Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Marvel Saga El Asombroso Spiderman 31. A lo grande

Marvel Saga El Asombroso Spiderman 31. A lo grande
Guion
Dan Slott, Fred Van Lente.
Dibujo
Humberto Ramos, Stefano Caselli, Mark Bagley y otros.
Tinta
Carlos Cuevas, Joseph M. Damon, Víctor Olazaba y otros.
Color
Edgar Delgado, Morry Hollowell, Marte Gracia, Fabio D'Auria y Joe Andreani.
Formato
Cartoné, 272 págs, color.
Precio
24€.
Editorial
Panini Cómics. 2018.
Edición original
The Amazing Spider-Man #648-654, #654.1 y material de Venom Super Special #1 (Marvel)

Ha querido el destino que, ahora que Dan Slott ha finalizado su etapa en The Amazing Spider-Man, coincida con la llegada del inicio de sus números en solitario a la línea Marvel Saga El Asombroso Spiderman. Llegados a este punto podemos analizar estos cómics como si acabaran de publicarse o se puede tener un poco de perspectiva sabiendo lo que vendría después. Creo que lo más interesante es la primera de las opciones, para poder atraer más a los potenciales nuevos lectores que en su día no la leyeran y que se quieran acercar ahora aprovechando la fabulosa edición de esta línea Marvel Saga. Pues sí, ha llegado ese tal Dan Slott a quedarse como guionista principal. Y ha llegado… A lo grande.

A lo grande
Lo que sí me resulta simpático es lo que recuerdo de las opiniones del fandom cuando comenzó esta etapa. Por un lado ilusión, porque venía de firmar alguna etapa muy interesante en solitario (Hulka) y ya llevaba tiempo formando parte de ese pool de guionistas que se estaba encargando de la colección arácnida; pero por otro lado desconfianza, pues no se había encargado de ninguno de los títulos fuertes de la editorial y siempre había tenido a los editores muy encima para imponer este o aquel crossover en sus series. Pero Slott era «uno de los nuestros». Era un lector empedernido desde su infancia, un tipo que encajaba con el prototipo del friki bonachón… y le había tocado el gordo: encargarse de uno de los títulos estrella (si no EL título estrella) de la editorial.

Su comienzo fue toda una declaración de intenciones: Peter entra a formar parte de Horizon Labs como uno de los investigadores y comienza a ganar mucho dinero. Sigue saliendo con la policía forense Carlie Cooper y su tía May se ha casado con el padre del alcalde J. J. Jameson, Jay. Sigue siendo un Vengador y mantiene una relación de amistad con Mary Jane. Pero ya hay un factor fundamental que puede suponer un jarro de agua fría para el seguidor de Peter de toda la vida: Pasa a ser una persona con éxito laboral… y dinero. Muchos se echaron las manos a la cabeza, pensaron que Slott no conocía al personaje y que poco menos que había cometido un sacrilegio. Pero entonces va y se saca de la manga una viñeta en su segundo número del Spiderman de los sesenta, donde Tía May convence a Peter de que no abandone la Universidad y le recuerda que su tío Ben siempre soñó con que fuera un científico de éxito. No sería su última demostración de conocimiento histórico del personaje. En este mismo tomo veremos otras viñetas similares a la hora de idear cómo derrotar a unos enemigos con un sentido arácnido similar al suyo.


Y es que Slott venía con fuerza: comienza con dos arcos argumentales en los que deja claro que tiene ideas para rato, va plantando semillas para el futuro, como esa nueva formación de Seis Siniestros que está reclutando Octopus, o ese simbionte aislado por fin del cuerpo de Mac Gargan y disponible para un nuevo huésped, esa nueva encarnación del Duende,… Y si la cantidad de tramas abiertas no parece suficiente, escribe unos diálogos que sacan la sonrisa a los más desconfiados. Introduce continuas referencias a la cultura popular en boca de Peter, que hacen que volvamos a sentirlo como uno de los nuestros (Toy Story, Tron…) y le da ese aspecto torpe y siempre al borde de tirarlo todo por la borda que hacen que incluso a pesar de estar ganando un dineral y trabajando como investigador en una puntera empresa tecnológica… lo sigamos viendo con una cercanía similar a cuando no era más que un aspirante a reportero del Daily Bugle.

En este tomo se incluyen los dos primeros arcos argumentales de Slott al frente de la colección: A lo grande y La venganza del Mata-Arañas. En el primero se enfrenta a Kingpin y el Duende, y en el segundo al temible Alistair Smythe (el Mata-Arañas) y su ejército de Insectos. Lo mejor que tienen estos dos arcos, amén de situar al personaje en su nuevo status quo, es lo bien que cuida a los secundarios y cómo va hilando una sub-trama tras otra. A pesar de tener una trama principal, es difícil cuantificar la cantidad de sub-tramas que se van abriendo y solapando: J.J y Marla, Jay y May, Carlie, MJ, Flash y Betty, Octopus, el Escorpión, Phil Urich, el Front Line,… son muchísimas, y todas perfectamente colocadas, sin atosigar al lector, ni introducir ninguna a destiempo.

En cuanto al dibujo, el primer arco está dibujado por Humberto Ramos y el segundo por Stefano Caselli. Caselli hace un dibujo muy dinámico con un estilo más contenido. Recuerdo que Ramos recibió muchas críticas al inicio de estos números, y sobre todo, más adelante. Tengo que reconocer que su estilo hiperbólico me gusta. Si con otros artistas tipo Madureira o McGuinness me canso generalmente pronto, con el mexicano no me sucede lo mismo. Sí, es un estilo a veces exagerado, pero me gusta mucho su dinamismo, y lo bien que le quedan las escenas de acción. También hay que reconocer que en estos primeros números dio lo mejor de sí y el trabajo queda francamente espectacular.


Este extenso primer tomo de la etapa Slott, el treinta y uno dentro de la línea Marvel Saga dedicada a Spiderman, contiene los cuatro números de A lo grande, el primero de ellos de cuarenta y dos páginas y el segundo de treinta y dos; las historias de complemento de este primer arco; los tres números de La venganza del Mata-Arañas; el número 654.1 con la presentación del nuevo Veneno; y una historia de complemento de un especial de Veneno de 1995 que ya escribió Slott con el dibujo de Bagley.

En definitiva, Marvel Saga El Asombroso Spiderman 31. A lo grande.

Un inicio de etapa ilusionante. La colección volvía a tener mucho interés, nos brindaba tramas con muchas pretensiones sin llegar a caer en lo pretencioso, y anunciaban la que sería una de las etapas recordadas con más cariño de la historia del trepamuros y que, aunque tuviera algunos altibajos, demostraría dar la razón a quienes habían confiado en él la serie. Slott se mostró valiente desde un principio, aportó ideas muy arriesgadas, pero respetando la esencia del personaje. Dotó de gadgets y de tecnología a un personaje que era un genio tecnológico (¡lógico!). Cualquiera que llevara tiempo apartado del personaje tiene en este tomo un punto de reenganche fantástico.

Lo mejor: El nombre del primer arco no se quedó nada corto: un comienzo por todo lo grande. Lo valiente que se muestra Slott y lo que arriesga desde el primer momento. El precio.

Lo peor: Para mí, en este momento… nada.