Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Meadowlark

Meadowlark
Guion
Ethan Hawke.
Dibujo
Greg Ruth.
Traducción
Victor García de Isusi.
Formato
Cartoné, 256 págs, color.
Precio
25€.
Editorial
Planeta Cómic. 2024.
Edición original
Meadowlark (Grand Central Publishing).

Probablemente lo que más llame la atención cuando uno se acerca a este Meadowlark que ha editado Planeta Cómic es el nombre del guionista, Ethan Hawke, actor conocido por la trilogía «Antes de», Training Day o recientemente en su faceta como guionista y director en series como El pájaro carpintero o películas como Wildcat. Pero tal vez sorprenda más saber que no es la primera obra de cómic de la pareja de autores responsable de esta obra, y que ya en 2016 publicaron Indeh, otra obra que en España vio la luz gracias a la editorial Oberon. Tanto Hawke como el dibujante Greg Ruth se mueven alrededor de temas puramente americanos. Si su primera obra hablaba de los indios Apache, en esta nos trasladamos a una ciudad de Texas donde un el guionista traslada su experiencia de infancia en un paisaje sureño para contar una historia de relaciones paterno-filiales con un trasfondo de noir redneck.


Jack Johnson es un exboxeador que trabaja como alguacil en una cárcel. Antes de ir a trabajar su ex mujer le llama para que vaya a recoger a su hijo adolescente para que se haga cargo de él porque le han expulsado del colegio. Comienza un largo día en el que los contratiempos llevarán a Jack y Cooper a profundizar en su relación, analizando su papel como padre y las consecuencias de sus actos. Cooper descubre a un padre al que unos ven como un héroe del boxeo y otros como un perdedor. Pero en un solo día, pueden ocurrir muchas cosas…

Sin haber leído la anterior obra de la dupla, me ha sorprendido mucho el guion de Hawke, con un tono muy cercano al de Jason Aaron en Scalped o sobre todo Paletos Cabrones, presentando personajes de esa Texas profunda, que se dejan llevar por una vida difícil, condicionada por las malas decisiones del pasado. La historia tiene múltiples capas, poniendo en primer plano una historia de acción repleta de giros de guion que nos tendrá en tensión hasta el desenlace, pero que no oculta que el verdadero mensaje se esconde en el segundo plano, en esa relación entre padre e hijo, carente de diálogo y condicionada por terceros.


El dibujo de Greg Ruth es muy realista y detallado, con un protagonista inspirado en la imagen del propio guionista, y una evidente influencia cinematográfica en cuanto a planos, rejillas de página y ritmo. De no ser por ese toque tan minucioso en el dibujo, casi se podría considerar un storyboard. Sus rejillas de pocas viñetas y sus diálogos concisos y contenidos hacen que la lectura se pueda realizar en una sola sesión, a pesar de sus más de 250 páginas.  Los bitonos grises o azulados aportan una atmósfera muy adecuada para una historia con recuerdos del pasado y en la que se sopesan continuamente las consecuencias de las decisiones pasadas. A Ruth lo hemos visto en Las crónicas de Conan o en Freaks of the Heartland junto a Steve Niles.

Destaca la sensibilidad con que se trata la figura de Cooper, un adolescente en continuo conflicto contra el mundo en general, que tiene idealizado a su padre y que descubre que es una persona de carne y hueso, aunque en el fondo esconde en su interior una fuerza y unos principios que justifican ese halo que siempre ha visto en él. La combinación de guion y arte consigue crear un personaje muy creíble y que llega con fuerza al lector.


En definitiva, Meadowlark es una buena obra de género negro ambientada en una población de la Estados Unidos rural y sureña, que refleja muy bien su sociedad. A través de una trepidante trama de acción e intriga, muestra la relación entre un padre y su hijo y el salto de este a la madurez a marchas forzadas. Reflejo realista y nada impostado de los conflictos de la adolescencia y la dificultad en el salto a la edad adulta, especialmente cuando las condiciones no son las propicias.

Lo mejor: La complejidad del guion, las subtramas y cómo suman entre todas ellas. El preciosista dibujo de Ruth.

Lo peor: Si las tramas interpersonales te importan poco te puedes quedar con que es una historia de acción sin nada en particular.