Bajo el título El Arco del cazador nos llega esta trigésimo tercera entrega del coleccionable de Novelas Gráficas DC que publica en colaboración Salvat con ECC. Sin embargo, exceptuando un vieja historia de Jack Kirby con el origen Green Arrow, todo el resto del contenido del tomo se dedica a la saga que conocemos como El cazador acecha y que podríamos leer por primera vez de la mano de Mike Grell en 1987.
Colección Novelas Gráficas DC Comics #33: Green Arrow: El arco del cazador
Guión de Mike Grell y Ed Herron
Dibujo de Mike Grell y Jack Kirby
Cartoné. 160 págs. Color.
12,99€
Salvat / ECC Ediciones. 2017
Green Arrow: The Longbow Hunters Nº 1-3 USA , Adventure Comics Nº 256 USA
Un asesino en serie que mata mujeres, otro que parece dedicarse a hombres de edad avanzada y una trama de narcotráfico se cruzarán en el camino de un renovado Oliver Queen, que se ha mudado a Seattle con su novia Dinah Lance. No sólo puede que haya relación entre todos estos hechos, sino que además puede sólo estemos ante la proverbial punta del iceberg.
Un año antes habían sido publicadas Watchmen y The Dark Knight Returns y, además, el Daredevil, también de Frank Miller estaba marcando tendencia. El cómic de superhéroes se oscurecía y se hacía más adulto. No todas las obras podían llegar al nivel de sofisticación y juego con el medio de las anteriormente nombradas, pero los aficionados comenzaban a desarrollar un gusto por las historias más urbanas y sombrías, por las narraciones en off imitando las novelas noir, la acción realista y con mayor dosis de violencia y la presencia de temas como las drogas, el sida… hasta se podía ver alguna que otra escena un poco (poco) subida de tono. También comenzaban a tocarse otros formatos como el prestigio o las novelas gráficas que posibilitaban un papel de mayor calidad y nuevos tratamientos del color.
Con todo esto llega Mike Grell con una historia de Green Arrow con temas adultos, un nuevo enfoque del personaje y un tratamiento del dibujo y el color mucho más trabajado que lo que veíamos habitualmente. ¿Por qué entonces no se encumbra El cazador acecha entre los grandes de la llamada novela gráfica junto con Watchmen o Dark Knight Returns? Pese a todas sus novedades y su esmero, jugamos en un género como el de los superhéroes tradicionalmente orientado para niños y que quiere hacerse adulto de la noche a la mañana. Así, encontramos un trabajo de gráfico y narrativo muy potente y algunos temas muy por encima del interés de la mayoría de los tebeos de la época. Incluso hoy en día El arco del cazador se lee con agrado y fluidez, con lo que algo haría bien Grell. Sin embargo, la historia está repleta de personajes maniqueos y pandilleros de manual. Los asuntos políticos se tratan de soslayo y con brocha gorda y los asuntos de cultura oriental beben más de la pelis de la Cannon que de una documentación seria (no olvidemos que en esta época los ninjas estaban más de moda que nunca).
Que no se me malinterprete, El arco del cazador es un gran tebeo y pese a sus ochenteos, es una adelantada a su época que puede disfrutar un lector actual sin apenas contextualizar, con un planteamiento de página y una narrativa bastante cercanos a los que tenemos hoy día. Además, aún podríamos considerar a Mike Grell un pionero en la tendencia de los héroes urbanos sombríos, antes de que la moda se extendiera del todo y se pervirtiera hasta extremos noventeros y los planteamientos desarrollados en esta historia se convirtieran en tics mal usados.
Cierra el tomo una historia corta del año 59 que toca el origen del personaje sin mucho mayor interés que el hecho de que la dibuje en gigantesco Jack Kirby. En esta ocasión sí requiere que el lector contextualice y se ponga en situación de la época original en que fue publicada, lo que si acaso trabaja por sumar mérito a que la historia principal de 1987, recomendable tanto para nostálgicos como para aquellos que se quieran acercar al verdadero Green Arrow.
