Nadie se sorprenderá si le decimos que en Casa Tortas somos fervientes admiradores de la obra de Edgar Allan Poe. Tampoco debería sorprenderse si decimos que Poe debería ser lectura obligatoria para… para todo el mundo, qué demonios. Y que tras haber devorado sus Narraciones Extraordinarias varias décadas atrás (quien aún no haya tenido el placer, por favor, en versión original o en la traducción de Julio Cortázar), vamos devorando las distintas adaptaciones transmedia que nos vamos encontrando por el camino, ya sea en cine, televisión, música o, por supuesto, cómic. Las creaciones del inmortal escritor de Boston han pasado, de forma más o menos fiel, por obras de autores como Alberto Breccia, Richard Corben o el mismísimo Alan Moore. Así que la edición de una adaptación de La caída de la Casa Usher por parte de La Cúpula era una lectura necesaria.
Esta fiel adaptación del relato publicado originalmente en 1840 viene firmada por Raúl García, un autor no habitual en el cómic pero sí en la animación. Este madrileño fue el primer español que trabajó en Disney, donde ha participado en películas como Aladdin, El Rey León o Pocahontas. Y su pasado en la animación es especialmente importante en La Caída de la Casa Usher… porque realmente estamos ante una adaptación a novela gráfica de una película de animación que dirigió en 2015, llamada apropiadamente Cuentos Extraordinarios, formada por cinco capítulos de diferentes estilos, siendo el protagonizado por los trágicos hermanos Usher el primero de ellos, narrado por el mismísimo Christopher Lee.
Esta novela gráfica está formada por fotogramas de la película, más o menos modificados para su traslación a este nuevo medio. Pero aunque la palabra «fotonovela» puede venir a la cabeza, la sensación que da no es esa en absoluto. Las imágenes de la película, aunque perfectamente reconocibles en el tomo que tenemos entre manos y levemente modificadas en algunos casos, están muy bien elegidas para contar la historia que todos conocemos. ¿Cómo? ¿Que no has leído La caída de la Casa Usher? Pues ya tienes deberes.
Tenemos aquí un par de ejemplos de fotogramas comparados con las correspondientes viñetas del cómic:
Como se puede apreciar, el estilo visual es algo que podría recordar a las películas de animación de Tim Burton con un filtro expresionista. Tiene un toque de oscuridad que le viene como anillo al dedo al tono oscuro y frío de la historia original. La composición de página partiendo de fotogramas de la película es narrativamente eficaz, y quien desconozca la existencia de la misma no notará que viene de un medio diferente. Aunque Raúl García no sea un autor de cómic, demuestra aquí tener un más que correcto control de la narrativa gráfica.
En resumen, un más que interesante producto para los aficionados a la literatura de terror, a Poe y a las adaptaciones a cómic de obras literarias. Y una carta de presentación para la película de Raúl García, que tras su estreno en Sitges hace varios años puede verse actualmente en Filmin.