Tras muchas batallas y con los poderes menguados, Superman está más débil que nunca. Es el peor momento para que llegue un enemigo que pondrá en jaque al Hombre de Acero aunque cuente con la ayuda de Wonder Woman y de un doble de otra dimensión que lleva mucho tiempo escondido de la opinión pública.
Han sido unos años convulsos para DC: Crisis Infinita, 52, Convergencia, Flashpoint y ese experimento llamado los Nuevos 52, que tantos quebraderos de cabeza dio a la editorial y que tantas críticas hizo llover sobre la cabeza pensante de Dan Didio. A la vista de los malos resultados del evento, en DC se decidieron empezar otra vez de nuevo con ese evento llamado Renacimiento (si queréis saber más sobre este evento, podéis escuchar el podcast grabado en el pasado Heroes Comic Con Madrid, con la presencia de uno de los editores DC en España). Esta historia, Los Últimos Días de Superman, supone el fin del personaje de los Nuevos 52 y el prólogo a sus nuevas aventuras bajo la cabecera de Universo DC: Renacimiento.
El Superman de este mundo, con unos poderes inferiores al de su homólogo que conocíamos antes de la última crisis, ha pasado recientemente por unas cuantas batallas que le han dejado muy debilitado. Por si fuera poco, su confinamiento en la cámara de kryptonita de Argus ha envenenado su sangre y ahora se está muriendo. Tras muchos análisis y estudios, Superman llega a la conclusión de que su muerte es inevitable y comienza los preparativos. Se despide de sus seres queridos, como Batman, su amiga de la infancia Lana Lang, Lois Lane y su amante Wonder Woman (sí, Lois Lane y el Superman de los Nuevos 52 no son más que amigos y compañeros de trabajo). Además, le encarga a su prima, Supergirl, que continúe su trabajo como protectora de la Tierra y la Humanidad.
El tomo se inicia con el (hasta ahora inédito en nuestro país) 2º Annual de Superman / Wonder Woman, en el que ambos héroes detienen la amenaza de una deidad olímpica, y Diana revela a Clark que ahora es ella la diosa de la guerra, lo cual éste no se lo toma muy bien. Entre esto y lo mal que lleva el sentirse inútil al estar privado de sus poderes a consecuencia de su última supererupción (no es lo que pensáis), la relación entre ambos se deteriora lentamente. Comienza después el arco Los Últimos Días de Superman, en el que el guionista Peter Tomasi nos mete de lleno en una emotiva historia, acompañado de los hermosos dibujos de Mikel Janín. Pero no todo van a ser lágrimas y lamentos, puesto que al mismo tiempo, un rayo de energía impacta sobre un fugitivo de la justicia en Minesota, dotándole de los poderes de Superman, pero también de sus recuerdos. Este delincuente ahora está convencido de ser Clark Kent y Superman, pero sus reacciones son exageradamente violentas, pese a ser consciente de que su deber es proteger y ayudar a los demás. De esta manera, se convierte en una amenaza que debe ser neutralizada por el cada vez menos poderoso Superman.
Doug Mahnke, Ed Benes, Jorge Jiménez y Paul Pelletier, entre otros, toman el relevo de Janín a los lápices en los números siguientes, en los que Superman forma equipo por última vez con Wonder Woman y Batman para detener a este falso Superman. El rastro les leva a China, donde una científica del gobierno está haciendo experimentos para crear un superfuncionario a base de replicar los poderes de Superman. Tras el obligatorio enfrentamiento con el superequipo local (los Diez Grandes), ambos grupos se aliarán para acabar con esta mad doctor. Todas esas aventuras no hacen sino debilitar aún más a Superman, que aún habrá de hacer frente a su doble. Para rematar las cosas, este doble se lleva a Lois Lane a la casa en el campo de la familia White, que no son otros que nuestros Lois y Clark (y el pequeño superhijo Jonathan), que han aparecido en este mundo donde ya hay un Superman y deciden vivir aquí de incógnito. Tres Supermanes (más un murcielago y una amazona) coinciden en una épica batalla final en la que sólo quedará un Superman, el que se vería posteriormente en Renacimiento y el Nuevo Universo DC (al menos, hasta la próxima Crisis). El tomo se cierra con el número 1 de Superman: Renacimiento, en el que se sientan los pasos para la que será la nueva cabecera del personaje.
ECC recopila en un solo volumen la saga que cerró las aventuras del Superman de los Nuevos 52. Una historia difícil de seguir si no se ha estado al corriente de todo lo anterior, como por qué Superman no sale con Lois sino con Wonder Woman, o por qué hay dos Lois y Clark (y sólo un Jonathan) en este mundo. Este Superman pretendía ser el definitivo para una nueva generación, pero el rechazo de los fans y lectores de toda la vida a los personajes de estos Nuevos 52 hizo que DC reculara y montara este Renacimiento con el que volver a lo de antes, sin ser exactamente lo mismo de antes. Es complicado. Aun así, es una lectura cargada de sentimiento que todos los lectores, incluso los fans más acérrimos del Superman clásico, apreciarán.