Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Killer Groove

Killer Groove
Guion
Ollie Masters
Dibujo
Eoin Marron
Color
Jordie Bellaire
Formato
Cartoné. 144 páginas. Color
Precio
14,95€
Editorial
Planeta Cómic . 2021
Edición original
Killer Groove #1-5 (Aftershock)

Cuando Aftershock desembarcó en 2015 (parece que fue ayer) los focos se ponían sobre nombres como Garth Ennis, Warren Ellis, Sam Kieth, Donny Cates o Amanda Conner, pero paralelamente, siempre ha habido un hueco para autores pujantes aunque mucho más desconocidos como Christopher Sebela, Zac Thompson, Eliot Rahall o (quizá os suene) un por aquel entonces primerizo Jorge Fornés. Killer Groove es uno de esos experimentos sustentados en nombres no muy sonoros, pero con una solvencia fuera de toda duda y un futuro más que prometedor.

Killer Groove, de  Ollie Masters y Eoin Marron

Al guionista Ollie Masters lo conocemos fundamentalmente por The Kitchen, una serie en los últimos coletazos de Vertigo, que tal vez habría sido completamente olvidada de no haber contado con una adaptación cinematográfica, logro que parece haber repetido con Snow Blind para Boom!, que ya ha comprado Fox.

En una relativamente corta carrera tendría tiempo aún para escribir Sons of Anarchy: Redwood Original, donde ya coincidiría con su compañero de fatigas en Killer Groove. El dibujante Eoin Marron también es aún casi un debutante. Apenas lleva cuatro años como profesional y la mayoría de sus trabajos son números sueltos aquí y allá, pero viene apadrinado nada menos que por Declan Shalvey y Jordie Bellaire y la verdad es que tienen buen ojo.

Killer Groove, de  Ollie Masters y Eoin Marron

Killer Groove nos lleva, al igual que The Kitchen, a los años 70, pero esta vez saltamos a la costa opuesta. La historia nos presenta a Johnny y Jackie en un bar de mala muerte. Johnny es un músico fracasado que también trabaja como camarero en el bar. Jackie es una detective a la que echaron del cuerpo de policía y malvive refugiada en el alcohol. El mismo sitio y el mismo momento les llevará por caminos diferentes. Johnny matará accidentalmente a un tipo en una pelea, descubrirá que se le da realmente bien e iniciará una carrera como asesino a sueldo, que prospera a la vez que lo hace su música. Jackie, por otro lado, recibe un caso a la vez que aparece su tío de Miami, que está huyendo sin que sepamos muy bien de qué. Pero esto es solo el principio y qué decir tiene que los caminos de Johnny y Jackie volverán a cruzarse.

Killer Groove nos da un noir que nos puede recordar en cierto modo a la línea del Balas Perdidas de David Lapham o algunas historias de Alex de Campi (Smoke, Bad girls) con una estética cercana a la de John Mcrea (Hitman, Demon), donde quizá la mayor pega es que para cuando tenemos un vistazo completo de los personajes y una cierta simpatía, se nos acaba la historia. Hippies, niñas perdidas, mafia, hasta el FBI y la CIA, todo cabe en una historia como esta y es mérito de su autores trasladarnos una tonelada de información de forma sencilla, sin caer en lo expositivo, que se entremezcla con una fluidez y apariencia de sencillez poco habitual en dos autores de tan corta experiencia.

Killer Groove, de  Ollie Masters y Eoin Marron

También sorprende que siendo Eoin Marron un dibujante joven se decida por una estructura de tres tiras clásica y prácticamente inflexible, que maneja con soltura pese a lo conservador de la propuesta de base, y que centre sus esfuerzos en el apartado narrativo por encima de una estética, que quizá no entra al primer vistazo. También es cierto que cuenta con esa red de seguridad a prueba de todo, que es Jordie Bellaire, que no solo embellece los dibujos de Marron, sino que entiende los propósitos narrativos casi como si fueran suyos. Mención aparte merecen las portadas imitando viejos vinilos, que se degradan al mismo ritmo que la historia.

Dudo que Killer Groove vaya a poner en el estrellato a Masters y Marron, pero sin duda nos da mucho más de lo que esperamos de un par de nombres desconocidos y nos dejan una propuesta muy por encima de la media que nos viene dando Aftershock hasta la fecha, lo que al final es una agradable sorpresa.