Desde el desembarco de los cómics Marvel en España en primavera de 1969 de la mano de Ediciones Vértice, varias generaciones de lectores crecieron leyendo esas aventuras, presentadas en nuestro país envueltas en hipnotizantes ilustraciones a cargo de Rafael López Espí y Enrique Torres Prat, Enrich. Aquellas portadas quedaron grabadas en la retina de jóvenes lectores, que disfrutaban y soñaban con los superhéroes Marvel.

Medio siglo después de que llegaran a los kioscos (recordad, a principios de los años 70 aún no había librerías especializadas en España) de nuestras ciudades, y tras años de un complejo trabajo de restauración, el aficionado Jesús Ortiz Bonache ha recuperado recuperado todas y cada una de las cubiertas del formato bolsillo (taco) de las cabeceras Marvel de Ediciones Vértice. Los que crecimos en los setenta aún recordamos esos tebeos que contenían historias de nuestros superhéroes favoritos (aunque por aquel entonces se llamaran Dan Defensor y La Masa, en vez de Daredevil y Hulk), en glorioso blanco y negro e imaginativamente mutilados para que encajaran en el formato de bolsillo. No se puede explicar, si no, cómo hacían para meter 2 números USA en 128 páginas. El autor de semejantes atrocidades no fue otro que Tunet Vila, el creador de Tumbita, cuyas historietas solían acompañar las contraportadas. Casi por eso se le perdona. Casi.

Pero este libro no es un estudio de aquellos años Vértice. Su objetivo es recopilar, por primera vez en la historia, todas las portadas que los ilustradores de estilo pictórico Rafael López Espí y Enric Torres Prat (Enrich) realizaron para esos tebeos, a veces basándose en las portadas originales y a veces partiendo desde cero. Es vox populi que a López Espí y a Enrich los materiales en los que habrían de basar sus portadas les llegaban en blanco y negro, y sólo así se explican las imaginativas composiciones de color, como ese Doctor Muerte coloreado en rojo y amarillo en una portada, y en azul y amarillo en otra. Pero al fin y al cabo en aquellos tiempos tampoco nos importaba demasiado, porque los jóvenes lectores de la época no sabíamos cómo eran los colores originales (spoiler alert: no existía internet), así que los patrones de color de esas portadas eran un dogma de fe: te los tenías que creer, y si al siguiente número cambiaban, pues te lo tenías que creer igual. Al fin y al cabo, sólo eran tebeos. En mi opinión, las portadas creadas por estos ilustradores ganaban en calidad y atractivo cuanta menos inspiración tuvieran del material americano. Algunas de estas portadas se asemejan más a las de cómics de terror de la EC, o a esas novelitas pulp de las librerías de viejo.

Al ser un libro cuyo principal objetivo es recuperar los dibujos de las portadas, los textos pasan a un segundo plano. El autor, Jesús Ortiz, tan sólo escribe un prólogo inicial y un breve texto introductorio a cada colección, indicando las fechas de publicación, los números americanos contenidos y alguna que otra curiosidad sobre las portadas. En este primer tomo se incluyen las portadas de las cabeceras Los Cuatro Fantásticos, Dan Defensor (Daredevil), Capitán Marvel, Spiderman, Coronel Furia y Estela Plateada, acompañadas de extras como las ilustraciones para los posters creadas por López Espí y los anuncios de las contraportadas anunciando los lanzamientos de la editorial.

Este primer volumen de Las portadas Marvel de Vértice, publicado por Dolmen Editorial, incluye más de 200 portadas. En los siguientes volúmenes de esta colección se publicarán las restantes, hasta llegar al total de 662 portadas que crearon López Espí y Enrich para Ediciones Vértice. Es un producto no apto para todos los paladares, dirigido sobre todo a nostálgicos de los tebeos de nuestra infancia, que lo apreciarán más como un excelentemente remasterizado libro de arte que como un tratado teórico que, por otro lado, no pretende ser.