Hace tiempo que los grandes guionistas de finales de los 80 y principios de los 90, los que hicieron grande el sello Vertigo de DC, son poco más que un bello recuerdo. Alan Moore se ha jubilado, Neil Gaiman ha abandonado el cómic por medios más reputados y rentables, Grant Morrison sigue publicando pero sin rastro de la chispa que tuvo hasta principios de la década pasada, Jamie Delano hace nueve años que no publica ningún cómic… Pero aunque los autores que revolucionaron el medio hayan dado un paso atrás por el motivo que sea, van apareciendo creadores nuevos que consiguen dejarnos con la boca abierta. Y uno de los más destacados es Kieron Gillen. El autor que entró en el mercado americano por la puerta grande con Phonogram, nos ha dejado grandes obras como The Wicked + The Divine, Jóvenes Vengadores o su etapa en Journey Into Mystery protagonizada por Loki. Ahora, Planeta Cómic acaba de editar el primer volumen de Once and Future, sin duda uno de los títulos que se mencionarán dentro de unos años cuando se quieran enumerar los hitos de la carrera de este escritor inglés.
Periódicamente se tiende a comparar artistas nuevos con grandes iconos pasados de sus respectivos géneros. Se dijo que James Cameron era el nuevo Spielberg, se dice que Greta Van Fleet son los nuevos Led Zeppelin… y se podría decir en esa línea que Kieron Gillen es el nuevo Neil Gaiman. Se podría si no fuera porque es un tanto irrespetuoso considerar la creatividad de un autor como una versión moderna de algo previo. Pero sí es cierto que Gaiman y Gillen son posiblemente los dos autores que primero vienen a la cabeza cuando piensas en cómics (y ya en novelas, en el caso del primero) sobre mitología en el mundo moderno y sobre el poder de las historias. Y si en WicDiv trataba exactamente de eso, en Once and Future vuelve al terreno que tan buenos resultados le ha dado, pero en esta ocasión centrado en los mitos artúricos.
El título Once and Future hace referencia a la supuesta inscripción de la lápida del Rey Arturo según el libro La Muerte de Arturo, de Sir Thomas Mallory, publicado en 1485: Hic iacet Arthurus, rex quondam, rexque futurus. Aquí yace Arturo, rey una vez, rey que será. Según esta profecía, Arturo, muerto en combate con su hijo Mordred, volverá en la hora más oscura de Inglaterra. Pero claro, según la leyenda, Arturo fue un caudillo Britano, que defendió las islas británicas de las invasiones Anglo-Sajonas. El problema es que muchos de los actuales pobladores de Gran Bretaña son precisamente descendientes de aquellos invasores y, claro, el Arturo resucitado no los ve con buenos ojos.
Con estas ideas en mente, tenemos una historia en la que Duncan, un aburrido historiador que cumple el papel de damisela en apuros, es arrastrado por su adorable y badass abuelita Bridgette a una historia tan poderosa -sí, de nuevo los paralelismos con la obra de Gaiman- que acaba apoderándose de las vidas de las personas corrientes. En cierto modo, algo similar a lo que ya hicieron hace años Mike W. Barr y Brian Bolland en Camelot 3000, pero con un tono totalmente diferente. Aquí, en lugar de una space opera, tenemos una ambientación actual, realista -hasta que empiezan a aparecer los mitos reencarnados- con reflexiones con bastante mala leche sobre la actualidad sociopolítica del mundo en el que vivimos. El Rey Arturo es despertado por unos tipos que, haciendo gala de su orgullo nacionalista, desencadenan el caos sin saber cuáles iban a ser las consecuencias de sus actos. No dice Brexit en ningún lado, pero tampoco hace falta. Pero no sólo en este patinazo político-económic podemos pensar: los descendientes de los anglosajones germánicos que invadieron las Islas Británicas acabaron cruzando el atlántico, casi exterminando a los aborígenes de Norteamérica y reclamando hoy en día América para los Americanos. Qué tendrán los pueblos germánicos con el racismo, la invasión y el genocidio.
Así, lo que nos da Kieron Gillen es una historia de fantasía épica con un ritmo espectacular y con todos los niveles en los que el lector quiera implicarse. ¿Que quieres una historia de un Indiana Jones pusilánime arrastrado a una lucha contra un Rey zombi de la antigüedad, funciona de lujo. Si quieres profundizar un poquito más y llegar a una historia sobre cómo los mitos en los que se fundamentan las sociedades modernas nos afectan, también lo es. Y, por supuesto, está la metáfora sociopolítica. Todo ello, además, aderezado con los dibujos de un Dan Mora que ya nos llamó la atención en Klaus, pero que aquí se da un par de vueltas a sí mismo y hace un trabajo espectacular, funcionando a la perfección tanto en las escenas calmadas como en las de acción, en las realistas como en las fantásticas, donde los vivos colores de Tamra Bonvillain realzan el ambiente. Muy atentos a este tipo, que está llamado a ser muy grande.
Que Once and Future era una serie que iba a merecer la pena era algo que teníamos muy claro desde el momento en el que oímos hablar de ella por primera vez. Kieron Gillen, mitos artúricos, libertad creativa de la que se dan en las independientes, Excalibur… a este cómic sólo le falta que suene el O Fortuna de Carl Orff cuando abres la portada para ser perfecto. Apuntamos una cruz en el mes de septiembre en el calendario, que es cuando saldrá el segundo tomo. De momento, una de las mejores obras que han salido a la venta en 2021.