Es la hora de las tortas!!!

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Reseña Dinosaurio Diabólico de Jack Kirby. 100% Marvel HC

Tras su periplo deceíta, Jack Kirby volvió a Marvel para retomar algunas de sus viejas creaciones y dar a luz algunas nuevas como Los Eternos, el Hombre máquina o El Dinosaurio Diabólico.

Dinosaurio Diabólico portada

Dinosaurio Diabolico. 100% Marvel HC

Guión y dibujo de Jack Kirby
Cartoné. 192 páginas. Color.
16,50€
Panini Comics. 2017
Devil Dinosaur 1-9 USA

Al igual que con los Eternos, Kirby jugaba con sus juguetes y sus normas sin ningún tipo de traba editorial o de continuidad, así que Kirby se podía sacar de la manga una prehistoria donde homínidos y dinosaurios conviven en un entorno hostil, donde reina la ley del más fuerte, un mundo donde el pequeño Chico Luna y su mejor amigo el Dinosaurio Diabólico son marginados por el resto de los suyos, un mundo donde todo es posible.

Dinosaurio Diabólico

Veamos, el Chico Luna es un adolescente de una especie homínida salida de la cabeza del Rey que entabla una estrecha relación de amistad con un tiranosaurio rojo (atentos al motivo del color porque es impagable), probablemente adolescente también y, por lo que vemos, vegetariano. Con esta premisa ya nos podemos imaginar que cualquier delirio puede pasar por las páginas de este tomo: dinosaurios de todos los colores, mujeres mono con peinado de peluquería, profecías del fin del mundo, metáforas religiosas, viajes en el tiempo y por supuesto, extraterrestres.

El Kirby de los setenta estaba más desatado que nunca, todo era a lo grande. Los personajes declaman como si estuvieran en un escenario con retórica exagerada, casi cada número comienza con una splash page que es seguida por una doble splash page y si en los setenta hubiese sido posible, lo siguiente habría sido una triple splash page. Es un tebeo pensado para saltarte a la cara, el único límite es la imaginación del Rey, con la que pocas en la industria han tenido rival.

Dinosaurio Diabólico

Kirby ilimitado sería el mejor resumen que se podría hacer de Dinosaurio Diabólico y no sólo en cuanto al guión. Kirby no quiere un tiranosaurio anatómicamente fiel, quiere un gran monstruo de esos que tanto le gustaron siempre que cuando sacuda una patada tiemble tu habitación y se saltará cualquier academicismo para lograrlo. El Kirby de esta época arrastraba a sus espaldas 40 años de carrera y había demostrado todo lo demostrable. No obstante, conviene avisar al lector más conservador que puede que este no sea su tebeo. Olvidaos de tramas, cánones o incluso de coherencias, estamos ante un tebeo protagonizado por un dinosaurio y su amigo y jinete homínido. ¿Creéis que un tebeo con esta premisa puede ser algo convencional?

Con esta premisa, recomendaría leer este tebeo sin pretensiones ni ideas preconcebidas, sólo como un divertimento y sin el más mínimo filtro analítico. Sólo dejad a Kirby desatado.