Hace unos años se anunció que la cadena privada estadounidense Hulu se había hecho con los derechos de una serie de personajes de Marvel para realizar series animadas de los mismos. El paquete incluía a Masacre (esto hubiera molado mucho), Howard el Pato, Hit Monkey y M.O.D.O.K. Al final solo son estos dos últimos los que han llegado a la pequeña pantalla. De hecho, la serie protagonizada por el mono sicario todavía no se ha estrenado (lo hará en breve), aunque mucho me temo que ambas se quedarán en una sola temporada.
¿Pero M.O.D.O.K.? La verdad es que las razones por las que alguien quisiera hacer una serie de animación con él se me escapan. Pero claro, si luego te acuerdas de que la primera película de imagen real de Marvel fue precisamente una protagonizada por el bueno de Howard… La decisión no te parece ya tan absurda. Lo cierto es que este Organismo Mental Diseñado Exclusivamente para Matar, ya fuera por su particular diseño (esos bracitos y piernecitas son únicos), o ya fuera por otras circunstancias, había salido en prácticamente todas las series animadas que había realizado La Casa de las Ideas desde la de Iron Man de Fox en los años 90. También le hemos podido ver en un montón de videojuegos, e incluso hemos podido jugar con él en Marvel VS Capcom 3.
M.O.D.O.K. de la televisión al papel
Entonces, visto esto, lo mejor es cambiar la pregunta a ¿Por qué no? Y si encima se encarga de la serie la misma peña que lleva años haciendo que alucinemos con Robot Chicken, pues el resultado es un curioso conjunto de aventuras de lo más resultonas. Entonces llegamos a los cómics, que es lo que nos interesa. Y es que si hay una serie o peli, siempre tiene que haber algún tebeo para tratar de enganchar a los rezagados. Lo que sucede es que en este caso, Marvel ha pasado de lanzar una serie regular (que bien sabe que acabaría cancelando a las primeras de cambio) para centrarse en una mucho más contenida miniserie de cuatro números protagonizada por M.O.D.O.K., que encima viene firmada por Jordan Blum y Patton Oswald (veterano actor que participó en la teleserie Agentes de Shield), responsables también de los guiones de la ficción animada.
El resultado es M.O.D.O.K.: Rompecabezas, una deliciosa serie limitada que ha cogido la esencia del villano presentado hace décadas en las páginas de Tales of Suspense y la ha retorcido hasta hacerle protagonista de un relato digno de algunas animaciones de Adult Swim. La historia de Blum y Patton está llena de acción descerebrada y humor paródico y autoconsciente. Los escritores nos presentan a un M.O.D.O.K. que debe realizar una carrera contrarreloj para conseguir los componentes necesarios para arreglar su enorme cabezota, que está sufriendo unas pesadillas que le convierten en el padre de una familia que nunca ha existido.
Da gusto toparse con un tebeo así de cuando en cuando, que solo tiene la pretensión de entretener y que consigue su objetivo de todas todas. Estamos ante una sucesión de situaciones inverosímiles (incluso para un cómic de superhéroes), como acudir a una convención de súper villanos en los que presentan lo último en armas y equipo para sembrar el caos y el terror llena de cameos bombásticos, o la siempre agradecida aparición de Masacre-Gwen. Me la he ventilado en un suspiro y no creo que tarde en volver a leerla. En la parte artística encontramos a Scott Hepburn, que se muestra un poco más caricaturista que de costumbre. Algo que le sienta de miedo al tono de la historia.
Este volumen también nos depara un par de sorpresitas. La primera es la inclusión de la miniserie Supervillain Team Up: M.O.D.O.K.’s 11. Originalmente fue publicada en 2007 y había permanecido inédita hasta la fecha, algo que me sorprende, pues sus encargados son Fred Van Lente (escritor que como mínimo hace un trabajo competente) y el dibujante español Francis Portela, que firma su mejor trabajo en Marvel.
En sus páginas veremos cómo el Camaleón, el Corredor Cohete, el Puma, Armadillo o la Mancha entre otros villanos de segunda y tercera categoría, se reúnen para realizar un robo imposible en la tradición de las películas protagonizadas por Danny Ocean (Frank Sinatra o George Clooney, eso ya depende de cada uno). Este variopinto conjunto de criminales tendrán que cumplir una misión en la que nada es lo que parece. Aunque inferior a su predecesora, sigue siendo tremendamente efectiva y muy divertida.
Fred Van Lente sabe sacar petróleo de los villanos que le dejan para jugar, sacando la parte más ridícula de cada uno de ellos a la par que consigue que sus diversas personalidades encajen en el tono de la historia, que es evidentemente cómico. No voy a contar más porque merece la pena que lo comprobéis vosotros mismos.
La guinda del pastel la ponen dos especiales: M.O.D.O.K.: Reign Delay y Fall of the Hulks: M.O.D.O.K., que en su momento sirvieron para relajar un poco los ánimos durante la saga, o el landscape en el que fueron publicados. Ambos están completamente realizados por Ryan Dunleavy y son todavía más descacharrantes (a nivel gráfico sobre todo) y surrealistas. Estamos ante especiales totalmente exagerados y excesivos. Tanto es así, que a veces la cantidad de texto en las páginas es tal, que la lectura queda un poco entorpecida, pero por lo general son bastante entretenidos.
En general estamos ante un puñado de historias que sacan a relucir el lado más ridículo (y a la vez más humano) del villano. Seguramente dado su diseño y concepción sea la única forma lógico de hacerlo. Sea como fuere, estamos ante un tomo de lo más disfrutable y divertido. Muy recomendable.