STARFIRE: BIENVENIDA A CASA
Amanda Conner, Jimmy Palmiotti, Emanuela Lupacchino
Contiene Convergence The Question núm. 2 USA, Starfire núms. 1 a 6 USA
Julio de 2016
Rústica, 144 págs. A color.
13,95 €
Sobradamente conocida por los lectores del Universo DC, Starfire afronta una nueva etapa en su vida instalándose en la ciudad norteamericana de Florida. ¿Encontrará la paz que busca, pese a los fantasmas de su pasado… y a los huracanes? Las divertidas aventuras de Starfire arrancan con Bienvenida a casa, que recopila DC Sneak Peek: Starfire y los números del 1 al 6 de la serie original, obra de los guionistas Jimmy Palmiotti y Amanda Conner (Power Girl, Harley Quinn) y la dibujante Emanuela Lupacchino (Harley Quinn).
Starfire, la superheroína con carotenemia venida del sistema Vega, lleva dando guerra en nuestro planeta desde 1980, gracias a la mente de Marv Wolfman y el lápiz de George Pérez. Diseñada como una suerte de Red Sonja en el espacio exterior, e introducida en el reparto de los Jóvenes Titanes originales, apenas se le ha visto fuera de esa formación, a excepción de los Forajidos de Capucha Roja, y poco más. Hasta ahora.
Amanda Conner y Jimmy Palmiotti, la pareja Midas de DC Comics, que nos han traído grandes comedias protagonizadas por personajes femeninos como Power Girl y Harley Quinn, nos cuentan ahora la vida de la joven alienígena Starfire, y de sus problemas para adaptarse a la vida entre unos humanos que la temen y la odi… oh, perdón, esto no va aquí.
No, en serio, ¿quién puede odiar a esta mujer?
Tras la historia narrada en los Nuevos 52, etapa en la cual Starfire fue miembro del equipo de los Forajidos liderado por Capucha Roja, hasta su marcha a su planeta natal, Tamaran, a ayudar a su hermana mayor Blackfire. En su nueva serie en solitario, Koriand’r (nombre de pila de Starfire) ha vuelto a la Tierra y pide consejo a amigos y compañeros acerca de cuál es el mejor sitio para empezar una nueva vida. Finalmente, y gracias al consejo de Superman, Kori se muda a una pequeña localidad de Florida llamada Cayo Hueso (Key West en el original), donde se las tendrá que ver con huracanes, criaturas diabólicas y algún que otro nativo con la mano muy larga.
Conner y Palmiotti juegan mucho con la ingenuidad de Starfire, con su incapacidad para entender frases hechas y juegos de palabras, tal como se refleja en algunos bocadillos de pensamiento donde Kori interpreta literalmente algunas de las expresiones que le dicen. Aquí los traductores hacen lo que pueden, pero es evidente que muchos de los chistes se pierden en la traducción. Es una lástima, porque los diálogos de Conner y Palmiotti son ágiles y chispeantes.
Por desgracia, no se puede decir lo mismo del dibujo de Emanuela Lupacchino. La autora italiana, con un estilo que recuerda en ocasiones al de Terry Dodson, adolece de un dibujo bonito, en detrimento de una buena narración. Sus dibujos estáticos, las poses forzadas, y una desgraciada incapacidad para el dibujo cómico lastran la parte gráfica de este tebeo. Sobre todo, si lo comparamos con los dibujos de Conner para las portadas, o con su trabajo anterior para Power Girl. Las expresiones faciales dibujadas por Lupacchino carecen totalmente de emoción, pareciendo más interesada en dibujar rostros y cuerpos bonitos, que en reflejar la comicidad de los guiones. No en vano, a Lupacchino la hemos visto anteriormente dibujando series y portadas de personajes femeninos, como Supergirl o Catwoman. No cabe duda de que una vez que empiece a dominar la expresividad de los personajes, estaremos ante una gran autora.
Conner y Palmiotti repiten la fórmula que tan bien les funcionó en Power Girl: un personaje muy poderoso, rodeado por un plantel de humanos constantemente apabullados por su belleza y poder, intentando encontrar su lugar en la Tierra. No obstante, el factor cómico funcionaba mejor en aquella otra colección (al menos, hasta que pasó a estar escrita por Judd Winnick), tal vez por los dibujos de la propia Conner, o tal vez porque la fórmula de la guapa ingenua ya está muy gastada. Pese a todo, Starfire es un tebeo entretenido, con un par de momentos realmente divertidos, y que gustará a los fans de la serie regular de Harley Quinn, aunque le falte el humor gamberro y macarra de ésta. Al fin y al cabo, unos Conner y Palmiotti en horas bajas siguen estando por encima de la mayoría de guionistas del panorama comiquero.
