Llevo un tiempo oyendo que la burbuja del manga está a punto de estallar en España. Pese a esto, los lanzamientos de este tipo de cómics llegan casi a las dos centenas cada mes. No solo eso, sino que hay pequeñas editoriales que deciden empezar su aventura (como es el caso de la gente de Lucifer Ediciones) u otras que apuestan por nuevos géneros en su catálogo. De esta última guisa tenemos entre manos el primer volumen de “Nuestra singular familia”, un BL realizado enteramente por Mita Homuro y publicado por Kimmo Editorial.

“Nuestra singular familia” (o “Ibitsu na Bokura no Katachi”) vio la luz originalmente de forma serializada en la revista Chara, de la editorial Tokuma Shoten, en el año 2020. Posteriormente fue publicada en dos volúmenes cuyas cubiertas forman una imagen conjunta. Destacar que aunque la autora tiene ya un buen número de mangas publicados en Japón, esta es la primera obra que se publica de ella en nuestro país.

“Nuestra singular familia”. Una nueva oportunidad a la vuelta de la esquina

Homuro nos presenta en estas páginas a Yuma, un joven de mediana edad cuyo novio le deja de la noche a la mañana tras siete años de relación. En pocas páginas, la autora retrata a la perfección a un protagonista roto, desubicado, angustiado que trata de llenar el vacío que le ha dejado su pareja con alcohol y relaciones sexuales con desconocidos. Pese a esto, lejos de regodearse en su miseria, Yuma trata de seguir con su vida retomando su labor de profesor de piano.

Así conocerá a Maika, una alegre niña cuyo padre (Ibuki) es a su vez el terapeuta ocupacional de la madre de Yuma. De hecho, la forma en la que se conocen Yuma e Ibuki es un enredo típico de las comedias románticas en las que, partiendo de un malentendido, se acaba forjando una bonita amistad. Mira que le gustan este tipo de cabriolas rebuscadas a los mangakas. Bueno y a nosotros nos gusta leerlos, así que ningún problema por esa parte.

Mita Homuro teje en las páginas de “Nuestra singular familia” una historia tierna, sencilla, que rezuma costumbrismo por los cuatro costados. En este primer volumen consigue que nos interesemos por los cuatro personajes creados, busca nuestra empatía con Yuma y desde luego que la consigue al hacernos desear que el posible romance entre un profe de piano y un fisioterapeuta salga bien.

Portada original de la revista Chara

Y digo desear, porque tras haberme leído de una sentada este volumen no tengo ni idea de que va a pasar, porque no olvidemos que Ibuki tiene una hija y Yuma da por hecho que es heterosexual. Ahora mismo todas las cartas están sobre la mesa y cualquier cosa puede pasar. Pero vaya, sea cual sea el desenlace, lo que no hay duda es de que Homura sabe dar en las teclas oportunas para crearnos la necesidad de leer la continuación de la historia.

«LO ÚNICO QUE PUEDO OFRECERTE ES… SONREÍR PARA AHUYENTAR TUS PENAS POR UN MOMENTO.»

Me parece necesario destacar que “Nuestra singular familia” es un manga accesible para todos los públicos. Solo hay un par de escenas de sexo algo más subidas de tono pero para nada explícitas, por lo que cualquier lector o lectora de los mangas románticos y que gusten de las buenas historias que ensalzan valores como la familia (sin que haya lazos de sangre necesariamente), el amor o la amistad por encima de todo, seguramente saldrán satisfechos.

A nivel gráfico, el arte de Mita Homuro puede pecar de ser un poco simplista con fondos poco trabajados y una anatomía algo rígidan, pero cumple de sobra con lo que requiere la historia.

Por su parte, Kimmo ofrece la obra en dos volúmenes en formato Tankoubon con sobrecubiertas con acabado metálico a un pvp de 8,95 €. Todo bien.

Como siempre, muchas gracias a Listado Manga por facilitar todos los datos de la edición.