De vez en cuando surge un equipo creativo con una química especial; equipos que, al margen de los talentos individuales de sus componentes, funcionan juntos como algo más grande. Sin embargo, no es nada habitual que esos equipos, además de autores monumentales cada uno por su lado y más aún como equipo, sean además tan prolíficos como Mark Waid y Dan Mora, la pareja creativa responsable de ¡Shazam! Conoced al Capitán.
Y es que, veamos, durante los meses que en los USA se publicaron las distintas entregas de este nuevo volumen de ¡Shazam!, Mark Waid firmaba sendas entregas de Batman / Superman: World’s Finest, World’s Finest:Teen Titans, Superman: The Last Days of Lex Luthor y Knight Terrors: Shazam!. A Dan Mora, por su parte, lo podíamos ver en Batman: The Brave & The Bold y Batman / Superman: World’s Finest. Y aún con todo esto habría que clonar a estos dos autores porque aunque estuvieran haciendo todas las series del universo DC, seguro que aún querríamos más.
Desgraciadamente, ¡Shazam! Conoced al Capitán son sólo los primeros números de una serie que continuará sin ellos — puede incluso estos autores sean humanos y necesiten descansar, aunque las pruebas no son concluyentes —, pero aún así este tomo funciona perfectamente como volumen unitario y será a buen seguro uno de los que veremos reeditados cada cierto tiempo como obras de primer acercamiento al gran queso rojo, del mismo modo que lo son El Poder de Shazam o el más reciente Shazam de Geoff Johns.
En resumidas cuentas, ¡Shazam! Conoced al Capitán nos brinda una muestra de lo mejor que nos puede dar el personaje que comenzara como Capitán Marvel, se rebautizara por líos con la Casa de las ideas y que ahora rescatan como el Capitán. Pero también es un ejemplo de lo mejor que puede dar Mark Waid y lo mejor que puede dar Dan Mora. Y creedme que no es una hipérbole ni un eslogan de venta vacío. En este caso ser un compilado de lo mejor que pueden dar personaje y autores forma parte integral de aquello en lo que consiste este tebeo.
Al final, la premisa argumental de ¡Shazam! Conoced al Capitán es casi una excusa para definir al personaje. Es como un pretexto para hacer eso que tan bien hace Mark Waid, que ya vimos en su Flash o su Daredevil y que consiste en recoger cada una de las características esenciales que han ido sembrando aquí y allá los diferentes autores que han pasado por las aventuras de Billy Batson. Una vez recogidas, las reúne bajo una sola lógica en común, que aunque sea la primera vez que la veamos, parece que siempre estuvo ahí. En este punto y en último término, marcará así un nuevo camino para este Shazam total con todas las piezas que hasta ahora estaban diseminadas.
El punto de partida viene en el momento en que los avatares que dan al Capitán sus poderes (Salomón, Hercules, Aquiles, Zeus, Atlas y Mercurio) deciden que como representante de su imagen a la humanidad, el papel de Billy Batson no está siendo excesivamente satisfactorio, con lo que deciden tomar el control. Pero insisto en que esto no es sino una coartada para presentarnos todo el lore e ingredientes variados para esa receta que es Shazam: Su extensa familia — ahora sin poderes, pero igualmente formidable —, sus villanos, su condición absolutamente fundamental de niño… y todo ello aderezado con todas las locuras que se les puedan ocurrir a sus autores, porque precisamente el carácter ligero y desenfadado de Shazam las admite todas, desde tiranosaurios espaciales burócratas hasta una guerra entre la Luna y Ciudad Gorila, sin faltar faltar Black Adam, Capitán Bizarro y otros villanos del fondo del barril o invitados como Creeper y Metamorfo.
Por momentos, el modo en que abraza los conceptos más locos, rozando lo absurdo, de la fantasía y la ciencia ficción en pro de la diversión más desatada y cómo llegan a las resoluciones más insospechadas nos lleva directamente a Doctor Who, en lo que no sería extraño que fuese una referencia consciente por parte de Mark Waid. Además, del mismo modo que en la mítica serie británica, hay que aparcar prejuicios y poner a tope la suspensión de la incredulidad para llegar a unas cotas de imaginación y disfrute imposibles de alcanzar en ningún otro tipo de historia.
No parece casualidad que este tomo comience con el Capitán cabalgando a lomos de un tiranosaurio desbocado junto con el rótulo «Conoced al Capitán». No lo pueden decir más claro, esto es lo que os vais a encontrar y depende de vosotros aceptarlo y disfrutar.
Y si se trata de espectáculo, diversión pura y desacomplejada y sumergirse hasta en el más olvidado rincón del universo DC, el costarricense Dan Mora ya había demostrado en Batman / Superman: World’s Finest — serie con la que vamos a encontrar aquí muchas semejanzas — que no hay otro más indicado. Mora, de algún modo que aún no soy capaz de explicar, reune los más firmes fundamentos del clasicismo y un acabado moderno, atractivo e impactante. Aúna lo mejor de tradición y modernidad y sale igual de airoso de una batalla en el espacio que de una charla familiar o una escena de comedia de las muchas que encontramos en ¡Shazam! Conoced al Capitán.
Lo malo de Mora es que deja en mal lugar a los que vienen después, incluso cuando hacen un trabajo tan impresionante como el del croata Goran Sudžuka , que adapta además su estilo en una línea algo más cartoony de lo que lo hemos podido ver en otros trabajos como A walk through Hell, Marjorie Finnegan o Wonder Woman. Aún con todo, consigue mantener el pabellón alto cuando Mora no está. Completa el elenco de dibujantes la italiana Emanuela Lupacchino, que tal vez no brilla como los anteriores, pero como es habitual en ella, nos deja un trabajo al que tampoco hay peros que ponerle.
Quien antes de este tomo ya conozca al Capitán ya lo sabe de sobra, pero entre otras tantas, tal vez las dos disparidades principales del gran queso rojo con respecto a Superman son que, por un lado, Shazam es un niño y, por el otro, es un personaje que surge y funciona gracias a la magia y estas dos cosas marcan completamente la diferencia y deberían darnos un indicativo de la clase de ojos con la que debemos acercarnos a sus aventuras. Abrazad la magia y la diversión sin complejos de ¡Shazam! Conoced al Capitán. No seáis aburridos dinosaurios burócratas.