC Ediciones, además del tamaño ampliado y la guarda de plástico, incluye como material adicional la propuesta de los autores a la editorial (revisada y actualizada), el guion del primer número y algunos bocetos y diseños de portadas de Stuart Immonen. Una edición, sin duda, a la altura del material que contiene.