Son Goku, El Héroe de la Ruta de la Seda 3 (de 6)
Kazuo Koike, Goseki Kojima
Contiene Son Goku vol. 3 JAP
13,95 €
Septiembre de 2016
Rústica, 392 págs. Blanco y negro.
ISBN: 978-84-16840-49-6

Con la diosa Kannon convertida en humana y haciéndose pasar por el sacerdote Sanzô, la comitiva de Son Goku sigue su viaje hacia el oeste para obtener los sutras. Pero ahora Kannon tiene necesidades humanas y, por lo tanto, deberán hacer altos en el camino para poder descansar y comer. El problema es que los demonios acechan por todas partes… y algunos son capaces de llevarles hasta el mismísimo infierno, donde se encontrarán con el rey Enma, rey y juez de los muertos.

Tal vez se trate ésta de una de las series más indescriptibles del dúo artístico Koike & Kojima. Si bien el primer volumen era bastante explícito en lo referente a sexo y violencia, el segundo hacía más énfasis en las enseñanzas budistas. Ahora, este tercer volumen sigue poniendo el acento en el tema sexual, aunque dejando sitio para la filosofía, el humor y la acción.

La diosa Kannon, que se ha convertido en humana para poder acompañar al grupo formado por los demonios Son Goku, Hakkai, Gojô y Ryûkaku hasta la India, al renunciar a su divinidad tiene ahora necesidades humanas. Y no hablamos sólo de comer, beber y dormir, sino también de mantener relaciones sexuales. Y eso es algo a lo que a los demonios les está costando muchísimo resistirse. Por si esta tensión sexual no fuera suficiente, la comitiva se encuentra con un hindú llamado Rokko, que les atrapa en el infierno budista mientras duermen. La diosa hecha carne y los demonios habrán de hacer uso de toda su inteligencia, habilidad y fuerza para escapar de ese infierno.

Como ya dijimos antes, éste no es el Son Goku que ha popularizado Akira Toriyama en Occidente, aunque éste haya tomado muchos de los elementos de la novela Viaje al Oeste en que se basa esta obra. Sin embargo, el Son Goku de Koike & Kojima puede que sea mucho más fiel a la obra original que cualquier otra adaptación que vea la luz en nuestro país. Y no deja de ser curioso que una novela clásica contenga tan altas dosis de erotismo. Afortunadamente, el sexo y la violencia se entremezclan con interludios cómicos que hacen más agradable la lectura.

Son Goku sigue siendo el personaje más racional de todos, en contrapunto con el arquetipo del mono del que toma forma. No sólo es el luchador más hábil de todos, sino que parece ser el único capaz de resistir los encantos de la diosa Kannon a base de pura fuerza de voluntad. Su devoción y amor incondicional por la diosa le convierten en el demonio más apto para protegerla y acompañarla, y su sacrificio final conlleva un acto de piedad filial que alterará toda la creación.

Esta emotiva escena nos traslada a la segunda parte de este tomo, dedicada por entero a contar el origen de Son Goku, desde su nacimiento en forma de mono de piedra, su coronación como rey de los monos y su búsqueda de un nombre y de sabiduría, que le llevará hasta el sabio Subodhi. Esta parte contiene mucho menos sexo y violencia que las anteriores historias, y en contraposición parece más un cuento para niños, con las aventuras y travesuras de un pequeño mono tallado en la roca. Esta historia de Son Goku habrá de continuar en el tomo siguiente, y es de agradecer este descanso, ya que empezaba a cansar tanta tensión sexual y tanto demonio en permanente estado de excitación.

El dibujo de Goseki Kojima parece más relajado, menos abigarrado que en anteriores entregas, recordándonos más al artista que conocíamos de Lobo Solitario, Asa, Kasajirô, etc. Su trazo es más limpio, con menos manchas de tinta y una mayor definición de líneas y personajes. Si esta obra hubiera gozado de mayor difusión en Occidente, sus representaciones de los personajes protagonistas bien podrían haberse convertido en las más recordadas por los lectores. En su lugar, al pensar en Son Goku la primera imagen que nos viene a la cabeza es el niño creado por Toriyama.

Pese a unos arranques complicados, esta serie (publicada por ECC Ediciones) se está ganando un hueco en mi corazón, y hace que desee la aparición de cada número bimestral con muchas ganas. ¿Quedarán aún muchas obras inéditas de este dúo de autores?