Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Reseña: Patrulla-X. Miedo Encarnado

Corre el año 2011 cuando Marvel pone en marcha un nuevo evento que lo cambiaría todo… al menos durante un tiempo… o que, como mínimo, serviría para meternos una vez más la mano en el bolsillo, con los mil y un tie-ins obligatorios y demás cebos típicos de este tipo de prácticas editoriales. Un evento no especialmente recordado por los fans, todo sea dicho. Tal embrollo, que como era de esperar tendría su propia serie principal y abarcaría unas cuantas series regulares, fue conocido como Miedo Encarnado.

patrulla x miedo encarnado
Guion: Kieron Gillen.
Dibujo: Carlos Pacheco, Terry Dodson, Greg Land.
Editorial: Panini Cómics.
Formato: Libro en tapa dura. 272 páginas.
Contiene: Uncanny X-Men 534.1, 535-544 USA.
Precio: 24.95 €


Ya se sabe: desde Civil War, pasando por la Invasión Skrull, Reinado Oscuro y Asedio, los superhéroes más que otra cosa llevaban un tiempo dando bastante miedo a la gente. Ese detalle, unido (supongo) al pesimista escenario de principios de siglo debido a la demoledora crisis económica, abonó el terreno para el nuevo evento lucrativo de Marvel. A los jerifaltes de la editorial les debió parecer muy buena idea plantear un escenario de destrucción pesimista en equilibrio al borde del abismo (véase el paralelismo con la crisis), y para ello no dudaron en plantear como algo novedoso la agotadísima historia de “villano muy poderoso y cabreadísimo amenaza la existencia”. Sea: Villano que no siente aprecio por el mobiliario urbano (Serpiente) es despertado de su retiro por villana menos poderosa pero lista y cruel (Pecado). El villano contrario a la expansión inmobiliaria -recordad, la crisis- convoca a unos cuantos amigos también cabreadísimos (los Dignos) para que lo pongan todo patas arriba. Los héroes del Universo Marvel tienen que hacer frente a la amenaza sin dejar de quedar bien con la gente. Ellos son los buenos, pues vale.

Miedo Encarnado ha sido recogido en tres tomos de la excelentemente editada línea Marvel Deluxe de Panini. El primero de ellos está dedicado íntegramente a la serie principal del evento, guionizada por Matt Fraction y dibujada excepcionalmente por Stuart Immonen, el segundo tomo contiene los tie-ins correspondientes a la serie regular de Los Vengadores, y el tercero y último, este que tenemos entre manos, incluye los cuatro números que se dedicaron a dicho acontecimiento en la colección Uncanny X-men. La verdad es que a lo largo de la mayoría de los capítulos del evento se aprecia una desgana bastante sorprendente en los autores. En los cuatro números que la Patrulla X dedicó al asunto, los del tomo, Kieron Gillen hace lo que puede… y ni tan mal comparado con, por ejemplo, la propia serie principal donde Matt Fraction parece estar pensando en otra cosa.

breaking point

Pero que no cunda el pánico. El volumen de Marvel Deluxe dedicado a Miedo Encarnado está conformado por 12 números americanos de la serie regular Uncanny X-Men (concretamente con los 12 últimos del volumen 1 de la colección) de los que, como decíamos, únicamente cuatro se corresponden con aquel un tanto fallido evento. La recopilación comienza con el número correspondiente a la iniciativa Point One, diseñada por los mismos jerifaltes de los que hablábamos antes para que nuevos lectores, aprovechando tan brillantemente ideado punto y aparte, se subieran en marcha al carro de las colecciones Marvel. En el número #534Matt Fraction abandona la serie y la deja en manos de Kieron Gillen, que ya había venido colaborando en los últimos números de la colección. Y aprovecho para introducir un pequeño paréntesis, porque nunca he acabado de comprender eso de que dos guionistas firmen la misma historia; ya sé que no es la primera vez que se escribe a dos manos, pero casi me colaba más aquellos tiempos en los que leíamos: Argumento: Fulanito, diálogos: Menganito, y así. El caso es que después del #534 vino el #534.1 (lo dicho, Punto de Arranque) con Kieron Gillen en solitario; y millones de fans pudieron subirse en marcha a una colección que pocos números después (en el #544) fue reiniciada… ¡!

El volumen se inicia con la Patrulla X instalada en Utopía, una isla habitada por mutantes situada frente a las costas de San Francisco. En dicho Punto de Arranque, una experta en relaciones públicas intenta que los muties dejen de caerle mal a la gente, o al menos no tan mal como Magneto, que es el que peor lo lleva. Distribuidas las cartas, Gillen continúa con el arco argumental más destacable del tomo. Punto de Ruptura comprende los números #535-538 de Uncanny X-Men y desarrolla una suerte de continuación de la historia planteada por Joss Whedon en Astonishing X-Men y que trasladaba a los mutantes al belicoso mundo extraterrestre de Breakworld. Los acontecimientos que tuvieron lugar en tan redonda saga son retomados aquí de forma hábil y bastante coherente con la historia original. Es cierto que todo se resuelve de forma rutinaria (incluso sosa) pero lo que se plantea es suficientemente interesante.

miedo encarnado

A continuación, el número #539 está dedicado a la incómoda relación entre Hope y Lobezno. Un número que no es intrascendente y que funciona de cebo para lo que está por venir (adelanta de alguna manera el Vengadores Vs. X-Men) pero que visto con la perspectiva del tiempo carece de todo tipo de interés. Los siguientes cuatro números (#540-543) son los correspondientes al mencionado evento Miedo Encarnado, con Juggernaut haciendo de las suyas más imparable que nunca. Lo que se cuenta carece de importancia para el evento en sí, pero Gillen se las arregla para escribir cuatro números llenos de acción donde la situación actual de los mutantes y la relación de Utopía con la ciudad de San Francisco quedan muy bien apuntalados. De lo mejor que nos trajo Miedo Encarnado, pasando un poco de Miedo Encarnado. El tomo (y el volumen 1 de una de nuestras colecciones favoritas de todos los tiempos) termina con el número autoconclusivo titulado Imposible (#544). Olvidable, y protagonizado por uno de los villanos a los que menos aprecio tengo de todo el universo mutativo.

Respecto al apartado gráfico destacan Terry Dodson en el primer arco y Greg Land en el segundo. Carlos Pacheco aparece acreditado en la portada pero únicamente se encarga discretamente del primer número. Por su parte, Dodson sabe dibujar chicas, y sobre todo portadas donde salen chicas, para todo lo demás no pasa de los bustos parlantes en escenarios sin fondos. A mí no me gusta mucho. En cambio a Greg Land le tengo más aprecio que la media, más de lo que tienen algunos de mis compañeros en esta casa, estilo fotorrealista incluido.

x-men final issue

En definitiva, un tomo para completistas y para amantes de los mutantes. Hay que reconocer que Kieron Guillen mantiene el tipo sustituyendo a Fraction en solitario. El guionista sale vivo del atolladero, pero lo cierto es que todas las apuestas iban en su contra: el volumen contiene una continuación menor de una saga realmente destacable y un cruce con un evento muy olvidable. Así es muy difícil.