Corría diciembre de 1989 y los noventa habían llegado, sólo que aún no se habían dado cuenta. Un veinteañero californiano que venía de hacer una miniserie en DC y apenas un par de annuals en Marvel, entraba como un elefante en una cacharrería en New Mutants 86 dispuesto a ponerlo todo patas arriba bajo el estandarte de lo molón… y vaya si lo hizo.
Rob Liefeld ha sido objeto de memes y mofas, pero con el tiempo asentando las aguas, es imposible negar la relevancia de su figura en la historia de los cómics. Este mes el monográfico se lo dedicamos a la obra en la que lo cambió todo ignorando todas las reglas, con mucha más energía y empuje que conocimiento artístico e incluso sentido común, arrasó con todo y creó toda una tendencia que aún hoy en día es influyente.
Repasamos este breve periodo entre diciembre de 1989 y mayo de 1992 Rob Liefeld convertiría a los niños de la escudería mutante en soldados salidos de Aliens o Depredador, volando la cabeza a la chavalada de la época… algunos de ellos cuarentones que hacen podcasts hoy en día.