Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Marvel Premiere Los Vengadores 12: Los Señores de la Venganza Terrenal

Marvel Premiere Los Vengadores 12: Los Señores de la Venganza Terrenal
Guion
Jason Aaron
Dibujo
Aaron Kuder, Carlos Magno, Jim Towe
Tinta
Cam Smith, Scott Hanna, Roberto Poggi,
Color
Jason Keith, Triona Farrell, Guru-eFX
Formato
Rústica, 128 páginas, a color
Precio
12 €
Editorial
Panini Cómics. Noviembre 2024
Edición original
Avengers Forever V.2 1-5

¿No te gustan Los Vengadores de Jason Aaron? Pues toma dos tazas, jajaja. En Marvel Comics parece que han hecho un doctorado sobre cómo cabrear al personal. Pero claro, si eres Jason Aaron tienes el nombre suficiente para vivir de los réditos que tienen tus mejores obras (Thor”, “Scalped”, “Lobezno y la Patrulla-X) sin importar los muchos truños que dejes por el camino (Star Wars”, “Conan). Tiene que ser esta la razón para que, pese a que la recepción de su etapa en los héroes más poderosos de la Tierra haya sido tibia por parte de la crítica y el público, haya conseguido una segunda serie regular titulada “Avengers Forever”, con la que rematar la gran historia que se supone que quiere contar y que no tengo ni idea de cómo va a rematar.

Avengers Forever. El legado de una serie mítica

Publicada entre finales del siglo pasado y principios de este, Siempre Vengadores fue una maxiserie de doce números en la que Kurt Busiek y Carlos Pacheco rindieron homenaje al grupo más importante de la editorial (aunque es de justicia mencionar que en 1998 a nadie le importaban los Vengadores). La serie de Aaron, cuyo primer arco recoge este Marvel Premiere, parece una secuela temática de la maxiserie original. Tal y como adelanta la portada, la cosa va de reunir un equipo formado por versiones multidimensionales de los personajes que conocemos bien.

La excusa para lanzar esta nueva cabecera de Vengadores se ampara en la aparición de los nuevos Señores del Mal liderados por Cráneo Rojo (el entrañable nazi tiene ahora el simbionte de Veneno). Este grupo ya hizo aparición en la entrega anterior y la verdad es que supuso un soplo de aire fresco, pese a que este puñado de villanos eran una galería de poochies sin remedio. Su mera concepción refleja lo mejor y lo peor del Jason Aaron mainstream de los últimos años, es decir, la necesidad de molar a toda costa, quedando la coherencia, o el sentido común, relegados a un segundo plano.

El ancla entre ambas series es el Jinete Fantasma, que yace cautivo de Cráneo Negro y protagoniza un puñado de escenas de lo más sádicas (siempre teniendo como referencia que estamos hablando de un cómic Marvel para todos los públicos). A partir de aquí, entra en juego un nuevo equipo de Vengadores fracasados que están anclados en un mundo muy similar al de los baldíos de El Viejo Logan.

Uno de los principales defectos que encuentro en esta nueva “Avengers Forever” es que su villano principal no está nada definido. Por un lado están los remozados y macarras Amos del Mal. Por otro, encontramos a Victor Von Doom, que busca ser el Doctor Muerte Supremo del multiverso y para ello va cazando a sus contrapartidas de todas las dimensiones. Este periplo nos regala algunas versiones del monarca latveriano que habrá a quien le resulten simpáticas, pero a mi personalmente me parecen ridículas, cuando no directamente insultantes.

El otro defecto que encuentro reside en la elección del Doctor Muerte como némesis de esta parte de su estancia en la franquicia vengadora, cuando todavía está muy reciente en el tiempo la macro historia que nos contó Jonathan Hickman en “Los 4 Fantásticos” y “Los Vengadores. Un montón de números que desembocaron en las Secret Wars, uno de los mejores eventos de la historia de la editorial.

Asímismo, la sensación de que Jason Aaron está montando un circo innecesariamente grande para lo que a buen seguro será una conclusión decepcionante a casi un centenar de tebeos, revolotea de manera inquietante sobre esta historia. Ya queda menos para conocer el desenlace, pero estoy casi seguro de que será frustrante y quedará en un claro “mucho ruido y pocas nueces”.

Ahora bien, por el lado positivo es imposible no resaltar la capacidad de Jason Aaron para escribir mamarrachadas divertidas tan adictivas y vacías como tragarte un maratón de programas de “Crónicas carnívoras” o “La casa de empeños”. Reconozco que me he zampado esta sarta de disparates de una sola sentada y que tengo ganas de leer su continuación.

La parte artística viene firmada, al menos en su comienzo, por Aaron Kuder, un gran artista que no se caracteriza por su rapidez. Aún así, sus números son estupendos y sus suplentes Carlos Magno y James Towe realizan un trabajo más que digno.

En definitiva, que cuenten conmigo para la continuación. Quiero ver como termina este choque de trenes.