Saludos, queridos lectores. Hoy toca reseñar la nueva edición de una obra de superhéroes que me encantó en su momento, aunque tenía abandonada en el rincón de la memoria dedicado a los buenos recuerdos. Hoy hablamos de Marvels, de Busiek y Ross.

Panini nos ofrece un tomo donde se recopilan los números 1-4 de la serie original, se incluye el número y se meten todos los extras que consiguieron saqueando los archivos de Marvel :-).

Un total de 360 páginas a tamaño 26×17. La historia llega hasta la página220. A partir de ahí todo son extras. Pero volveremos a esto con más calma.

Antes de que se me olvide, dejadme comentar que la traducción corre a cargo de José María Méndez y Santiago García. Con David Hernández traduciendo los textos que completan este tomo. Y las correcciones de Bruno Orive.

El guión de Busiek nos cuenta la historia de un mundo donde los superhéroes son reales…y del que formamos parte. Veremos el`pasar del tiempo desde el nacimiento de la Antorcha Humana Original hasta que Gwen Stacy muere. Y lo veremos de dos formas diferentes: a través del propio mundo, reflejado en las viñetas; y a través de los pensamientos del protagonista.

Si sois fieles lectores de Marvel (al menos de esta etapa) veréis esta obra como un nuevo punto de vista de lo que ya conocéis. Si, como yo, los superhéroes no son lo vuestro; veréis una historia muy bien contada y que no recurre a nada externo, ni crossovers con otras colecciones ni obras anteriores. Por supuesto, en este segundo caso os perderéis (como me ha pasado a mí) muchas referencias que los autores han entremezclado con la historia.

La historia nos lleva al sentido de admiración y de maravillarse ante lo nuevo y poderoso. Pero tiene muchos matices y facetas. Veremos la aparición de héroes y villanos, es cierto, pero después de esas épicas luchas alguien ha de pagar los daños.

Namor puede ser el sueño de un fotógrafo, pero la pesadilla de un agente de seguros.

Este enfoque más humano, más de hombre de la calle, se explora principalmente en el trabajo y la familia de Phil Sheldon. Escenas y viñetas que concentran lo que en las historias originales eran grapas o sagas completas. Phil puede no ser testigo  en primera persona del drama de La Cosa, convertida en un monstruo pétreo. Pero si que escuchará los comentarios de los invitados a una exposición de su novia Alicia, notará como la gente reacciona ante él, lo verá solo en medio de la multitud.

Y veremos de otra manera lo que ya conocemos. Veremos como Peter Parker se dedica a sacar fotos de Spiderman donde quede en mal lugar para conseguir dinero, algo que no gusta a todos los fotógrafos. Veremos como Nueva York enloquece ante la boda de Susan y Reed. Veremos como esa misma ciudad enloquece e intenta cazar por las calles a niños que considera mutantes…

Y veremos cómo reacciona el mundo. Y lo veremos en esos ciudadanos anónimos que pueblan ese mundo. Como nosotros, los lectores, ellos son espectadores de historias míticas y legendarias.

Cada vez que leo estas historias, me fijo en un matiz o detalle diferente, nuevo. Estamos ante una historia que nos dejará pensando en lo que hemos leído.

Hay, por ejemplo, una escena en la que un periodista comunica la noticia de que tiene la exclusiva del menú del banquete de la boda de Susan Storm y Reed Richards. La emoción que siente ante esa exclusiva noticia nos hace pensar en que los superhéroes se están convirtiendo en las celebridades de este mundo, de esta Tierra. Quizás desplazando a los astros del cine o a las celebridades de clase social alta y antigua. Vemos también la entrevista en la que nuestro protagonista intenta venderle la idea de su libro sobre estas Maravillas (Marvels) a un editor. Y de pronto me quedo pensando en que los superhéroes son como una nueva élite, una nueva aristrocracia guerrera que, como en otras épocas de la historia, lo va a cambiar todo. Aunque el Gobierno y J. J. Jameson lo quieran evitar.

Pasemos al dibujo de Ross. Hay quién lo adora y quien lo detesta. Es imposible negar su hiperrealismo, pero tenemos opiniones que le achacan falta de movimiento y la rigidez de trabajar con fotografías como modelos. Personalmente, lo veo más como un dibujante pictórico, al estilo prerrafaelista. Sus posturas pueden parecer forzadas o estáticas, pero esos mismos elementos han estado presentes en el arte desde el mismísimo Miguel Ángel o los propios escultores helenísticos. Y poca gente los acusaría de pintar o esculpir mal.

Ross hace un trabajo precioso en esta obra. No solamente narra la historia que debe contar, sino que se detiene en la gente normal. Personajes que aparecen una única vez. Una enfermera mirando asustada desde un hospital. Un hombre en un coche recordando al Capitán América. Niñas asustadas abrazándose o preguntando a su padre si una amiga estará bien.

Y detalles y referencias. Juegos visuales para los lectores. Posiblemente me he perdido muchas de esas referencias debido a mi desconocimiento de la Marvel más clásica. Homenajes y pequeños chistes visuales que serán una auténtica delicia para el aficionado. Y que te harán leer y releer la obra.

A nivel de narrativa, la mezcla de viñetas de tamaño estandar con otras mucho más grandes, casi splash pages, creo que muestra a la perfección el espíritu de este Marvels, la mezcla del mundo superheróico y el de la gente normal.

Sé, queridos lectores, que no os he hecho un estudio de la época en la que la obra fue creada, esos años 90, punto de inflexión y crisis del cómic superheróico. Pero es que podemos, podremos, disfrutar de esta obra sin saber nada más que lo muy básico. Porque estamos ante una historia atemporal.

Hay una pregunta que os estaréis haciendo. Una obra que resume la historia del Universo Marvel, llena de referencias… ¿Es una obra adecuada para entrar en este Universo sin tener que leerme todo ese material antiguo, caro, dificil de encontrar y quizás descatalogado?

La respuesta es doble. Por un lado pienso que sí, que condensa y resume esas historias al tiempo que crea una nueva historia, muy válida y digna en sí misma. Pero también es cierto que puede ser engañosa. Ni el estilo de guión ni de dibujo son los más típicos y pueden «engañar» a un lector que empiece con esta obra.

Pero del mismo modo que puedes disfrutar de El Retorno del Señor de la Noche o de Watchmen sin ser un lector habitual, podrás disfrutar con este Marvels. Y si, sé que esas comparacions son palabras mayores :-).

Pasemos a hablar de la edición. En tapa dura, con una portada que combina una elegante sobriedad con la riqueza de personajes del Marvel, encuadernación holandesa y páginas cosidas, con marcapáginas de tela. Dura, parece muy resistente y duradera. El libro se abre 180 grados sin ningún problema (y algunos más, aunque no he querido forzar demasiado el lomo). Con tipografía clara y legible. Guardas decoradas. Quizás el extremo del marcapáginas de tela está algo deshilachado, pero ignoro si es en mi ejemplar o en todos.

Pasemos a los extras. Muchos extras. Interesantes extras. Si, soy un vicioso de los extras, ¿os sorprende?:-). El tomo de Panini tiene muchas cosas para que babeemos un poco. Un articulo de Julián Clemente, un prólogo de Stan Lee, bocetos y portadas por todas partes…Y al final de la historia, el plato fuerte.

Tenemos una lista de referencias de las escenas de Marvels respecto a los cómics de donde salen. Tenemos artículos de la edición USA. Tenemos las diferentes y sucesivas propuestas entregadas a la editorial (una delicatessen para  los que les gusta mirar en los engranajes del mundo editorial).

Y mientras los lectores más teóricos se dedican a leer esas diferentes propuestas, los demás pasamos a otros jugosos extras. Pongámonos en situación. A lo largo de la obra, veremos diferentes páginas de periódicos. Algunas colgadas de las paredes, otras tiradas en una mesa, cubiertas con fotos o vasos. Solamente podremos leer los titulares. Bueno, realmente con una muy buena lupa podríamos leer los textos, pues son reales y no textos de relleno. Pero para que no nos quedemos ciegos leyéndolos; los tenemos aqui, en formato de lectura normal. Para que podamos disfrutar aún más de la inmersión en este mundo de Maravillas y Prodigios.

Y tenemos fotos, bocetos y textos sobre el proceso creativo de Ross.

Y una pequeña guia visual de los huevos de Pascua escondidos en las viñetas. Otro de los extras que más me han gustado.

Y más bocetos y dibujos, y unos estudios de personajes que dan ganas de ir corriendo a la tienda de camisetas más cercana y decir: quiero una con esto.

Y portadas variadas a página completa. Muchas. 66 páginas si no he contado mal. Supongo que nos llegarán para pasar un ratito entretenidos :-).

¿Por qué leer Marvels?

Visualmente es fascinante. La historia tiene múltiples lecturas. Recorre la Historia del mundo de Marvel. Montones de extras, interesantes y bonitos.

¿Por qué no leer Marvels?

No te interesa el universo de Marvel. No lees cómic de superhéroes. No te gusta el estilo hiperrealista.