Hace tiempo que las películas basadas en personajes del cómic superheroico marcan las direcciones de lo que ocurre en sus versiones de papel. Así, estamos acostumbrados a que se reediten ciertos tebeos cuando van a la pantalla, grande o pequeña, es igual. Tampoco es nuevo lo de que resucite talpersonaje para que esté en los tebeos a tiempo para el estreno -vale, o a raíz de él- o que se cambie el traje de tal otro para parecerse a la versión de imagen real. Y últimamente hasta se convierten en habituales temas que se exploran en las películas. De este modo, estando el MCU en plena Saga del Multiverso y a punto de estrenarse Spider-Man: Cruzando el multiverso, no es de extrañar que aparezcan aquí y allá historias de versiones multiversales de personajes como Jessica Jones: Las variantes o esta Universo Gwen protagonizada por Ghost Spider.
Aunque a un personaje urbano y de corte realista como Jessica Jones las historias multiversales no le pegan nada, hay que reconocer que para Spider Gwen (o Ghost Spider, como se llama últimamente) es un género que le viene como anillo al dedo. La propia Gwen Stacy de Tierra-65 es un personaje proveniente de una tierra paralela, y su debut fue durante la saga Universo Spiderman. Además el personaje vive saltando constantemente entre su Tierra-65 y la Tierra-616. El problema es que Universo Gwen, en lugar de comparar cómo fueron las cosas en diferentes universos paralelos, se dedica a mostrar versiones marcianas del personaje, en el que Gwen Stacy -o como se llame en cada Tierra- fue un personaje distinto del Universo Marvel. A fin de cuentas, exactamente lo mismo que vimos en Las variantes de Jessica Jones, en dos historias deudoras de lo visto en la primera temporada de Loki.
Universo Gwen arranca con Finale, un personaje de nueva creación, que en busca de fama y trascendencia trastea con energías que no controla y la línea temporal provocando un desbarajuste multiversal que hace que Gwen, con la ayuda de Spider-Cero tenga que recorrerse el multiverso encontrándose con versiones suyas en las que no fue una variación de Spiderman. Por su peregrinaje se encontrará con Gwens que fueron Thor, Iron Man, Lobezno, el Capitán América o incluso una Capitana Marvel. Por el camino y como adversarios, una versión de los Seis Siniestros llamada los Seis Terminales, entre los que tenemos una versión lovecraftiana de Octopus, una versión fosilizada de Stegron, una fusión entre Calypso y la Gata Negra o un tipo que fue el Duende Verde durante algo más de un año en la época en la que Len Wein escribió la serie a finales de los 70. Quizás haya más trabajo de imaginación en los villanos que en las variantes de Gwen, la verdad.
El guion es de Tim Seeley, un autor recordado por su obra Revival. En esta ocasión, nos cuenta una historia que está a medio camino entre un viaje psicológico de la protagonista y una historia de humor, quedándose en un extraño punto medio, que no molesta pero no llega a cuadrar del todo. Aún así, los diálogos están francamente bien escritos. Al César lo que es del César.
En el dibujo tenemos a Jodi Nishijima, una ilustradora de la que éste es el segundo trabajo que vemos en España, siendo el anterior un número de la serie limitada Los Estados Unidos del Capitán América. Tiene una cierta estética manga en sus planteamientos, aunque su narrativa, que aunque eficaz no es especialmente virtuosa, es bastante estándar dentro del cómic superheroico.
Universo Gwen es una lectura entretenida, con guion y dibujo correctos -tampoco mucho más- pero que nos deja con la poderosa sensación de «esto ya me lo han contado más veces». Un tomo para completistas del personaje y fans de las historias sobre variantes multiversales aunque estén hechas con plantilla.
