Es la hora de las tortas!!!

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La cantina de medianoche. Tokyo stories 4

La cantina de medianoche. Tokyo stories 4
Guion
Yaro Abe.
Dibujo
Yaro Abe.
Formato
Rústica con solapas, 296 págs, color. 15x21 cm.
Precio
18€.
Editorial
Astiberri. 2021.
Edición original
Shinya Shokudo #7-8 (Shogakukan).

Casi un año hemos tenido que esperar para poder volvernos a pasar por la mejor cantina de todo el barrio de Shinjuku, en Tokio. En un barrio donde conviven los animales nocturnos de la ciudad, conviven actores, prostitutas, oficinistas e incluso turistas que encuentran en esta cantina un curioso lugar donde poder cargarse de energía. El jefe te prepara lo que le pidas, siempre que esté dentro de su horario de doce de la noche a siete de la madrugada. La cantina de medianoche. Tokyo stories 4  recoge los tankōbon japonesesn 7 y 8 de una serie que, después de un parón en el nefasto 2020, ha retomado su publicación hace unos meses con su tomo número 23. Astiberri sigue editando esta serie de pequeñas historias ambientadas en la pequeña taberna.


Llegamos, en este cuarto libro, a los dos tomos publicados en 2011 en Japón. Y aquí vemos que hay un ligero cambio respecto a los libros anteriores y es que el mundo exterior comienza a afectar al contenido de las historias, desde la traslación de hechos reales como el terremoto y tsunami de 2011, o escenas de metalenguaje en las que el protagonista se refiere a lo difícil o monótono que puede resultar para Abe dibujar esta o aquella escena. Son muy escasas, pero aportan una complicidad con el lector y no interfiere en absoluto con la lectura, ni rompe el ritmo.

Y es que esta serie se presta muy bien a este tipo de bromas. Al tener ese tono tan sosegado y esas historias que te arañan sutilmente el corazón, creas una complicidad con el autor por la que entras con su juego totalmente. La serie mantiene la misma fórmula de historias de 10 páginas en las que un plato concreto está relacionado con algo que sucede. Generalmente se trata de historias de amores no reconocidos, amores de la infancia, relaciones difíciles entre familiares, o simplemente historias de gente solitaria que no se da cuenta de que no tienen por qué estar solos. Y alcanzamos en este tomo nada menos que la historia número 113. No me imagino lo difícil que tiene que resultar para el autor escoger cada plato para el capítulo porque no creáis que todas las historias tienen al plato en cuestión como mera excusa para darle título, sino que es muy habitual que el tipo de cocina tenga mucha relación con lo que cuenta, como el salmón de una de las historias que cuenta, y que relaciona mucho el tipo de persona con cómo vive el pez; o la manera que tiene un matrimonio de pedir un plato de arroz con huevo y comerlo juntos, porque siempre están juntos…


Lo curioso es que, aunque no tenga especial relación, la comida tiene un lugar muy importante en las historias, por que cuentan las diversas maneras que hay de preparar un plato, o cómo algunos tienen ciertas variantes meramente por retirar el arroz de acompañamiento. Resulta muy curioso leer todas estas maneras diferentes de preparar la comida e incluso algunas sorprendentes, como la pulpa de la soja o la gelatina que queda tras cocer una carne grasienta.

En definitiva, La cantina de medianoche. Tokyo stories 4  es un tomo más de una serie tan deliciosa como los cientos de platos que aparecen reflejados en sus páginas. Una colección de relatos cortos en los que, como si fuera un bar cuaquiera, algunos de los personajes reaparecen de un capítulo a otro aunque haga meses que no se les veía el pelo. Con un tono muy entrañable, esta serie sirve como una lectura perfecta para leer un par de capítulos y pasar a otra cosa, retomando de tanto en tanto. Es indiscutible que si una serie planteada como esta, lleva más de una década funcionando es porque las historias están muy bien escritas y la relación con la gastronomía está perfectamente equilibrada. Deseando ya que llegue el siguiente tomo…


Lo mejor: Lo bien escogidas que están las historias y conectadas con el mundo de la cocina. La fórmula sigue funcionando a la perfección.

Lo peor: Si no te ha funcionado la lectura de los anteriores, no va a cambiar nada a estas alturas que te haga cambiar de opinión.