Bueno, bueno, bueno, pues con la tontería ya son diez las entregas de la línea Marvel Must-Have dedicadas a reeditar toda la etapa de Brian Michael Bendis en los Nuevos Vengadores. Aunque bueno, Panini ha tenido a bien de publicar el resto de series de la franquicia como Poderosos, Jóvenes y Oscuros, así como los eventos principales de Desunidos, pasando por Dinastía de M, Civil War, Invasión Secreta o Asedio. Curiosamente este último crossover supone el final de la etapa de Norman Osborn como jefazo máximo. Una aventura que empieza precisamente en este volumen adscrito al landscape de Reinado Oscuro.
Bienvenidos al Reinado Oscuro de Norman Osborn
Aunque no esté estrictamente relacionado con Nuevos Vengadores, sino más bien con todo el Universo Marvel en general, este tomo empieza con el especial Invasión Secreta: Reinado Oscuro. Recapitulemos un poco: Al final de la guerra contra los skrulls, el antiguo Duende Verde consiguió dar el tiro de gracia a la Reina Veranke. Este hecho, además de dar por cerrado el conflicto, le otorgó las llaves del puñetero reino.
De golpe y porrazo, Bendis le dio más poder y éxito a Norman Osborn del que había tenido nunca en los cincuenta años previos desde que fue creado en las páginas del Asombroso Spider-Man. Cabe destacar que la maniobra recuerda poderosamente a la escalada que obtuvo Lex Luthor en el Universo DC a principios de siglo, donde llegó a convertirse en el Presidente de los Estados Unidos.
Pues bien, esta nueva posición ventajosa es el eje central sobre el que se esgrime la reunión de la cábala de villanos que ocupa todo el mencionado especial. En estas páginas, Bendis saca su mejor cara como guionista, ofreciendo un episodio donde toda la fuerza está basada en los diálogos, o más bien soliloquios, del propio Osborn. El nuevo jefazo tiene encontronazos con todos los miembros y no se achanta lo más mínimo pese a ser con diferencia el asistente menos poderoso de la sala.
Dibujando podemos ver a Alex Maleev, su incansable compañero de fatigas en Daredevil, que realiza un trabajo correcto pese a que su versión de Namor es cuanto menos cuestionable. El gobernante de Atlantis parece que se ha escapado de un capítulo de Los Serrano más que otra cosa. A su favor, decir que el Doctor Muerte luce verdaderamente imponente.
El resto del volumen lo ocupan los números 48 a 50 de Nuevos Vengadores, metidos de lleno en este particular Reinado Oscuro. En su momento fue destacable que una cabecera de nuevo cuño como New Avengers llegase a una cifra tan sonada como el medio centenar de entregas pues Marvel ya estaba en la etapa (que todavía no ha abandonado) de resetear el contador cada poco tiempo.
Más allá de esta efeméride, Bendis usa este puñado de episodios para barrer las consecuencias del crossover anterior y así comenzar a tejer el siguiente gran capítulo de su etapa con los Héroes más poderosos de la Tierra.
En una saga muy entretenida, veremos qué ha pasado con los skrull que han quedado en la Tierra y, especialmente, se resolverá el secuestro de la hija de Luke Cage y Jessica Jones a manos del alienígena que sustituyó a Jarvis. Es una pena que fuera resuelta de la forma en la que lo hizo, porque ese papel que podría haber tenido Luke Cage en el Reinado Oscuro prometía bastante. Pero claro, Bendis ha optado por seguir haciendo lo que mejor sabe, llevando a unos Vengadores sin Steve, Tony o Thor a una senda más urbana que nunca con la casi total ausencia de miembros ultra poderosos. Hay un buen par de momentos impagables, como la reacción del nuevo grupo a la aparición en televisión de los Vengadores Oscuros de Osborn.
La parte artística recae en manos de Billy Tan, que realiza un trabajo bastante sólido pese a lo acartonada que resulta su anatomía muchas veces. Digno de mención es que el especial número 50, que además de tener un mayor número de páginas, es ilustrado hasta por dieciséis artistas diferentes con páginas tremendas a cargo de David Aja o Michael Gaydos y otras horrorosas de Greg Horn.
En definitiva, estos Nuevos Vengadores siguen progresando adecuadamente. Puede que no sea la gran serie que los personajes merecen, pero el buen hacer del guionista asegura dosis bien medidas de acción, diversión y sorpresas. Que sigan contando conmigo.
La edición de Panini contiene los habituales extras de la línea como artículos y textos de todo tipo, líneas temporales, esquemas, etc… un material muy bien recibido que enriquece la lectura de estos tebeos.
