Es la hora de las tortas!!!

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Marvel Premiere. Daredevil 9: La mujer sin miedo

Marvel Premiere. Daredevil 9: La mujer sin miedo
Guion
Chip Zdarsky, Ann Nocenti, Declan Shalvey, Ty Templeton, Chris Giarruso
Dibujo
Rafael de Latorre, Sid Kotian, Stefano Raffaele, Ty Templeton, Chris Giarruso
Color
Federico Blee, Edgar Delgado, Rachelle Rosenberg, Ty Templeton, Chris Giarruso
Traducción
Gonzalo Quesada
Formato
Rústica, 120 páginas
Precio
12 €
Editorial
Panini Comics. 2024
Edición original
Daredevil: Woman without Fear 1-3 y Elektra 100 USA

Hay dos formas de enfocar la publicación de un crossover en función de la necesidad de leer series periféricas. Por un lado están los sacacuartos a lo Civil War, en los que elementos importantes de la trama ocurren en alguno de los tie ins y el lector se encontrará perdido si no pasa por caja con una buena parte de ellos. El otro es más respetuoso: todos los elementos clave de la trama ocurren en la serie principal, y los tie ins sirven para ampliar el alcance de la historia y para contarnos cómo afecta la historia a los protagonistas de las distintas series regulares. En este caso, los cruces aportan información extra pero no son imprescindibles, aunque suele ser recomendable leer los que escribe el guionista de la serie central. Precisamente uno de estos ejemplos es El reinado del diablo, y una de las miniseries relacionadas, La mujer sin miedo, está escrita por Chip Zdarsky, por lo que Marvel decidió publicarla en tomo como parte de la recopilación de la serie de Daredevil escrita por el autor canadiense. Y ahora, siguiendo las directrices marcadas por la editorial original, Panini la publica en castellano dentro de Marvel Premiere: Daredevil.

la mujer sin miedo pg1

Englobada dentro de los acontecimientos puestos en marcha por Wilson Fisk, La mujer sin miedo es una miniserie de tres números que se centra en lo que está haciendo Elektra durante la batalla campal que se ha montado en Nueva York. En los últimos meses, Elektra se había convertido en la nueva Daredevil, la defensora de la Cocina del Infierno mientras Matt Murdock estaba en la cárcel, llevando al personaje a una situación de conflicto: la asesina definitiva del Universo Marvel tiene ahora un rol de protectora y se ha comprometido a no matar.

Esta Elektra es la que nos encontramos en esta miniserie, centrándose en tres aspectos de la vida del personaje. Por un lado, la parte más física, en la que Elektra da buen uso a las habilidades de combate adquiridas a lo largo de toda una vida, representada en un combate cara a cara con Kraven el Cazador -la última encarnación del personaje, el último hijo creado por Nick Spencer-, que ha sido enviado por Kingpin para acabar con la nueva guardiana de la Cocina. También miramos hacia el pasado del personaje y sus primeros contactos con La Mano, en un retconeo que nos presenta a Aka, quien guió a Elektra a la organización ninja tras desertar de la Casta. Y, por otro lado, también nos recuerdan que, debajo de todo ese entrenamiento asesino y esa faceta superheroica, Elektra Natchios es una persona. Para ello, veremos a Elektra hablando con Robert Goldman, el abogado con el que Matt llegó al acuerdo previo al encarcelamiento de Daredevil, ex compañero de clase de Matt, Foggy y Elektra de tiempos que nos llevan a la legendaria miniserie El hombre sin miedo.

Comentábamos en reseñas previas de la etapa de Chip Zdarsky en Daredevil que posiblemente este autor sea el que mejor ha entendido a Elektra después de su creador, el mismísimo Frank Miller. Elektra es, al igual que Matt, un personaje en constante conflicto, con una contradicción entre sus instintos y su educación, entre sus habilidades y su compromiso, y eso es lo que Zdarsky refleja en esta miniserie. Aún así, estando la parte importante de la historia El reinado del diablo en la miniserie central, este tie in se queda como un detallito periférico, bastante intrascendente en lo argumental pero muy inspirado en el retrato psicológico de la protagonista. Al dibujo, tenemos al brasileño Rafael de Latorre, que hace un muy buen trabajo pero que no llega a los niveles de Marco Checchetto en el centro del evento.

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Pero tres grapas no son suficientes para completar un TPB, con lo que Marvel decidió rellenar el contenido con otro cómic protagonizado por la Mujer Sin Miedo: el número 100 de Elektra. Un número 100 que hay que hacer alguna que otra carambola matemática, pero que se consigue con la inclusión de material descrito en un artículo de Julián Clemente con el que se cierra el tomo y representado en una galería con todas las portadas de los tebeos en cuestión.

Elektra #100 es un especial de aniversario que resulta, hablemos claro, decepcionante. La parte central es básicamente una pelea entre Elektra y María Tifoidea que se hace pesada y no aporta gran cosa a ninguno de los dos personajes, aunque quizás funcione mejor con la segunda. El guion es de Ann Nocenti, creadora de la Tifoidea,  una autora que pasó varios años al frente de la serie del cuernecitos en una etapa que tiene una buena cantidad de seguidores pero entre los que, personalmente, no me encuentro. La historia que tenemos entre manos es superficial y no está especialmente bien dialogada, y tampoco ayuda el dibujo genérico del dibujante indio Sid Kotian en su primer trabajo para Marvel.

En cambio, tenemos varias historias de complemento de un nivel muy superior a la principal. Vals, de Declan Shalvey y Stefano Raffaele, nos muestra una pelea entre Daredevil y Elektra con tintes de baile y es una pequeña delicia narrativa de siete páginas. Y las tres últimas páginas son versiones humorísticas que un lector veterano reconocerá, de la mano de Ty Templeton y Chris Giarruso.

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En general, podemos decir que La mujer sin miedo es el tomo menos inspirado del Daredevil de Chip Zdarsky desde el primero en Marvel Premiere hace ya más de tres años. No es un mal cómic -en su primera mitad, el inserto de Elektra nº100 es directamente ramplón- pero no está al nivel de los ocho primeros tomos y no es especialmente necesario para seguir la historia que nos está contando el autor. Solo para completistas y para lectores con TOC que no conciban la posibilidad de tener una colección de doce tomos a la que le falte solo el nueve.