Saludos, queridos lectores. Escribo esta reseña bajo una fuerte tensión mental, ya que cuando llegue la noche habré dejado de existir. Sin dinero, y agotada mi provisión de tebeos, que es lo único que me hace tolerable la vida, no puedo seguir soportando más esta tortura; me arrojaré desde esta ventana de la buhardilla a la sórdida calle de abajo. Pese a mi esclavitud a la obra de Lovecraft, no me considero un débil ni un degenerado. Cuando hayan leído estas páginas atropelladamente garabateadas, quizá se hagan idea -aunque no del todo- de por qué tengo que buscar el olvido o la muerte…
Hoy toca el segundo tomo de La guarida del horror, donde Corben interpreta a clásicos del terror. Tras Poe, toca Lovecraft. Decimos segundo tomo por decir, ya que ambos son independientes y complementarios. Complementarios porque nos muestran a dos autores con un tratamiento del terror y del horror totalmente diferente.
Miedo. Terror. Fobos y Deimos.
Antes de nada, quiero explicaros que este es el mismo material que se publicó en 2016. Así que si ya lo tenéis, no necesitáis gastar otros 15 euros. Aunque seguro que tenéis a algún amigo o conocida a la que llevar por el buen camino del horror regalándoselo .
Corben adapta e interpreta varias obras de H.P.L. Concretamente tendremos cuentos (Dagon, La música de Erich Zann y Arhur Jermyn) y poemas ( La cicatriz, Un recuerdo, El canal, La lámpara, El pozo y La ventana.).
Por regla general, las adaptaciones de los cuentos son eso, adaptaciones bastante fieles. En cambio, los poemas de Lovecraft pocas veces tienen una historia o tema definidos. Por lo tanto estaremos ante interpretaciones libres y muy interesantes más que ante una traslación literal de las palabras a imágenes.
Todo el trabajo es obra de Corben, excepto la parte de adaptación y guión de La lámpara. Ahí el crédito lo merece Rich Margopoulos.
Antes de hablar de la obra en sí, quería comentaros que realmente son dos obras por el precio de una. Tras cada historia en cómic tenemos el poema o cuento original para leer y comparar. Íntegros y en castellano. Esto no solamente nos permite comparar ambas obras, sino que nos trae de regalo los textos de Lovecraft.
¿Y qué tal está esta Guarida? Resumiento mucho: Genialmente brutal. Maravillosa. Dantesca. Genial. Onírica. Poética. Estremecedora…
A nivel de guión, lo mejor son los poemas. Corben puede inventarse una historia totalmente propia y al leer el poema original, vemos que tiene todo el sentido y que encajan como un guante y una mano.
Todo tiene un aire onírico, pero de esos sueños llamados pesadillas. Sueños alejados del mundo real pero que son reales para sus protagonistas y para los lectores. Esa sensación de no saber si estamos despiertos o no.
Tampoco voy a descubrir nada nuevo si os hablo del parecido que todo tiene con aquellas historias de terror de los años 50 y 60. Tanto las prohibidas en Estados Unidos con el Comic Code como las que llenaban los tebeos italianos en los años 70.
Tendremos desde ambientaciones casi costumbristas (Dagon), que narran una historia de terror que realmente no deja de ser un clásico en la obra de H.P.L. a otras como El canal, donde todo tiene un aire inquietante que no nos deja saber lo que estamos viendo.
Claro que es mejor que no sepamos demasiado de algunas cosas. Nuestra cordura no lo resistiría.
Y lo mejor es esa música que se oye por las noches, procedente del cuarto de Erich Zann. Claro que no soy objetivo, pues es uno de mis cuentos preferidos. Pero es que esta versión es genial, sobre todo en el diseño y dibujo de esos edificios en una calle que quizás no podamos volver a encontrar hoy en día, a pesar de haberla recorrido tantas veces durante nuestros tiempos universitarios…
Corben es un autor que, a nivel de dibujo, nunca ha sido de mis preferidos. Y si bien no termina de convencerme en sus cuentos de Poe, en los de Lovecraft ese estilo sucio y desgarbado le viene a las historias como anillo al dedo.
Tal vez lo que más destaca a este nivel es Hechos relacionados con el difunto Arthur Jermyn y su familia. Una historia que deberíamos leer varias veces. Primero el cómic, luego el relato y, tras saber ya de que va, volveremos al cómic. Veremos entonces que lo que nos parecían licencias del autor no lo son en absoluto. Todo está en el relato, para bien y para mal.
Pero no nos olvidemos tampoco de las filigranas gráficas de ese Dagon inicial. Y no hablo solamente de esa arquitectura inimaginable, sino de los efectos del agua de ese Pacífico donde quizás deberíamos haber muerto tiempo ha…
¿Qué más tenemos aquí? Pues la edición de Panini incluye las cubiertas originales de la edición USA, en blanco y negro. Y no solamente esas portadas, sino tambien bocetos descartados por el autor. Todas a página completa.
La traducción le ha costado su cordura a Héctor Lorda.
¿Por qué leer La guarida del horror: H.P. Lovecraft?
Adapta algunas de las obras más representativas y a la vez más desconocidas del autor de Providence. Crea unas historias para los poemas perfectamente integrados en el estilo original. Los textor originales. Es ideal para un primer contacto con H.P.L.
¿Por qué no leer La guarida del horror: H.P. Lovecraft?
Alguna razón debe de haber, sigo buscando.