Guillem March es conocido principalmente por su trabajo para DC Comics, en series como Batman, Catwoman o Harley Quinn, así como por diversos álbumes para el mercado francés. En Summer Muse 2, el autor recopila sugerentes cómics dibujados in situ en la costa mallorquina, con modelos que han posado especialmente para este proyecto. También incluye numerosas ilustraciones y fotografías a modo de making of.

Hace cosa de año y medio Diábolo Ediciones publicó en nuestro país la primera parte de Summer Muse, donde el dibujante Guillem March (Batman: La noche de los búhos) nos mostraba su faceta de ilustrador tanto de estudio como al natural, donde retrataba a amigas y conocidas desnudas o en bikini en los paradisíacos entornos de las playas mallorquinas. Parece que se le quedaron varias láminas por publicar, porque este volumen está dedicado exclusivamente a esos retratos veraniegos con el añadido de elementos como bocadillos de texto, que le dan un aire más parecido a un cómic que a un libro de ilustraciones al uso. Por tanto, este Summer Muse 2 es tanto un artbook como un cómic, con un ilustrador y muchos guionistas, puesto que cada modelo aporta su historia al proyecto. Así, como dice el propio March en la introducción, las modelos se convierten en musas, al ser ellas las que eligen cómo posar y cuánto mostrar al desnudarse.

Las modelos / musas de March no son profesionales: son chicas normales, de las que se pueden encontrar en cualquier playa de Palma y alrededores, con sus tatuajes, sus marcas de bikini y algunas, incluso, con sus michelines. Cada posado es una historia, una conversación, una secuencia de imágenes donde autor y modelo se alternan el papel de narrador. March reconoce que su profesión es la de dibujante de cómics, y que estas ilustraciones veraniegas son sólo un entretenimiento, que las hace porque es divertido. Así, lleva a las playas a amigas y alguna que otra cosplayer como Florencia Sofen, e incluso alguna espontánea que se presta a ser retratada, y en compañía de unas cervezas y algo para picar improvisan una sesión de ilustraciones al sol. En ocasiones el propio March también se desnuda, no sabemos si por quitar nervios a la modelo o porque el sol y el ambiente invitan. Todo da como resultado unas ilustraciones desenfadadas, íntimas y divertidas, donde en ocasiones las preciosas calas mallorquinas se convierten en una musa más.

El estilo de Guillem March se caracteriza por sus rotundas representaciones de la figura femenina, de caderas amplias y piernas kilométricas. No hay más que ver su Monika o sus Musas de Gotham, donde ya sea para el mercado europeo o norteamericano plasma su peculiar visión de los cuerpos femeninos. En Summer Muse 2 esa visión contrasta con la ilustración de modelos al natural, donde evita la magnificación de rasgos y se centra en lo que ve: sus modelos / musas no tienen esos pechos enormes ni largas piernas, sino que son chicas reales, y para demostrarlo March incluye fotografías de las sesiones de ilustración. Al contrario que otros artistas, que usan fotografías como punto de partida de sus ilustraciones, March toma las fotos después de la sesión. Sus modelos posan a posteriori con algunas de las láminas en los mismos entornos donde se han realizado, con lo que podemos admirar aún más el trabajo de March con el estilógrafo y la aguada. La gran mayoría de las ilustraciones están hechas en tonos grises, con ocasionales pinceladas de color para algunos detalles, si bien algunas de las láminas sí están hechas a todo color.

Este Summer Muse 2, en comparación con el volumen anterior, resulta monotemático, pero no por ello es aburrido, puesto que, como ya hemos indicado, March incluye un componente secuencial que convierte cada secuencia de ilustraciones en una historia diferente. No es un libro tan completo ni variado como el primer tomo, pero aun así representa un excelente muestrario del arte de un dibujante que nos ha dado grandes alegrías en sus historias tanto para DC Comics como para el mercado europeo.