Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Reseña: Deepwater prison, de Bec & Raffaele

Reseña: Deepwater prison, de Bec & Raffaele
Guion
Christophe Bec
Dibujo
Stefano Raffaele
Formato
Cartoné. 160 páginas. Color
Precio
35.00€
Editorial
Yermo Ediciones. 2017

El fondo de los océanos desprende una magia muy similar al espacio exterior. Escenarios de una belleza incontestable en los que la existencia se siente como una mera anécdota. Y allí donde el ser humano se siente pequeñito y desamparado, tenemos contextos que son un filón para las buenas historias de terror y ciencia ficción. No es la primera vez que el escritor y dibujante de Rodez, Christophe Bec, explora el fondo marino en busca del terror, ya lo hizo con Carthago; aunque en esta ocasión dan algo más de miedo las personas que las bestias marinas… como suele ser costumbre.

Desde mediados de julio ya se encuentra disponible en nuestras «lonjas comiqueras» habituales la última creación de Christophe Bec, Deepwater prison. Quizás el nombre del autor os suene más por la que seguramente sea su obra más aclamada, Prometeo. En esta ocasión viene acompañado por los pinceles del italiano Stefano Raffaele, quien ya ha hecho sus pinitos tanto en Marvel — X-Factor — como en DC — Aves de presa —, además de hacer tándem precisamente con Bec en otras obras como The Shadows of Salamanca, una historia de terror de 2014 e inédita en España, o la ya nombrada Prometeo. Yermo Ediciones recoge los tres libros de los que se compone Deepwater prison en un único tomo en cartoné.

Deepwater prison 4

la prisión… y sus «guardianas»

Viendo la portada del tebeo se podría pensar que estamos ante un relato tipo The Abyss — ¡ey, aquí también tenemos una estación petrolífera! — o un Tiburón con elementos de ciencia ficción, pero no es así. Deepwater prison, ubicado en un futuro cercano, nos plantea una situación en la que una grave catástrofe ecológica acaecida en una estación petrolífera sirve de excusa para que las personas involucradas en el asunto, tanto investigadores como investigados, se vean en la tesitura de utilizar la enorme prisión submarina que da nombre al cómic como enclave de apoyo desde el cuál trabajar haciendo una revisión exhaustiva de daños y recuperando los cuerpos de los fallecidos en el desastre. Y si la premisa aún no os parece lo suficientemente interesante, gran parte de los principales protagonistas del tebeo son reos intentando sobrevivir al día a día en ese infierno marino al margen de todo, de donde es ¿imposible? escapar.

¿Y los «bichos»? Bueno, el caso es que también pululan por las cercanías de la Deepwater prison una especie de morenas gigantes llamadas serpentoides que ríete tú del megalodón. Pero ya os advierto que estas criaturas son lo de menos, así que no os llevéis a engaño.

Christophe Bec construye una obra coral en la que un pequeño grupo de presos concentra un mayor protagonismo. Esto hace que ese halo de ficción y misterio con que empieza el tebeo, presentándote el desastre y a las serpentoides, vaya perdiendo fuerza poco a poco para pasar a ser una historia más cercana al subgénero carcelario. De hecho, es precisamente uno de los presos, John Stewart, el personaje que se acerca al lector con mayor facilidad, y uno de los pocos de los que «encariñarse».

La recreación de la vida en la prisión es bastante cruda con alguna escena bastante explícita y grotesca que personalmente veo como un acierto, ya que encaja bastante bien con el tono oscuro y sobrio de todo el tebeo.

El autor se toma con bastante calma la construcción de la historia, y después de un comienzo bastante potente tiene un pequeño bajón, para volver a coger fuerza de nuevo hasta un final que explota en pocas páginas.

Deepwater prison 2

Sin duda son los grandes planos generales donde Raffaele te sumerge en el agua

Pienso que el punto más fuerte del tebeo es la ambientación creada por Raffaele a base de grandes planos generales en los que claramente destaca. La inmensidad de las aguas, y la sensación de distanciamiento de los parias encarcelados en Deepwater prison están muy pero que muy logrados. No así tanto los primeros planos y planos medios. Puede que sea algo personal, pero tiene un punto de estatismo, por así decirlo, que me hace difícil conectar con la mayoría de protagonistas. Además, pienso que en el diseño de personajes faltan elementos más «llamativos» que les haga claramente distinguibles. Al ser la mayoría de ellos caucásicos de pelo corto moreno, además de que los guardias de prisión llevan atuendos que no se diferencian demasiado del de los presos, hace que en alguna viñeta no supiese realmente quién estaba hablando. Hombre, luego por el contexto se intuye bastante bien, pero le falta un punto en ese sentido.

Por cierto, hay un par de personajes que me recuerdan mucho a actores famosos. Kevin Bacon y Nicholas Cage para ser más exactos. O puede que sea cosa mía…

Deepwater prison cuenta a su favor con la baza de trasladar un mensaje muy acertado respecto a la conservación de los ecosistemas y las responsabilidades de las grandes corporaciones en lo que a materia medioambiental se refiere. Todo aquel que lea el tebeo tardará pocas páginas en acordarse de cierto suceso en el que parte de nuestra costa se vistió de luto.

No sé si sería justo compararla con Prometeo, obra bastante más ambiciosa, pero como es lo que tenemos más reciente del guionista, es inevitable. Lo que es seguro es que Deepwater prison es disfrutable a modo de «blockbuster comiquero» veraniego.

Ale, me voy a la pescadería a ver si les queda serpentoide fresca para hacerme un caldo.

Deepwater prison 3