El personaje de La Cazadora (Huntress) es de esos personajes que llevan décadas dando tumbos y sufriendo cambios radicales desde su creación. Comienza como una villana, durante la Golden Age, con la identidad secreta Paula Brooks, cuya primera aparición fue Sensation Comics #68 en 1947, pero realmente su versión más popular es la creada por Paul Levitz junto a Joe Staton y Bob Layton para el All Star Comics #69 en 1977. Dicho personaje pertenecía a Tierra 2 y era la hija de Bruce Wayne y Selina Kyle, llevando el nombre de Helena Wayne Kyle. Esta versión de La Cazadora murió durante las Crisis en Tierras Infinitas, pero su popularidad era tal para aquel entonces, que fue retomada como un nuevo personaje de Tierra 1, de nombre Helena Rosa Bertinelli, con un pasado vinculado a las familias mafiosas de Gotham. Esa versión es la que perduraría desde entonces, encuadrándola dentro de ese grupo de personajes supuestamente defensores del bien, pero con métodos algo dudosos, como fueran Vigilante en DC o El Castigador en Marvel. En el año 2000, los autores Greg Rucka y Rick Burchett, realizan la miniserie El Reclamo de la Sangre, donde se establece la versión canónica del pasado y origen del personaje. Ahora ECC Ediciones recupera esa miniserie dentro de su línea Grandes Autores de Batman.
Una serie de capos mafiosos y personas relacionadas con la mafia comienzan a aparecer asesinadas en Gotham City. Por las flechas con las que son asesinados, la principal sospechosa es La Cazadora, pero ella no tiene nada que ver. La policía de Gotham y el propio Batman comienzan a reducir el cerco alrededor de la heroína, pero ella tampoco piensa quedarse de brazos cruzados, y comenzará a investigar quién intenta inculparla con la ayuda de Vic Sage, The Question. La colaboración entre ambos servirá para que Helena Rosa Bertinelli haga un repaso a su infancia y a la historia de su familia.
Rucka escribe la historia de manera inteligente, planteando el caso de la incriminación y la necesidad de buscar al verdadero responsable con esas escenas de viajes que dan pie a contar la historia de su infancia. Y no solo eso, sino que además, plantea la situación entre las familias mafiosas de Gotham y sus relevos generacionales, siendo una miniserie en la que Rucka plantea tres puntos de interés, en el que ninguno queda descuidado: el misterio del asesinato que pretende culpar a Helena, su infancia con el cómo se conocieron sus padres y quién la enseñó a luchar, y la trama de las distintas familias mafiosas y su luchas internas de poder, a lo largo de las décadas. Las diferentes historias van intercalándose, y resulta difícil clasificarlas por orden de interés. Acierto del guionista.
También destaca el buen uso del personaje de The Question, al que Rucka siempre ha demostrado tener en estima. Recordemos que la trama de 52 de René Montoya y The Question es la que escribió Rucka, así como la posterior Biblia del Crimen, en la que el personaje estaba involucrado.
En cuanto al dibujo, recae en Rick Burchett (Las Aventuras del Hombre de Acero, Las aventuras de Harley Quinn) con un estilo muy clásico que le sienta bastante bien a la historia. De hecho, para mí, las escenas que mejor funcionan son las de los flashbacks de Helena y de la mafia, con ese toque a historia tipo Camino a la Perdición, para el que el dibujo de Burchett es bastante acertado. La acción está muy bien planteada, de manera contenida porque la historia lo exige. Me gusta también bastante el uso de las masas de negro y las sombras, especialmente en lo que respecta a las escenas compartidas con Batman, al que raramente llega a vérsele el rostro y casi siempre es una mancha negra en la sombra.
En definitiva, Batman/La Cazadora: El Reclamo de la Sangre.
Miniserie bastante entretenida en la que, sin necesidad de innovar ni dar una vuelta radical al personaje, se establece el origen que posteriormente resultaría canónico para La Cazadora. Una miniserie con varios focos narrativos, muy bien intercalados entre sí por un hábil Greg Rucka y un dibujo con una tendencia al clasicismo que sienta bastante bien a esta historia de mafiosos y superhéroes urbanos. Realmente, los superhéroes quedan muy en segundo plano, y resulta más una historia de luchas por el poder en la mafia de Gotham y de la figura de la familia para las mafias sicilianas, con la importancia de guardar secretos cuando pueden alterar el orden natural de poder dentro de la propia estructura criminal. En seis números, Rucka y Burchett nos plantean esta historia que sigue funcionando igual de bien con el paso de los años (recordemos que tiene casi veinte años) y que ha quedado para el recuerdo como una de las mejores historias del personaje de La Cazadora, cuyo auge de popularidad se produciría posteriormente en series de grupo como Aves de Presa o Las Mejores del Mundo. Supongo que fueron reclamos de marketing, pero nunca he entendido la necesidad de incluir en el título a Batman. Debería haberse llamado La Cazadora: El Reclamo de la Sangre. A secas.
Lo mejor: Lo bien que entrelaza Rucka las tres tramas. El dibujo clásico de Burchett.
Lo peor: Probablemente no entre en muchos top de historias favoritas, pero me parece imprescindible para seguidores del personaje.
Para seguidores de La Cazadora. Para los que gustan de historias de la mafia. Para ver lo buen guionista que es Rucka, especialmente con personajes urbanos.
