Han pasado ya más de diez años desde aquel lejano número de Los Nuevos 52 de Green Arrow en el que coincidieron por primera vez Jeff Lemire y un joven ilustrador italiano llamado Andrea Sorrentino. Desde entonces, se han convertido en uno de los equipos creativos más estables del panorama del cómic americano actual, y prácticamente cualquier obra firmada por estos dos autores es una lectura obligatoria. Así que cuando anunciaron Mitos del huerto de los huesos, su nueva serie (ya hablaremos más adelante de esto) nos la apuntamos en la lista inmediatamente. Pero además sabiendo que es una serie de terror que estos autores han hecho para para Image Comics, el precedente de Gideon Falls nos viene inmediatamente a la cabeza, y siendo ésta una de las mejores series que hemos leído en los últimos años, las expectativas sobre Mitos están muy altas. Vamos con la primera entrega de la la edición de Astiberri, El pasadizo.
Mitos del huerto de los huesos es una curiosa iniciativa de Lemire y Sorrentino, planteada como una serie de historias independientes ambientadas en un mismo universo, con una mitología compartida al estilo de los Mitos de Cthulhu de H.P. Lovecraft et al, con la que tiene ciertas similitudes ambientales. A diferencia del planteamiento de Gideon Falls, que fue una serie regular en formato comic book, Mitos del huerto de los huesos adaptará el formato a las necesidades que tenga cada una de las historias, y así todo empezó con un preludio en grapa, publicado como parte del Free Comic Book Day de 2022 (Astiberri no ha publicado este cómic aún, pero si lo queréis leer en inglés, Jeff Lemire lo ha colgado en su substack), a partir del cual seguirán one shots, series limitadas de extensión variable o novelas gráficas, según las necesidades particulares de cada historia, no necesitando limitarse a un formato predefinido. El pasadizo es la primera que ha aparecido (tras Prelude), un tomo de casi cien páginas, al que seguirán Ten thousand black feathers -serie limitada de cinco números, ya terminada-, Tenement -serie limitada de diez números de próxima aparición- y Starseed -formato aún no definido-.
En El pasadizo acompañamos a John Reed, de la Sociedad Geológica Canadiense, a una aislada isla en mitad de la nada -ya tenemos definido desde el principio el entorno en el que mejor se desenvuelve Lemire- presidida por un omnipresente faro. Reed visita la isla para investigar un extraño suceso: han desaparecido dos rocas y debajo de donde estaban ha aparecido un profundo pozo del que no se ve el fondo. Tan profundo que, dejando caer una piedra dentro, no se oye cuando llega al fondo… si es que tiene fondo. Nos queda claro que hay algo muy oscuro al fondo, pero… ¿qué?
En El pasadizo nos encontramos las habituales características de Lemire y Sorrentino. La alienación y el ambiente opresivo que suele flotar por encima de sus obras la tenemos claramente presente, amplificada por la presencia del faro, un elemento habitual en historias agobiantes como la película El faro o el videojuego Life is strange. La extrañeza de lo que ocurre, el aislamiento del mundo exterior, y unos personajes residentes en la isla que no dan precisamente tranquilidad ayudan a que la lectura de esta obra sea notablemente desasosegante. Además, aquí podemos disfrutar -de una forma un tanto masoquista- de un Sorrentino muchísimo más inquietante de lo habitual, consiguiendo superar en algunos momentos incluso a su excepcional trabajo en Gideon Falls.
Pero además la pareja de autores juega constantemente con un simbolismo tanto visual como conceptual. El pasadizo al que hace referencia el título es el pozo que ha aparecido en la isla, pero tampoco terminamos de tener claro a dónde o hacia qué nos lleva. Si sabemos que a nada bueno: el pozo funciona como opuesto del faro. Si el faro es una larga masa sólida que penetra el cielo con una luz arriba, el pozo es un vacío que penetra la masa sólida de la isla y, por tanto, en su extremo inferior tiene… oscuridad.
La sensación que nos deja El Pasadizo es de presentación de un entorno. Es una historia corta, equivalente a cuatro cómics en grapa, con unos autores que se toman las cosas con mucha calma para contarnos sus historias. Y aunque consiga plantear un entorno interesante y nos deje con ganas de saber más del mundo que presenta, no deja de ser un primer vistazo a una puerta recién abierta. Es pronto para saber si Mitos del huerto de los huesos llegará al nivel de Gideon Falls o incluso más allá, pero de momento nos ha picado la curiosidad lo suficiente como para estar ahí cuando salga Diez mil plumas negras.
Bonus track: aquí está el video con el que Image promocionó esta serie.